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De la caída de Fidel al tropezón del Rey, trato mediático

Fuentes: Kaos en la Red

El 21 de octubre de 2004, luego de un largo discurso en Santa Clara (Cuba), el comandante Fidel Castro se retiraba marcialmente del templete, caminaba sin importarle sus más de 70 años, con la marcialidad que obliga la ovación, de pronto, un escalón ciego apareció al paso, Fidel cayó casi sin meter las manos, su […]

El 21 de octubre de 2004, luego de un largo discurso en Santa Clara (Cuba), el comandante Fidel Castro se retiraba marcialmente del templete, caminaba sin importarle sus más de 70 años, con la marcialidad que obliga la ovación, de pronto, un escalón ciego apareció al paso, Fidel cayó casi sin meter las manos, su rodilla recibió todo el impacto del golpe así como su clavícula, fotografías e imágenes recorrieron el mundo llevando «pies de foto» con diferentes mensajes casi todos neosubliminales, ¡Cae Fidel!, ¡El comandante cae!» la nota tuvo larga vida, y claro, luego de la nota, las crónicas, las columnas, editoriales, es decir, la nota se paseó por todos los géneros periodísticos, incluso, en México fue material base para las ya famosas «mangas del chaleco», sección de Blooper’s políticos y otras mañas.

El 29 de abril de este año que estamos tragándonos, en el palacio del Congreso de Barcelona, en La Coruña, y luego de haber dirigido un mensaje al «círculo de economía» Juan Carlos de Borbón se fue de bruces, otro mal puesto escalón se atravesó, ahora fue en el real camino del monarca español, al rey lo escoltaban altos mandos navales y animales políticos quienes al ver tropezar al rey perdieron el estilo pues se apresuraron a ayudar al desequilibrado jerarca, (desequilibrado por eso de estar a punto de caer, entiéndase), la nota del «País» dice, que un oportuno guardaespaldas de su majestad reaccionó oportunamente, ¡La manga¡ el gachí ni se lo esperaba, Juan Carlos le cayó del cielo. Al día siguiente, la nota, la crónica bonita, el ágil accionar de la guardia real y a otra cosa.

¿Interesante verdad? Eso se llama «MANEJO DE MEDIOS» y lo resalto así ya que hoy, a tan sólo horas de la caída de su majestad, nada, el silencio en todos los espacios mediáticos, tal vez por ahí algún «decidor de noticias» comente algo pero de las notas amarillas o rosas nada, ¿Qué entendemos con esto? No se usted, lo que mis dos centímetros de frente me dejan saber es que, el control que han tomado los mexespañoles en los medios mexicanos (electrónicos e impresos), es para poner atención, bastó sólo este análisis (la caída de Fidel y el tropezón del rey), para poner algo tangible en la idea de que LOS MEDIOS tienen dueños, y esos dueños tienen intereses, y sus intereses los obligan a proteger los símbolos españoles, ah, pero cuando se trata de raspones mediáticos a los enemigos del conservadurismo o carlismo español, hasta sueltan a los sabuesos.

Un apunte más; en México estamos a punto de pasar de la desesperanza a la furia, el mexicano promedio, entiéndase con ésto, el mexicano que se interesa por la política tanto como de los triunfos de la golfista Lorena Ochoa (en México ni siquiera el 1% de la población ha pisado un campo de golf, pero, una vez más, el manejo de medios ha colocado a esta extraña tapatía como ejemplo a seguir), prefiere seguir viviendo en lontananza, apoltronado en su zona de confort y recargando su ánimo en eventos propios de Chaplín, Harold Lloyd o Keaton. A esta gente común lo que más le atrae es regodearse en los «escapes» que suelen dar los medios, atiende más a la prensa rosa que al análisis político, ah, pero cuando se trata de ver cómo exponen a un político en desgracia, el asunto es tan apetecible como un sorfista a un tiburón.

La caída de Fidel allá en Santa Clara en el 2004, y el heroico ejercicio de Seguridad de un escolta de su majestad Don Juan Carlos I de Borbón (léase mi rostro idéntico al de Gila y mi vocabulario igual al de Cantinflas), rescatando de la caída libre al rey, hace sólo unas horas y, el tratamiento que le dio la PRENSA en México a esos asuntos, es una clara muestra del entreguismo a las pesetas (ahora euros), que vienen de la madre patria.- Último Patrullaje.- Ah, pero eso de la «construcción de las realidades», no es sólo una herramienta de la creme politik, en los gobiernos de las entidades federativas mexicanas ya también utilizan la repetición de la mentira mil veces hasta que se convierta en realidad, por lo que este escribidor se ha convertido en una suerte de exegesista de tabloides y periódicos, y, créame, la tenebra es igual en todas las esferas donde se vive de los frutos de la política.- Balazo al aire, y ya que hablamos de construcción de la verdad ¿Sabe usted de quién son estas palabras? ‘Nunca existió una tarea más importante… Nos pide que demos todo de nosotros mismos, pero a cambio nos da la mayor de las satisfacciones; la conciencia de que participamos en la construcción de un futuro mejor. Llevamos sobre nuestros hombros una partícula de las esperanzas de la humanidad y de que nuestra vida no será vivida en vano’.