Cuaderno de Atenas

Prensa Latina

El nuevo gobierno de coalición griego, encabezado por el banquero Lucas Papademos, obtuvo hoy el voto de confianza del Parlamento con una holgada mayoría.

Sobre 293 diputados presentes, de un total de 300, 255 votaron a favor del ejecutivo y 38 lo hicieron en contra, según declaró el presidente del Parlamento, Filipos Petsalnikos.

Papademos pasó de este modo el primer envite para su gobierno de coalición integrado por el Movimiento Socialista Panhelénico (PASOK) del antiguo primer ministro Yorgos Papandréu, el conservador Nueva Democracia (ND) y la coalición de extrema derecha Laos.

No obstante, cuatro diputados del PASOK y dos de ND rompieron la disciplina de voto y lo hicieron contra el gobierno o se abstuvieron.

También el líder conservador Antonis Samaras fue crítico en su intervención y si bien dio su apoyo al ejecutivo insistió en que su partido no se comprometería por escrito con las medidas de austeridad exigidas por Bruselas para evitar la quiebra de Grecia.

Por su parte el nuevo primer ministro hizo hincapié durante su discurso ante el Parlamento de que asumió la jefatura del gobierno con plena conciencia de su responsabilidad y pidió el voto de confianza a los diputados “porque lo que está en juego es enorme”, afirmó.

Reiteró su llamado a la unidad de todos los partidos para seguir aplicando las directivas neoliberales impuestas por la Unión Europea (UE), y mantener al país dentro de la zona Euro.

En su repaso a las causas y desencadenantes de la crisis consideró que las medidas adoptadas hasta ahora por la UE fueron insuficientes en la mayoría de los países y los instrumentos financieros no tuvieron la flexibilidad necesaria para detener la propagación de la crisis.

Pese a ello mostró un infundado optimismo al afirmar que la Eurozona superará cualquier dificultad como la solvencia y liquidez del sistema bancario.

Tras el debate parlamentario estaba prevista una reunión entre el primer ministro y el director ejecutivo del Instituto Internacional de Finanzas, Charles Dallara, quien viajó hasta Atenas para concretar con el nuevo ejecutivo las decisiones tomadas en la Cumbre de Bruselas con respecto a las entidades financieras.

El acuerdo de rescate proporcionará un préstamo de 100 mil millones de euros para el estado griego y 30 mil millones como ayuda destinada a paliar las pérdidas de los bancos griegos al ser recortado en un 50 por ciento el valor de los bonos de la deuda soberana de la que eran titulares.