A pesar de la reforma legislativa nacional de salud, la atención sanitaria en Estados Unidos seguirá disminuida para muchos norteamericanos, con el resultado de más muertes y tragedias personales. Una reciente investigación de un equipo de Harvard estimó que 2.266 veteranos de guerra de Estados Unidos murieron en 2008 por no tener seguro médico, es decir, 14 veces el número de muertes sufridas por las tropas estadounidenses en Afganistán en 2008 y más del doble de los muertos desde que comenzó la guerra en 2001. Los investigadores de Harvard concluyeron que 1,46 millones de veteranos de guerra en edad de trabajar carecen de cobertura de salud, aumentando su índice de mortalidad. El periódico de salud American Journal of Public Health reveló que las probabilidades de muerte de un individuo sin seguro aumentan en 40%, según el estudio de Harvard.
El Dr. David Himmelstein, co-autor del análisis y profesor asociado de medicina en Harvard, comentó: «Estas muertes innecesarias continuarán bajo la nueva legislación de reforma de salud. Hasta 2013, la ley no hará virtualmente nada para quienes no tienen seguro y, por lo menos, deja a 17 millones de personas sin seguro a largo plazo».
En un relato relacionado con desigualdades en la atención sanitaria, a las hijas gemelas de Stacie Ritter se les diagnosticó cáncer a los cuatro años. Necesitan trasplantes de células madre y otros tratamientos contra el cáncer. Las gemelas sobreviven, pero las glándulas que controlaban su crecimiento están dañadas más allá de la reparación que ofrece el tratamiento. Para continuar creciendo, los médicos recomendaron aplicaciones regulares de inyecciones de crecimiento basadas en hormonas. La compañía del marido de Stacie cambió el seguro médico a la transnacional Cigna, y ésta rechazó cubrir la aplicación de hormonas. Stacie paga 440 dólares cada vez que lleva a sus hijas al médico para inyectarlas. El incidente marca apenas el último capítulo de los problemas que enfrenta esta familia con la industria aseguradora de salud. Entre el tratamiento contra el cáncer y el cuidado médico denegado, Stacie y su marido tuvieron que declararse en quiebra debido a sus altos gastos médicos. El año pasado, el gerente de Cigna, Ed Hanway, ganó 12,2 millones de dólares, o sea, 5.883 dólares por hora.
Las leyes de seguro médico son a menudo complejas en los estados en que el seguro médico está legalmente controlado. En ocho estados, y en el distrito Columbia, las compañías de seguros pueden alegar que están facultadas para negar la cobertura del seguro médico si el cónyuge tenía una mala condición de salud preexistente. Las compañías niegan legalmente atención médica a las víctimas de violencia en el hogar porque dicen que ésa es una condición preexistente y que no puede ser cubierta. En 1995 se encontró que 9 compañías involucradas negaron o cancelaron la cobertura a mujeres que fueron golpeadas: Nationwide, Allstate, State Farm, Aetna, Metropolitan Life, The Equitable Companies, First Colony Life, The Prudential y Principal Financial Group. Los estados que todavía permiten esta práctica son Idaho, Dakota del Norte, Dakota del Sur, Mississippi, Carolina del Norte, Carolina del Sur, Oklahoma y Wyoming.
Según los investigadores de Johns Hopkins, un estudio publicado el 29 de octubre de 2009 en el Journal of Public Health permite más que ningún otro observar el impacto del seguro en la cantidad de muertes evitables y el potencial de vidas de niños enfermos que podrían salvarse en Estados Unidos.
Analizan más de 23 millones de expedientes de hospitales de 37 estados entre 1988 y 2005, los investigadores de Johns Hopkins compararon el riesgo de muerte entre niños con y sin seguro. Algunos factores resultaron iguales, pero en su estudio los investigadores encontraron que los niños sin seguro tenían 60% más de probabilidades de morir en el hospital que aquellos con seguro. Al comparar índices de mortalidad por enfermedad subyacente, los niños sin seguro aparecieron con aumento del riesgo de muerte, independientemente de la naturaleza de su dolencia. Los resultados capturan solamente muertes durante la hospitalización y no reflejan muertes ocurridas después, fuera del hospital, ni contabilizan a los niños que murieron sin haber sido nunca hospitalizados, dijeron los investigadores. Esto significa que el número real de víctimas mortales sin seguro podría ser incluso más alto.
«Si ustedes son niños sin seguro, seriamente enfermos e internados en un hospital, tienen 60% por ciento más de probabilidades de morir que el niño enfermo del cuarto del lado que tiene seguro», dijo al principal investigador Fizan Abdullah, MD, PhD, cirujano pediátrico del Centro de Niños del Johns Hopkins.
Mientras no sea revisado el nuevo plan nacional de cuidado de salud, algunos de los problemas descritos afectarán a miles de personas que continuarán sufriendo durante muchos años por venir Estados Unidos.
