Las cooperativas de agricultores de la India están defendiendo la seguridad alimentaria de su nación y el futuro de los granjeros indios contra la invasión neoliberal de las semillas genéticamente modificadas (GM). Tantos como 28.000 granjeros indios se han suicidado durante la década pasada como resultado de las deudas contraídas en fallidas siembras GM y […]
Las cooperativas de agricultores de la India están defendiendo la seguridad alimentaria de su nación y el futuro de los granjeros indios contra la invasión neoliberal de las semillas genéticamente modificadas (GM). Tantos como 28.000 granjeros indios se han suicidado durante la década pasada como resultado de las deudas contraídas en fallidas siembras GM y la competencia desigual con los productos agrícolas subvencionados procedentes de EEUU.
En marzo de 2006, cuando el primer ministro Singh de la India concluyó con el presidente Bush los acuerdos nucleares, también firmaron la Iniciativa Indo-Estadounidense del Conocimiento en Agricultura (KIA, su sigla en inglés), sustentada desde atrás por las transnacionales Monsanto, Archer Daniels Midland (ADM) y Wal-Mart. La KIA permitió enganchar al sector semillas de la India a Monsanto, mientras el sector comercial indio fue sometido a los gigantes del negocio agrícola ADM y Cargill y su sector de comercio al por menor -llamado retail- pasó a la cadena Wal-Mart.
Aunque los pormenores de la KIA se han mantenido tan secretos que ni los más influyentes políticos indios ni la comunidad científica conocen sus detalles, está claro que el primer ministro Singh accedió a sacrificar al sector agrícola de la India como pago por las concesiones de EEUU en el campo nuclear. En una de las muy escasas declaraciones públicas de un funcionario del gobierno de EEUU respecto a la KIA, Nicholas Burns, subsecretario de Estado para Asuntos Políticos, dijo: ‘Mientras la iniciativa nuclear civil ha concitado la mayor atención, nuestra primera prioridad es continuar otorgando apoyo gubernamental al enorme crecimiento de los negocios entre los sectores privados indios y estadounidenses. Singh también ha desafiado a EEUU a ayudar a lanzar una segunda revolución verde en el extenso territorio agrícola de la India, alistando la ayuda de las grandes instituciones estadounidenses del sector agrícola’.1
Vandana Shiva tradujo: ‘Estos son programas gemelos que enganchan al mercado y a la alineación en seguridad’. Burns anunció que mientras afila el acuerdo nuclear, EEUU realmente está buscando mercados agrícolas y mercados de propiedad inmobiliaria, ‘para asumir el control de la tierra del pueblo, no a través de un mecanismo de mercado, sino usando al Estado y una vieja ley colonial sobre adquisición de suelopara agarrar la tierra por la fuerza’.
Las semillas de la decepción
Mediante la KIA, Monsanto y EEUU pueden acceder sin obstáculos a los bancos genéticos de la India. El paso siguiente es exigir un cambio en las leyes de propiedad intelectual que les permitirían patentar semillas y genes y, de paso, abolir las disposiciones que protegen los derechos de los granjeros. Una combinación de acceso físico a los bancos de genes de la India y la posibilidad de una nueva ley de propiedad intelectual para patentar las semillas, esencialmente permitiría que la India entregue su abundancia genética a manos de EEUU. Esto sería un severo golpe a la seguridad y a la autosuficiencia alimentaria de la nación.
Al mismo tiempo, la KIA ha pavimentado el camino a los planes de Wal-Mart de abrir 500 supermercados en la India, a partir de agosto de 2007, para canalizar desde EEUU el suministro de alimentos en la India y amenazar a 14 millones de familias de pequeños comerciantes detallistas con la pérdida de su sustento. ‘Esto no tiene que ver con ‘libre comercio’, explicó Shiva. ‘El sistema comercial de hoy, especialmente en agricultura, es deshonesto, y la falta de honradez se ha convertido en una guerra contra los agricultores. Se convierte en un genocidio’.
Sin embargo, los granjeros están organizándose para protegerse contra esta invasión económica, manteniendo los bancos tradicionales de semilla y levantando sistemas ejemplares de apoyo de la comunidad agraria. En respuesta a la inundación de la deuda debilitadora atada a las semillas GM/híbridas y a los tóxico de origen petrolífero en que se basan los fertilizantes y pesticidas -indispensables para estos cultivos-, una mujer de la pequeña aldea de Palarum dijo: ‘No compramos semillas del mercado porque sospechamos que pueden estas contaminadas por la ingeniería genética para destruir nuestras semillas’. Las mujeres de la aldea guardan y comercian robustas semillas tradicionales que se han desarrollado a través de los siglos para producir ‘cosechas nutritivas de la verdad’, con bajo mantenimiento».
