El día 30 de Agosto de 2005, el Editorial de Libertad Digital (que como se sabe, refleja el pensamiento de la dirección de un medio y se suele considerar que de todo él por extensión), hablaba sobre el «Katrina». Al margen de que naturalmente no comenta el bombo que se le ha dado al famoso […]
El día 30 de Agosto de 2005, el Editorial de Libertad Digital (que como se sabe, refleja el pensamiento de la dirección de un medio y se suele considerar que de todo él por extensión), hablaba sobre el «Katrina».
Al margen de que naturalmente no comenta el bombo que se le ha dado al famoso huracán que terminó por llegar debilitado a las costas estadounidenses, mientras se obvian los otros huracanes que arrasan zonas cercanas, o se los trata si acaso, con el típico punto de vista «compasivo» («pobres pobres» podría decirse), vamos a comentar un hecho que demuestra lo absurdo del posicionamiento liberal en general.
En realidad el editorial se dedica a negar que el Katrina como fenómeno meteorológico confirme las tesis ecologistas sobre el calentamiento global (o cambio climático) y por lo tanto, la utilidad del Protocolo de Kyoto (en línea con lo que piensan en Washington, por cierto).
Pero sin entrar en esto, que es una discusión aparte, el editorial saca otra conclusión, enfervorecido por llevar la «verdad» liberal al mundo:
«Pero si Katrina no puede enseñarnos nada sobre el incremento de las temperaturas y su relación con los huracanes, sí que puede darnos una lección mucho más valiosa sobre el efecto de la riqueza en los desastres naturales. No se tiene noticias aún sobre víctimas mortales pero, en el caso de que desgraciadamente las haya, es seguro que no serán demasiadas. La prosperidad de los ciudadanos estadounidenses ha facilitado que se produzca una evacuación masiva en muy poco tiempo. Las carreteras, los automóviles o los servicios de emergencia serían de mucha peor calidad. Se producirían las catástrofes en términos de vidas humanas que solemos ver en Centroamérica. Y es que la prosperidad salva vidas».
Interesante. EEUU, país rico, no habrá muertos (o hay dos que eran idiotas o eligieron la muerte).
Los últimos datos a la hora que escribimos esto, son que habría habido más de 80 muertos, y de hecho, las autoridades aseguran que hay muchos más que se irán confirmando a medida que los equipos de rescate accedan a las zonas afectadas. En la costa de Misisipí «la devastación es completa» (EL MUNDO.es). Podría haber cientos de muertos.
¿Qué dirá ahora Libertad Digital? Porque su tesis es que, dado esto, el Protocolo de Kyoto y cualquier cosa «socializante», perjudica esa riqueza.
Libertad Digital se ha pillado los dedos y está en un callejón sin salida por el propio carácter de sus ideas, falsas y diseñadas para la explotación. Es lo que pasa cuando se funciona a base de prejuicios.
El hecho es que en EEUU hay muchos pobres. Vimos miles de personas que simplemente no pudieron salir de esas zonas, porque ni fueron evacuadas, ni podían irse al no tener coche, por ejemplo. Abandonados a su suerte, con suerte (valga la redundancia) en un estadio en medio de la vorágine. Esa gente es naturalmente la que sufre las consecuencias. Los ricos no, claro, ellos evacuan. Los pobres se quedan. El «efecto de la riqueza».
Comparen con un país que Libertad Digital odia: Cuba. Allí el sistema de evacuación, estatal como corresponde a un país socialista o digamos simplemente decente, evacua efectivamente a la totalidad de la población amenazada. La ONU califica su sistema antihuracanes de ejemplar.
El huracán más grave que sufrió Cuba no hace mucho causó 2 muertos, cosa rara por cierto. Será que Cuba es rica. Y lo es, porque es socialista. No así los EEUU.
Aquí el infame editorial de Libertad Digital: http://www.libertaddigital.com/opiniones/opi_desa_26703.html