Actualización del Dr. Steffie Woolhandler
A fines de 2009, en el apogeo de la discusión de la reforma de salud, divulgamos que 1,54 millones de veteranos de guerra de Estados Unidos estaban sin seguro en 2008 y que se esperaba que 2.226 personas murieran por falta de cobertura médica.
Basando el análisis en nuestro recientemente informe -publicado en el American Journal of Public Health- encontramos que la carencia de seguros aumenta las probabilidades de muerte en 40%. Por lo tanto, la ausencia de seguro médico causa 44.798 muertes cada año entre los 46 millones de norteamericanos sin seguro. Combinamos estos datos con las tabulaciones del número de veteranos sin seguro de la Encuesta de Población 2009, realizada a partir de marzo por la Oficina de Censos, que interrogó a los estadounidenses con estatus de veterano sobre su cobertura de seguro. Solamente clasificamos como veteranos sin seguro, ni cobertura de seguro de cuidado médico, a quienes estaban atendiéndose en hospitales o clínicas de la Administración de Salud de los Veteranos (VA, por su sigla in inglés).
Estimamos que el año pasado hubo 2.266 muertes asociadas a la falta de seguro médico entre los veteranos no-mayores. Este resultado supera más de 14 veces el número de muertes (155) sufridas ese año por las tropas de Estados Unidos en Afganistán, y es más del doble de quienes han muerto desde el principio de la guerra.
Mientras muchos norteamericanos creen que todos los veteranos pueden conseguir atención del VA, existen veteranos de combate que no pueden conseguir atención de ese servicio. En general, las instalaciones del VA proporcionan cuidado médico a cualquier veterano que esté inhabilitado por una condición conectada con el servicio militar y otorgan tratamientos para dolencias específicas adquiridas durante el servicio militar. Los veteranos de ingresos bajos que aprueban un test son elegibles para recibir cuidado en instalaciones del VA, pero en una condición de baja prioridad (prioridad 5 o prioridad 7), dependiendo del nivel de ingresos. Los veteranos con ingresos más altos son clasificados en el grupo de prioridad más baja, y no son elegibles para la inscripción en el VA.
Como otros norteamericanos sin seguro, la mayoría de los veteranos sin cobertura son trabajadores demasiado pobres como para alcanzar una cobertura privada, pero no lo suficiente pobres como para calificar en el Medicaid, el seguro de salud del gobierno, o aplicar al cuidado médico dependiente del VA. Desafortunadamente, la falta de seguro continuará causando muertes, a pesar de la nueva ley de reforma de la salud. Según la Oficina del Presupuesto del Congreso, 23 millones de norteamericanos seguirán no teniendo seguro en 2019, cuando la ley se aplique completamente. Esto se traducirá en cerca de 23.000 muertes innecesarias al año. Lamentablemente, el Congreso cedió a las presiones de la industrias farmacéutica y del seguro, y rehusó considerar la implantación del seguro médico nacional de pagador simple, que habría cubierto completamente a todos los estadounidenses.
Para más información, visite Physicians for a National Health Program (www.pnhp.org), una organización de investigación y educativa de 17.000 médicos que apoyan el seguro médico nacional de un solo pagador.
Actualización del Centro de Niños de Johns Hopkins
La falta de seguro médico pudo haber conducido, o haber contribuido en menos de dos décadas, a casi 17.000 muertes de niños hospitalizados en Estados Unidos, según la investigación conducida por el Centro de Niños de Johns Hopkins.
Según los investigadores de Hopkins, el estudio publicado el 29 de octubre en el Journal of Public Health es uno de los más grandes nunca hechos para mirar el impacto del seguro en el número de muertes evitables y el potencial para salvar vidas de niños enfermos en Estados Unidos.
Usando más de 23 millones de expedientes de hospitales obtenidos en 37 estados entre 1988 y 2005, los investigadores de Hopkins compararon el riesgo de muerte entre niños con y sin seguro. Siendo otros factores iguales, los investigadores encontraron en su estudio que los niños sin seguro eran 60% por ciento más susceptibles de morir en el hospital que aquellos con seguro. Al comparar índices de mortalidad por enfermedad subyacente, el estudió encontró que el niño sin seguro poseía un incremento del riesgo de muerte, independientemente, y sin importar, su dolencia. Los resultados capturan solamente muertes durante la hospitalización y no reflejan muertes después de la salida del hospital, ni contabiliza a los niños que murieron sin recibir nunca hospitalización, y esto significa que el número real de víctimas mortales de niños sin seguro podría ser incluso más alto.
«Si usted es un niño sin seguro, y si está seriamente enfermo y termina en un hospital, usted pertenece al 60% con más probabilidades de morir que el niño enfermo del cuarto siguiente que tiene seguro», dijo el principal investigador Fizan Abdullah, M.D., Ph.D., cirujano pediátrico del Hopkins de Niños.
