Ha pasado un año desde que el periodista Renato Álvarez, director del programa «Frente a Frente», de la Corporación Televicentro, de Honduras, fue condenado por un tribunal de justicia por los delitos de difamación, injuria y calumnia al divulgar un informe que revela los presuntos nexos del narcotráfico en la nación centroamericana. El Tribunal de […]
Ha pasado un año desde que el periodista Renato Álvarez, director del programa «Frente a Frente», de la Corporación Televicentro, de Honduras, fue condenado por un tribunal de justicia por los delitos de difamación, injuria y calumnia al divulgar un informe que revela los presuntos nexos del narcotráfico en la nación centroamericana. El Tribunal de Sentencia de la Sala Tercera, de la Corte Suprema de Justicia de Honduras, a cargo de los jueces Félix Ávila, Thelma Cantarero y Geraldina Mejía, condenaron al periodista a dos años y ocho meses de reclusión, al tiempo que le suspendieron una serie de garantías individuales como el ejercicio al sufragio y la custodia de sus hijos, entre otros. El comunicador ha apelado de la determinación del tribunal, pero hace un año sigue esperando por la decisión de la Corte de Justicia por la anulación de la sentencia, absolviendo de toda responsabilidad al periodista. Otro abogado introdujo un recurso de inconstitucionalidad a favor del periodista en la Sala de lo Constitucional de la Suprema Corte. Ninguna das dos apelaciones ha sido resuelta. Renato Álvarez dice que vive desde hace un año angustiado porque legalmente su destino sigue siendo incierto». «No cabe duda que la sentencia cumplió su propósito intimidatorio contra mi persona y la prensa en general. Si se fijan, ahora hay más periodistas desfilando ante los tribunales y se respira un ambiente de limitaciones al ejercicio de la libertad de expresión», lamenta. El caso de Renato Álvarez es inédito en Honduras. Es el primer periodista del país que enfrenta dos juicios orales y públicos por los mismos delitos y el mismo caso. En uno de los juicios fue absuelto, pero en el otro condenado. Él ha sido condenado por que en junio de 2003 difundió en su programa un informe que revela los supuestos nexos del narcotráfico en Honduras que menciona a más de 20 personas entre operadores de justicia y ex funcionarios públicos, así como a varios abogados. El informe tendría sido avalado por el ministro de Seguridad, Óscar Álvarez, quien no negó la versión e incluso dijo que el documento circulaba en el país desde hacía un año y era del conocimiento de altos funcionarios del Departamento de Estado (Cancillería) de Estados Unidos.