En Suecia fueron otorgados los Premios Nobel Alternativos 2008. DW-WORLD habló con una de las galardonadas: la periodista estadounidense Amy Goodman, fundadora y presentadora del programa radial «Democracia Ahora». La ginecóloga alemana de origen italiano Monika Hauser fue honrada por la Fundación Right Livelihood de Estocolmo por su labor en defensa de mujeres violadas en […]
En Suecia fueron otorgados los Premios Nobel Alternativos 2008. DW-WORLD habló con una de las galardonadas: la periodista estadounidense Amy Goodman, fundadora y presentadora del programa radial «Democracia Ahora».
La ginecóloga alemana de origen italiano Monika Hauser fue honrada por la Fundación Right Livelihood de Estocolmo por su labor en defensa de mujeres violadas en regiones afectadas por guerras y crisis. «Mi primera reacción fue de incredulidad», dijo la ginecóloga. «Yo pensaba que un premio así lo ganaba gente que realmente hubiera transformado el mundo», destacó.
Hauser, fundadora de la organización humanitaria Medica Mondiale, comenzó a principios de los años 90 a organizar acciones de ayuda a mujeres violadas durante las guerras balcánicas y después extendió esta labor a otros países afectados por guerras o crisis, como Afganistán y la República Democrática del Congo.
Otro premio fue otorgado a la defensora somalí de los derechos de la mujer, Asha Hagi y el cuarto, al matrimonio indio Jagannathan, fundador de la organización LAFTI, que se ha destacado por la defensa de la justicia social. Los galardonados compartirán un premio equivalente a 290.000 dólares que será dividido en cuatro partes. El filántropo sueco-alemán Jakob von Uexkull fundó los premios en 1980 para reconocer trabajos que él pensaba estaban siendo ignorados por los Nobel.
Periodismo político e independiente
La periodista estadounidense Amy Goodman fue galardonada por fundar y conducir el programa de noticias de radio y TV Democracia Ahora. «El programa es un ejemplo de un formato innovador en el periodismo político e independiente que lleva a la sociedad voces alternativas a la corriente dominante en los medios, voces que a menudo son discriminadas», dice la Fundación Right Livelihood en su página en Internet.
DW-WORLD encontró a la periodista en su departamento en Nueva York a las 6:30 AM hora local.
DW-WORLD: ¿Cómo influenciará este premio su trabajo?
Amy Goodman: Estoy tan emocionada, siento que es un gran honor para «Democracia ahora», porque llamará la atención sobre lo que es el poder de los medios como fuerza para la paz y refuerza un medio que construye puentes entre comunidades, en vez de ser el abogado de quienes bombardean esos puentes.
¿Qué es lo que la motivó a iniciar «Democracia ahora»?
Comenzamos «Democracia ahora» hace 13 años en medio de otro año electoral, en 1996. Ahora estamos en el 2008 y probablemente ante la más importante elección de la historia de Estados Unidos. La idea era hacer escuchar aquellas voces de movimientos de base, esa gente cuyas decisiones pesan, no a un alto nivel pero los que se están organizando en sus comunidades, los que son la verdadera fuerza social en Estados Unidos y en otros países del mundo.
En sus transmisiones de ayer hizo usted un comentario crítico sobre la crisis financiera y sobre cómo los grandes bancos y las compañías financieras necesitan ser rescatadas con dinero de los contribuyentes, cuando éstos no tienen ni voz ni voto en estas decisiones, ¿cuál cree usted que es la lección de esta crisis financiera?
La historia de esta crisis es la historia del rescate de los más ricos de Estados Unidos por parte de aquellos que no tienen dinero, la gente más pobre, la gente que ha perdido sus casas por la crisis inmobiliaria. Es ésta la gente que tendría que ser rescatada, eso demuestra quién tiene el poder en este país, pero hay una fuerza más poderosa y es la que detentan todos aquellos que actúan unidos en la defensa de una sociedad más justa.
¿Cómo cree usted que esta crisis afecte las elecciones estadounidenses?
Ambos candidatos llegaron a un mutuo acuerdo, ambos reciben millones de dólares de Wall Street. Ambos tienen asesores que están profundamente inmersos en esta catástrofe global, son parte del motor. Desafortunadamente ninguno se diferencia realmente del otro, así que no es una verdadera elección entre dos candidatos que ofrezcan distintas alternativas para sacar adelante la economía.
¿Qué clase de consecuencias cree usted que tenga esta crisis a largo plazo en Estados Unidos?
Aquellos que han despilfarrado millones de dólares son los que son ahora rescatados por gente que trabaja duro en todo el país. Tenemos que echar una mirada crítica a nuestro sistema económico. ¿Cómo es posible que las regulaciones hayan sido hechas a un lado para que pudiéramos llegar al punto en el que estamos ahora? Ahora todo depende de cómo respondan los movimientos sociales y la calle a Wall Street.
Su programa es traducido al español y es escuchado de numerosos países en América Latina, en Estados Unidos y en Europa ¿cómo se explica su éxito?
La gente está hambrienta de voces independientes en todo el mundo. Estamos experimentando una concentración de los medios en manos de unos cuantos magnates y pese a que hay miles de canales, hay cada vez menos variedad de opiniones. En ese sentido «Democracia Ahora» es única porque presenta esa gran diversidad de opiniones que caracterizan a una sociedad democrática en vez de ir a ese pequeño círculo que sabe tan poco sobre mucho, que se la pasa explicándonos lo que pasa y lo confunden todo. Yo veo a los medios como una gigantesca mesa de cocina en torno a la que nos sentamos todos y discutimos las principales noticias del día. Guerra y paz, vida y muerte, y si no puede ser así, eso es una distorsión de la sociedad democrática.