Cada aldea de esta área rural de la India ha formado su propia organización de base de la comunidad, denominada «sangham», al punto que 72 sanghams forman parte de una federación regional. Estos sanghams integran una red informal de seguridad social que, a través del mantenimiento de los bancos de semilla, acude al rescate de campesinos individuales o de aldeas enteras en épocas de cosechas fallidas. Cada miembro de la comunidad tiene acceso al alimento y se asegura un cierto trabajo incluso tratándose de un «sin tierra». Además, la federación entrena a estudiantes en habilidades como carpintería, computación, cerámica, encuadernación, ciencia veterinaria, medicina herbaria, costura, cultivos, gestión de desechos y agro-silvicultura.
El autor Arun Shrivastava comentó: «Estas 72 aldeas antes estaban estratificadas horizontalmente y verticalmente por razones de casta, de clase y de orientación religiosas. La escasez de alimento era endémica, la gente estaba subalimentada, la mayoría trabajaba pocos días como obrero no calificado. Hoy están cohesionados, interdependientes. No vi a ninguna persona subalimentada. La gente raramente acude a los centros urbanos a buscar trabajo». Shrivastava continuó: «La comunidad es la entidad más importante que puede ayudarnos garantizarnos el alimento y una seguridad nutricional. El derecho al acceso a los recursos naturales -tierras, ríos, bosques, aire, y todo lo que la naturaleza nos ha dado, incluyendo las semillas- es un derecho fundamental de las comunidades, no de las corporaciones o del Estado o del individuo. Ninguna corporación tiene derecho a expropiar lo que nos dio la naturaleza».
El profesor de genética Suman Sahai concluyó: «La India debe ser cautelosa de no convertirse en tierra de descarga para una tecnología y sus productos controversiales que se han rechazado en muchas partes del mundo y cuya seguridad y utilidad siguen siendo cuestionables. La seguridad alimentaria es parte integral de la seguridad nacional.
Los esfuerzos de toda la India para alcanzar sus metas de seguridad nacional en la arena nuclear serán minados si se permite que llegue a ser insegura en materia de alimentos».
Notas:
1) Nicholas Burns, «‘Heady Times’ For India And the US», Washington Post, 29 de abril, 2007.
Actualización de Arun Shrivastava
La naturaleza nos ha dado semillas y «cosechas de verdad» que no requieren de ninguna cadena [tipo Wal-Mart] para darnos nutrición a bajo costo. Este conocimiento necesita ser diseminado rápidamente; pronto nuestras vidas pueden depender de él.
Con los sistemas actuales de cultivo y distribución de alimentos se gastan diez calorías de energía de combustible fósil para transportar una caloría de alimento desde la granja al tenedor. Eso hoy es insostenible; la era del petróleo barato efectivamente acabó. Puesto que ya estamos más cerca de la extinción del petróleo, todos debemos aprender a garantizar el alimento y la seguridad de nutrición para nuestra familia y comunidad. Tendremos que aprender habilidades básicas como conservar las semillas, mejorar la nutrición de los alimentos y medicinar las siembras sin productos químicos ni máquinas. Necesitaremos más cohesión e interdependencia de las comunidades locales, como lo han demostrado las mujeres de Zaheerabad.
Las mujeres de Zaheerabad guardan las semillas en bancos sostenidos por la comunidad y producen alimentos densamente nutricionales a través de un sistema que asegura la salud y el sustento para todos. Han establecido una autosuficiencia para una comunidad sostenible que pudo vivir en un mundo post-carbón. Un puñado de corporaciones multinacionales está patentando las semillas. Estas semillas genéticamente modificadas (GM) no aumentan la producción, no reducen los costos, no realzan el contenido nutritivo de los alimentos, ni reducen la dependencia del petróleo. Las semillas de la decepción han destruido a los granjeros en la India, EEUU y otras partes.
Patentar asegura el control del monopolio mientras se subvierten los derechos de los agricultores a guardar sus semillas; esto es antitético, contrario a los derechos naturales de las comunidades locales. La Iniciativa Indo-EEUU de Conocimiento en Agricultura intenta acceder secretamente al control sobre las semillas y el sostén de las comunidades.
Desde la publicación del artículo, la Sociedad del Desarrollo de Deccan (DDS, sigla en inglés) ha extendido el modelo a otras 26 aldeas más, con ayuda radial, aunque el resto de las estaciones FM de la comunidad guardan silencio. Los pueblos de la Asociación Sur-Asiática para la Cooperación Regional (SAARC, sigla en inglés), votaron en la cumbre de Katmandú, en marzo de 2007, por un ‘Asia del Sur libre de GM’, el control de la comunidad sobre las semillas y la protección de la biodiversidad Sur-Asiática. Más de seis millones de granjeros fueron requeridos por la Suprema Corte de la India (abril de 2007) a interdictar la apertura de pruebas de semillas GM en sus campos debido a los peligros de contaminación irreversible para las semillas que sostienen a las comunidades y su impacto adverso para la salud.
