Entrevistamos a Miguel, de Indymedia Brasil y colaborador de Indymedia Estrecho, a su paso por Madrid en la gira de presentación de Brad. Una noche más en las barricadas, un vídeo sobre Brad Will, el activista de Indymedia asesinado en Oaxaca, que además reflexiona y hace un retrato de su generación política. DIAGONAL : ¿Cómo pensaste […]
Entrevistamos a Miguel, de Indymedia Brasil y colaborador de Indymedia Estrecho, a su paso por Madrid en la gira de presentación de Brad. Una noche más en las barricadas, un vídeo sobre Brad Will, el activista de Indymedia asesinado en Oaxaca, que además reflexiona y hace un retrato de su generación política.
DIAGONAL : ¿Cómo pensaste hacer el documental sobre Brad ?
MIGUEL : Brad era mi amigo y su muerte me tocó muy de cerca, tenía la sensación de que podría haber sido yo o cualquier persona de Indymedia Brasil. Hacía lo mismo que yo y de forma muy parecida. Lo conocí cuando fui a Nueva York a presentar el vídeo de São Paulo. Estuve un mes en el local de Indymedia y él me llevó a los sitios, me presentaba a la gente, me explicaba las cosas. Luego Brad vino a Río, estuvo en mi casa, y nos vimos en el Foro Social Mundial. Cuando lo mataron, me llamaron y yo no sabía qué decir. Luego pensé que en 2001 había grabado una entrevista larga con Brad, que tenía que colgarla en Indymedia. Ahí vi la cinta otra vez, la grabé para un proyecto que no llegué a montar, quería hablar de demasiadas cosas, de Indymedia, del movimiento antiglobalización, de las diferencias entre EE UU y Brasil… En la entrevista estaba eso, preguntaba a Brad sobre Seattle, cómo veía la acción directa. Tenía también cintas grabadas por él. Fui mezclando el material y empecé a trabajar, a mirar otras cintas y ahora el vídeo es las dos cosas : un documental sobre Brad, pero no sólo sobre Brad… no cuento su biografía, también hablo de las luchas donde estuvo.
D. : ¿Cómo conseguiste la última cinta de Brad en Oaxaca ?
M. : Mientras recopilaba y montaba la primera versión del documental, vi que se llevaba a cabo el I Festival Anarquista de Nueva York en homenaje a Brad y me pareció que tenía que presentar el documental allí. Resultó que los que organizaban el festival eran amigos de Brad y estaban muy liados montando las imágenes que tenían de él. Yo me puse a ayudarles y lo que me dieron para montar fue la última cinta que grabó Brad en Oaxaca. Pensaron que yo tenía que tener esas imágenes y yo sentía, y siento, que era casi una obligación dar a conocer esas imágenes. Él había muerto para grabar eso y yo tenía que darlas a conocer.
D. : ¿Se trata, como dices en el vídeo, de «pasar el testigo» ?
M. : Sí… la cámara se convierte en distintas cosas. Al principio del video, nos representa a todos. También es un arma, que permite enfrentarse a un policía armado. La cámara como máquina del tiempo : cuando Brad filma la muerte de un compañero es como si estuviera grabando lo que le pasó a él después. Y luego, la cámara como ‘pasar el testigo’, yo lo veo mucho así, porque cuando Brad cae, ya hay alguien que coge la cámara, se la pone en el hombro y sigue grabando. Metafóricamente es como si esa cámara hubiera estado paseando de la mano de muchas otras personas. Cuando el vídeo llegó hasta mí, lo que tenía que hacer, según digo en el vídeo, es «correr hasta la línea de llegada», que en este caso es que la gente lo vea. Y cada uno que lo ve, le da sentido a eso.
D. : ¿Cómo conseguiste financiación ?
M. : Gran parte del trabajo es voluntario. La primera versión para llevarla al festival necesitaba traducción, lo subí a la web de Indymedia y dije que necesitaba ayuda. Lo partimos en bloques de pocos minutos y me fui a cenar ; cuando volví, la traducción ya estaba hecha. Es un ejemplo de la fuerza que puede tener la colaboración que hay en Indymedia. Yo trabajaba en otra cosa mientras montaba, pero me quedé sin dinero, entonces la gente de Intermedia de Sevilla y otra productora me dieron recursos para acabarlo.
D. : ¿Dirías que es un documental colaborativo ?
M. : Sí, y de ahí viene lo de firmar como «VideoHackers». Veo bien que se conozca a la gente que lo ha hecho, por si te gusta o quieres una copia, pero nunca me ha gustado firmar. La idea de que sea una firma anónima viene de cuestionar la figura del «artista». Firmarlo en plural es porque, por más que yo haga mucho curro solo en mi casa, montando, hay todo ese montón de gente que ayuda y gente que desde el principio de Indymedia ha estado, es difícil decir cómo ha colaborado pero ha sido fundamental. «VideoHackers» es una manera anónima y colectiva que tengo de firmar en nombre de toda esa gente. El nombre viene del libro La ética hacker, que habla del hacker no como un informático, sino como una actitud, de compartir conocimiento… Uno puede ser un agrónomo hacker, un profesor hacker, y yo pensé en un VideoHacker : no se trata de saber de vídeo y ordenadores, es la actitud hacker en el vídeo.
D. : ¿Es de libre distribución ?
M. : Sí, es copyleft, Creative Commons, autoría-nolucrativa-compartir igual. La industria cultural tal y como está no sólo no sirve, sino que no va a ningún lado y nosotros con iniciativas así es como lo vamos a cambiar. Y con las giras lo que intento es crear circuitos de distribución, si el documental no llega al cine ni a la tele, habrá que recorrer todos los sitios donde se pueda poner.
D. : ¿Por qué alguien debería verlo ?
M. : No es un documental sólo sobre Brad ni sobre Oaxaca. Creo que habla de muchas más cosas y que es la historia que habla de muchos movimientos, de muchas luchas. Acaba siendo un vídeo que en realidad es la historia de mucha gente.
D. : ¿Cómo empezaste a hacer vídeo ?
M. : Hice la carrera de cine en la Universidad de Río de Janeiro. Entonces no había cámaras digitales ni ordenadores y nos juntamos unos amigos para comprar uno con la idea de empezar a trabajar. Yo aprendí haciendo. Antes de que comenzáramos con Indymedia, en São Paulo ya llevaban meses funcionando. Coincidiendo con una gran manifestación contra el ALCA fuimos a conocerles. La idea era crear un Indymedia Brasil. Grabé la manifestación y luego hicimos un documental que hemos utilizado muchísimo por todo Brasil. Íbamos presentando Indymedia, que era una cosa muy nueva porque allí no había páginas de contrainformación. Indymedia creció muy rápido y el poder del vídeo quedó muy claro