En el mundo existen miles de radios que, oponiéndose a la lógica comercial de los grandes medios, trabajan de hecho por la democratización de la comunicación y la información. Son las denominadas radios comunitarias, alternativas, populares, libres, campesinas, vecinales, contrahegemónicas y barriales, entre otras. Cada uno de estos tipos de radio tiene sus especificidades, pero […]
En el mundo existen miles de radios que, oponiéndose a la lógica comercial de los grandes medios, trabajan de hecho por la democratización de la comunicación y la información. Son las denominadas radios comunitarias, alternativas, populares, libres, campesinas, vecinales, contrahegemónicas y barriales, entre otras.
Cada uno de estos tipos de radio tiene sus especificidades, pero comparten visiones generales sobre la comunicación, las cuales son diametralmente opuestas a las de los grandes medios. Por esto, las llamaremos radios sociales en contraposición a las radios comerciales.
Estas radios funcionan con lógicas distintas a las imperantes en los medios masivos sostenidos por empresas: tratan de difundir informaciones y enfoques que no están presentes en los medios hegemónicos; cumplen un rol dentro de sus comunidades en tanto aglutinantes; ofrecen otras posibilidades de participación de los oyentes, otorgando espacios para el debate y para la producción concreta de programas de los miembros de las comunidades.
Estas prácticas resultan un gran aporte a la construcción de una democracia fuerte en la que se respeten los Derechos Humanos y en la que todas las personas gocen de igualdad de oportunidades. Los derechos a la comunicación, a la información y a la expresión, son derechos humanos sumamente vapuleados. Fortalecer a los medios alternativos es sinónimo de trabajar por el respeto de los mismos.
Son varios los desafíos que deben plantearse al respecto. Para las radios sociales, que propendan a realizar programaciones plurales, completas y de calidad para que su rol sea efectivamente ejercido. Para el Estado, protegerlas a través de políticas de comunicación democráticas.
Por esto, apoyar estos pequeños reductos con gran poder democratizador es un desafío para todos. No sólo conociéndolos y escuchándolos sino, sobre todo, formando parte activa de los procesos de comunicación social que en ellas se materializan. Porque, en definitiva, los medios se construyen con todos y para todos.
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Inés Binder es Subdirectora Centro de Producciones Radiofónicas y Francisco Godinez Galay es Director Centro de Producciones Radiofónicas
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El Centro de Producciones Radiofónicas es una Organización No Gubernamental que trabaja en la producción de contenidos alternativos para radios comunitarias y otros tipos de aporte a la democratización de la comunicación.