Unas veces de forma más o menos intencionada y otras, quiero pensar, que simplemente debido a la casualidad, los titulares de la prensa terminan diciendo algo muy distinto a lo que realmente debían decir si su objetivo fuera no faltar a la verdad. Los hay que dicen algo distinto o incluso contradictorio a lo que […]
Unas veces de forma más o menos intencionada y otras, quiero pensar, que simplemente debido a la casualidad, los titulares de la prensa terminan diciendo algo muy distinto a lo que realmente debían decir si su objetivo fuera no faltar a la verdad. Los hay que dicen algo distinto o incluso contradictorio a lo que bajo ellos explica el texto desarrollado de la noticia. Hay titulares que de un día para otro se convierten en contradicciones del propio medio sin que se hayan producido grandes novedades en los hechos a los que se refiere. En otras ocasiones reflejan un trato radicalmente distinto para el mismo tipo de hechos en función de quién sea o a quien represente el protagonista de la noticia.
Por todo ello y puesto que no cabe pensar que los medios vayan a reconocer nunca esos «fallos», aquí va la primera entrega de esta nueva sección de Impresiones Mías que lleva por nombre «Fe de erratas» .
Fe de erratas correspondiente a la semana 28 de 2011, del lunes 11 de julio al domingo 17.
- Tras el largo e interminable acoso de los mercados sobre los llamados países periféricos europeos o PIGS ( Portugal, Irlanda, Grecia y España) en el llamado asunto de la «crisis de la deuda», le llegaba el turno a Italia, para quien las primeras amenazas se tradujeron en recortes sociales por valor de 40.000 millones de euros. El diario mexicano El Universal en su edición del lunes 11 de julio publicaba una nota al respecto bajo el engañoso título de: «Italia agudiza la crisis de la deuda pública en Europa[1]». Para aquellos que leen la prensa repasando únicamente los titulares puede quedar la idea de que Italia y su economía suponen un problema para la estabilidad europea, cuando en todo caso Italia y su economía solo pueden ser una víctima más de la única fuente de inestabilidad que sacude Europa: la codicia insaciable de los mercados.
- En su edición del martes 12, el diario económico El Economista publica una noticia referente a las cotizaciones de las Bolsas en Europa, el titular dice: «El castigo continúa: el Ibex 35 cae más del 3,5% y pierde los 9.400 puntos». En este caso la errata estaría en utilizar un término tan drástico como «castigo» para referirse a la pérdida provisional de valor que experimenta un valor bursátil. Por contra, la pérdida continuada de poder adquisitivo de los ciudadanos o la pérdida del 100% de los ingresos que sufren muchos de ellos por falta de empleo o de asistencia social, nunca serán reflejados en este diario en semejantes términos.
- El mismo día 12, publica el mismo diario «Moody’s baja el rating de Irlanda a ‘bono basura’: podría necesitar otro rescate[2]». Es posible que el titular correcto debiera ser: «Moody’s baja el rating de Irlanda a ‘bono basura’ porque sus accionistas desean imponer otro jugoso rescate a Irlanda».
- El miércoles 13 publica el diario El País una noticia que titula «Los intereses que paga España están aún entre los más bajos de la década[3]». Se refería al tipo de intereses que el Estado español debe pagar para obtener financiación exterior. Lejos de conseguir un efecto de conformismo en el lector, que es de por sí una idea perversa y cómplice con la mafia de los mercados, el diario consigue un efecto bien distinto. Si pensamos que nos encontramos en el primer año de la década, un titular así solo podemos tomarlo como una amenazadora promesa de un interminable incremento de dichos intereses.
- El mismo día 13, el diario El Economista, fuente inagotable de erratas, publica «Tras la tormenta llega la calma: ligeras subidas en el Ibex 35 por encima de los 9.600 puntos[4]». Este titular confirma que el del día anterior («El castigo continúa: el Ibex 35 cae más de…»), era más sensacionalismo barato que otra cosa. Si aquella bajada fue «castigo» la recuperación debiera llamarse «premio» en justa correspondencia.
- El jueves 14, otra vez el mismo diario titula «A España le sale más caro financiarse en el mercado que acogerse al rescate europeo[5]». En su línea habitual de desprecio de lo social frente a lo económico, el diario tiene la insana intención de ir metiendo la falsa idea de las bondades del rescate financiero entre sus lectores. Dado el color político del diario es probable que se trate más que nada de un ataque contra el Gobierno con el ánimo de desestabilizar aún más si cabe la situación.
- El mismo día 15 encontramos una errata coral, una errata que la mayoría de los medios comete en la misma línea. A modo de ejemplo representativo: en la página de Radio Televisión Española (RTVE) se podía leer: «Telefónica calcula el coste del ERE en unos 415.000 euros por empleado[6]». Los términos del ERE que afectará a 6.500 empleados, suponen para el empleado una pérdida de ingresos del 32% hasta cumplir los 61 años y de ahí a los 65 la pérdida de ingresos es del 66%. La contrapartida es un ahorro de las mismas proporciones para Telefónica. Es decir, lo que en realidad es un ahorro de costes para la compañía que ha obtenido beneficios récord en 2010 (10.167 millones de euros), es presentado al público como un coste.
Muchas veces la noticia, sin estar manipulada por el medio, es testimonio de erratas cometidas por sus protagonistas, veamos dos ejemplos, ambos de El País y ambos del día 15:
- «La Generalitat recomienda trabajar más horas para evitar despidos[7]». Dicho así, además de presentar a la Generalitat como alguien ajeno a lo que ocurra entre ella misma, sus trabajadores y el destino de éstos, les presenta como los únicos responsables de que en el futuro pueda haber despidos en caso de incumplir su «recomendación». Más ajustado a la realidad sería sustituir el verbo «recomendar» por «amenazar«, y como añadidura cientos de miles de españoles entenderían mejor de qué se está hablando en la noticia porque les resultaría más familiar y cotidiano. Está claro que los trabajadores no tienen la única llave que abre la puerta a los despidos, de hecho no tienen ninguna llave. (Poco después de su publicación, el titular fue cambiado por este otro «Cataluña plantea a sus funcionarios más horas de trabajo para evitar recortes»).
- «EE UU investiga si Credit Suisse ayudó a sus clientes a evadir impuestos[8]». Da a entender el titular que, del delito de fraude fiscal cometido por algunos ciudadanos estadounidenses, tendría la culpa una entidad financiera extranjera. Quizás sería más lógico encontrar un titular como este: « EEUU investiga si EEUU no impidió a sus ciudadanos evadir impuestos «. Pero esto solo podría ser cierto en el caso de que la política fiscal estadounidense presionara de la misma manera a quienes tienen suficiente dinero como para evadir impuestos que a los que solo obtienen rentas del trabajo honrado. Además, puestos a investigar a los colaboradores necesarios de la evasión fiscal internacional, hay una larga lista de paraísos fiscales que podían ser objeto de investigaciones no ya por los fiscos de los principales países afectados, sino por organismos internacionales de justicia. Pero eso solo podría ocurrir en el caso de que viviéramos en un mundo en que las leyes no las hagan los mismos que hacen el dinero.

[1] http://www.eluniversal.com.mx/
[2] http://www.eleconomista.es/
[3] http://www.elpais.com/
[4] http://impresionesmias.files.
[5] http://www.eleconomista.es/
[6] http://www.rtve.es/noticias/
[7] http://www.elpais.com/
[8] http://www.elpais.com/
Fuente: http://
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