«Chávez ofrece a Rusia emplazar base militar en Venezuela «, titulaba en Venezuela el diario El Nacional. Y en el interior de la noticia afirmaba: Rusia tiene suficiente potencial como para garantizar su presencia en diferentes partes del mundo. Si las Fuerzas Armadas rusas quieren estar en Venezuela, serán recibidas calurosamente» «Chávez: es posible instalar […]
«Chávez ofrece a Rusia emplazar base militar en Venezuela «, titulaba en Venezuela el diario El Nacional. Y en el interior de la noticia afirmaba:
Rusia tiene suficiente potencial como para garantizar su presencia en diferentes partes del mundo. Si las Fuerzas Armadas rusas quieren estar en Venezuela, serán recibidas calurosamente»
«Chávez: es posible instalar una base militar rusa en Venezuela», afirmaba también desde Caracas El Universal. En el texto se podía leer lo siguiente en boca de Hugo Chávez:
«Rusia tiene muchas posibilidades de posicionarse en el mundo. Si las fuerzas de combate rusas quieren erigir bases en Venezuela, son bienvenidas»
En cuanto a las agencia internacionales, » Chávez ofrece a Rusia instalar una base militar en Venezuela», afirmaba Reuters. A continuación:
Chávez declaró que hipotéticamente Rusia sería bienvenida si quisiera establecer una base militar en su país
Por su parte, DPA titulaba: » Hugo Chávez ofrece a Rusia erigir bases militares en territorio de Venezuela», y también ponía en boca de Chávez esta cita textual:
» Si las Fuerzas Armadas rusas quieren estar en Venezuela, serán recibidas calurosamente»
Todos basaban su información en las declaraciones emitidas en una rueda de prensa desde desde el hotel en Moscú tras una reunión con Putin.
Pero en esas declaraciones el presidente venezolano no nombró las palabras bases militares, ni siquiera el verbo estar en referencia a las Fuerzas Armadas rusas en Venezuela. Estas fueron textualmente las palabras de Hugo Chávez:
Yo creo que Rusia tiene suficiente capacidad de movilización, de aeronaves y de barcos para aparecer en cualquier parte del mundo, que aparezcan en Venezuela, no sería raro. Que vayan a visitar los mares del Asia, del África, del Caribe, si van por Venezuela serán bienvenidos, porque no estamos hablando de la cuarta flota. La cuarta flota es una amenaza contra nosotros, y no sólo contra Venezuela, contra toda la América Latina. Si algún día una flota rusa llega por el Caribe, izaremos banderas, tocaríamos tambores y pondríamos el himno de Venezuela y el himno de Rusia, porque sería la llegada de un amigo que llegaría a dar la mano sería la llegada de un aliado nuestro. Rusia se ha convertido hoy en uno de nuestros más grandes aliados en todo el planeta, le daríamos la bienvenida.
Es evidente que ser bienvenido a un lugar no quiere decir quedarse, un detalle importante y delicado si nos referimos a presencias militares. Para que no quedaran dudas, el Ministerio de Comunicación e Información de Venezuela desmiente con rotundidad la posibilidad de las bases rusas en suelo venezolano a través de un comunicado:
una nueva «información» fue circulada por el sistema mediático mundial, según la cual el presidente Chávez habría ofrecido la instalación de una base militar rusa en nuestro país. Tal como pudo constatar todo periodista que haya visto la rueda de prensa ofrecida por el Presidente en Moscú, transmitida íntegramente por Telesur y por Venezolana de Televisión, entre otros medios, esto es totalmente falso. En ningún momento el Jefe de Estado hizo tal ofrecimiento.
El propio presidente de la Comisión de Seguridad y Defensa de la Asamblea Nacional (AN), el diputado Rafael Gil, recordó que no tiene sentido creer que se instalarán esas bases militares extranjeras en territorio venezolano porque lo prohíbe en su artículo 13 la Constitución Bolivariana de Venezuela promovida en su momento por Chávez.
La idea de bases rusas en Venezuela se ajustaba perfectamente al deseo de presentar a Hugo Chávez como un peligro para la estabilidad regional y la seguridad de Estados Unidos. Los medios, internacionales y venezolanos, se inventaron así el miércoles 23 de julio la instalación permanente del ejército ruso en Venezuela, ignorando la transcripción y la grabación de la rueda de prensa que tenían a su disposición. Pero lo más grave no será eso, será que hoy 24 de julio probablemente ninguno de ellos rectifique, lo que confirmará su premeditación y alevosía. O sea, el delito.