Los investigadores advirtieron que el estudio examinó expedientes de hospital después del hecho de la muerte, así que no pueden establecer directamente causa-efecto entre seguro médico y riesgo de muerte. No obstante, debido a el volumen de expedientes analizados y debido a la capacidad de los investigadores para identificar y eliminar la mayoría de los factores que típicamente nublan este tipo de investigación, el análisis muestra un potente vínculo entre el seguro médico y el riesgo de muerte, dijeron.
¿»Podemos decir con absoluta certeza que habríamos salvado a 17.000 niños si hubieran tenido seguro médico? Por supuesto no», dijo el co-investigador David Chang, Ph.D. M.P.H. M.B.A. «El punto aquí es que un número considerable de niños pudo ser salvado por cobertura de salud».
«Desde una perspectiva científica, nos sentimos confiados en nuestro hallazgo de que murieron millares de niños probablemente porque carecieron de seguro o debido a factores relacionados directamente con la falta de seguro», añadieron.
Dado que más de 7 millones de niños norteamericanos americanos siguen estando sin seguro en Estados Unidos, en medio de la lucha de esta nación por reformar la atención sanitaria, los investigadores dicen que deben prestarle atención a sus resultados los responsables políticos y, de hecho, la sociedad en conjunto.
«Millares de niños mueren innecesariamente cada año porque carecemos de un sistema de salud que les proporcione seguro médico. Esto no debe ser», dijo el co-investigador Peter Pronovost, M.D., Ph.D., director de Cuidados de Medicina Crítica del Johns Hopkins y director médico del Centro para las Innovaciones en Calidad de Atención a los Pacientes. «En un país tan rico como el nuestro, es una moraleja la necesidad de proporcionar seguro médico a millones de niños que no lo tienen, no un problema económico», añadió.
En el estudio, 104.520 pacientes murieron (el 0,47%) entre 22,2 millones de niños asegurados hospitalizados, comparados con 9.468 (el 0,75%) que murieron entre 1,2 millones de pacientes sin seguro. Para descubrir qué porción de estas muertes habría sido prevenida por el seguro médico, los investigadores realizaron una simulación estadística mediante la proyección de datos de expectativa de muerte de pacientes no asegurados, basados en la severidad de sus dolencias, entre otros factores, y después aplicaron este número previsto de muertes al grupo sin seguro. En el grupo sin seguro, había 3.535 más muertes que lo esperado, no explicadas por la severidad de la enfermedad u otros factores. Yendo un paso más lejos y aplicando excesivo número de muertes a la cantidad total de hospitalizaciones pediátricas en Estados Unidos para el período en estudio (117 millones), los investigadores encontraron un exceso de 16.787 muertes entre casi seis millones de niños sin seguro que terminaron hospitales durante ese tiempo.
Otros resultados del estudio:
• Fueron vistos más niños sin seguro en hospitales del Noreste y Cercano Oeste que en el Sur y el Oeste. Sin embargo, los hospitales del Noreste tenían tasas de mortalidad más bajas que los hospitales del Sur, del Cercano Oeste y del Oeste.
• Los niños asegurados incurrieron en el hospital en un promedio de gastos más altos que la carga media contraída por los niños sin seguro, muy probablemente explicable por el hecho de que los niños sin seguro tienden a presentarse en el hospital en etapas más avanzadas de su enfermedad, que a su vez da menos oportunidades a los médicos para intervención y tratamiento, especialmente en los casos terminales, dijeron los investigadores.
• Los pacientes sin seguro buscaron con más frecuencia tratamiento a través de la sala de urgencias, más que con una remisión de un médico, probables indicativos de una etapa más avanzada de la enfermedad y/o retrasos en buscar atención médica.
• El estatus de asegurado no afectó cuánto tiempo total pasó un niño en el hospital.
La investigación fue financiada por el Fondo Robert Garrett para el Tratamiento de Niños. Los co-investigadores en el estudio incluyen a Yiyi Zhang, M.H.S.; Thomas Lardaro, B.S.; Marissa Black; y Paul Colombani, M.D.
Estudiantes investigadores:
Delana Colvin, Shannon Cree, Anna Kung, DePauw University
Michaella Armanino, Kimberly Sullivan, Tracena Webster, Sonoma State University
Evaluadores académicos:
Rebecca Bordt y Kevin Howley, DePauw University
Suzel A. Bozada-deas, Peter Phillips y Ben Frymer, Sonoma State University
Fuentes:
-Ryan Grim, «When Getting Beaten By Your Husband Is A Pre-Existing Condition,» Huffington Post, September 14, 2009,
-Fizan Abdullah, Johns Hopkins Children’s Center, «Lack of Insurance may have figured in nearly 17,000 childhood deaths, study shows,» Journal of Public Health, San Francisco Bay View, November 7, 2009, http://www.hopkinschildrens.org/Lack-of-Insurance-May-Have-Figured-In-Nearly-17000-Childhood-Deaths.aspx
Traducción: Ernesto Carmona (especial para ARGENPRESS.info)
Fuente original: http://www.argenpress.info/2010/09/proyecto-censurado-2011-06-estados.html