Los grandes medios de prensa se mantienen silenciosos. No tienen espacio para difundir la información que nos evitaría el hambre y la enfermedad. Para ellos, éstas no son noticias con glamour. Para más información sobre las crecientes cosechas de la verdad y la necesidad de un nuevo orden social, las siguientes son fuentes ideales:
1. El sitio web de Deccan Development Society (DDS), iniciador y facilitador de los sanghams: http://www.ddsindia.com/www/default.asp. Contacto PV Satheesh, Director del Proyecto Zaheerabad.
2. Beej Bachao Andolan (BBA, Save the Seeds Movement o Movimiento Salvemos las Semillas) conoce bien el movimiento de los granjeros que guardan las semillas tradicionales en la región del Himalaya. Contacto Biju Negi, [email protected].
3. Para información sobre alimentos para la salud y la libertad personal ver www.soilandhealth.org.
4. Para información sobre amenazas presentadas por las firmas multinacionales de semillas, ver, www.gmwatch.org and www.mindfully.org.
5. ‘Las semillas de la decepción’, de Jeffrey Smith, discute cómo ponen en peligro nuestra salud los alimentos GM introducidos en EEUU en 1993 sin el gravamen apropiado de bioseguridad. Está disponible en www.seedsofdeception.com. Ver también la investigación de la Dra. Irina Ermakova en http://irina-ermakova.by.ru/eng/articles.html/, y del Dr. Arpad Pusztai: http://www.freenetpages.co.uk/hp/a.pusztai/.
6. ‘Despiadada en el corazón de la tierra’ («Heartless in the Heartland») es la historia horrorosa de cómo Monsanto chantajeó a los granjeros de EEUU para que no ahorraran sus semillas Ver www.mindfully.org.
7. Para un excelente sumario, observar The Future of Food (El futuro de los alimentos), un documental de Deborah Koons Garcia, obtenible desde www.mindfully.org.
8. Para discusiones sobre el «peal petrolero» y la seguridad alimentaria, ver Richard Heinberg’s Fifty Million Farmers, publicado el 17 de noviembre, 2006, en athttp://www.energybulletin.net/22584.html. También visitor la Association for the Study of Peak Oil, dirigida por el Dr. Colin Campbell, uno de los expertos petroleros de liderazgo mundial, en http://www.peakoil.net.
9. My dos recientes «papers» también alumbran este tema: «The attack on our seeds,» un artículo publicado por Farmer’s Forum en India (contacto con el editor: [email protected]), y «The Silent War on the People of India,» en http://www.thepeoplesvoice.org/cgi-bin/blogs/voices.php/2007/03/22/the_silent _war_on_the_people_of_india.
Actualización de Vandana Shiva
La Indo-US Knowledge Initiative on Agricultura (KIA) afecta a 650 millones de agricultores de la India y a 40 millones de pequeños comerciantes minoristas y está redefiniendo las relaciones entre los pueblos de las dos democracias más grandes del mundo.
Un nuevo movimiento al por menor y democrático ha comenzado en la India, reuniendo a comerciantes, buhoneros de calle, sindicatos y uniones de pequeños granjeros. El 9 de agosto de 2007, fue el Quit India Day, un paro de un día de la India. El movimiento organizará acciones a través del país reclamando que Wal-Mart abandone la India.
Para mayor información, visite nuestro website en www.navdanya.org.
Fuentes:
Democracy Now! December 13, 2006
Título: «Vandana Shiva on Farmer Suicides, the US-India Nuclear Deal, Wal-Mart in India»
Auhor: Vandana Shiva with Amy Goodman
http://www.democracynow.org/article.pl?sid=06/12/13/1451229
Global Research, October 9, 2006
Título: «Genetically Modified Seeds: Women in India Take on Monsanto»
Autor: Arun Shrivastava
http://www.globalresearch.ca/index.php?context=viewArticle&code=ARU20061009&articleId=3427
SciDev.Net
Título: «Sowing Trouble: India’s ‘Second Green Revolution'»
Autor: Suman Sahai
http://www.scidev.net/content/opinions/eng/sowing-trouble-indias-second-green-revolution.cfm
Estudiantes investigadores: Jonathan Stoumen y Michael Januleski
Evaluador académico: Phil Beard, Ph.D.
Traducción: Ernesto Carmona (especial para ARGENPRESS.info)