En estos días ha estallado en Gran Bretaña un escándalo de gran magnitud, al ser puestos al descubierto los métodos de grabaciones ilegales y sobornos a efectivos policiales por parte de ejecutivos de la publicación The News of the World, propiedad del magnate australiano-estadounidense Keith Rupert Murdoch, muy conocido por sus posiciones de ultraderecha y […]
En estos días ha estallado en Gran Bretaña un escándalo de gran magnitud, al ser puestos al descubierto los métodos de grabaciones ilegales y sobornos a efectivos policiales por parte de ejecutivos de la publicación The News of the World, propiedad del magnate australiano-estadounidense Keith Rupert Murdoch, muy conocido por sus posiciones de ultraderecha y participante activo con sus contribuciones a las campañas electorales de los presidentes norteamericanos.
De inmediato, Murdoch viajó a Londres para tratar de tapar la tormenta, cerrando su publicación inmersa en el escándalo. Uno de los asesores del ex primer ministro británico David Cameron, nombrado Andy Coulson, se ha responsabilizado de la utilización de los ilegales métodos para buscar información de interés para la crónica roja.
Murdoch, una pieza clave en el sistema capitalista, que defendió a capa y espada el gobierno de George W. Bush, incluida la invasión de Estados Unidos a Iraq, es el dueño de una de las más grandes cadenas de comunicación del mundo, con propiedades principalmente en Gran Bretaña y Estados Unidos. Sus medios en EE.UU. son fundamentalmente las cadena de TV Fox , la Twenty Century Fox , Cadena de Satélites Sky , National Geographic , Harper-Collins Publishers , The Wall Street Journal y Dow Jones, entre otros. Mientras, en el Reino Unido posee las publicaciones, The Times , The Sunday Times , Today , The Sun , Daily Mirror y el recién cerrado The News of the World; además de tener grandes acciones en el Grupo Económico Pearsons , en The Financial Times , The Economist, y anteriormente haber vendido sus acciones de la agencia informativa Reuters. Esto, aparte de que su cadena televisiva para satélite está en transacción actual para fundirse con la British Satelite Broadcasting y crear la BSkyB, no aprobada hasta el momento.
Como era lógico la not icia de estos hechos preocupó a Murdoch, por los efectos que podría causar en sus intereses en los propios Estados Unidos. Ya varios especialistas llamaron la atención de las autoridades norteamericanas, acerca de si Murdoch no ha utilizado estas técnicas ilegales sobre ciudadanos de este país, lo cual resultaría inconstitucional.
La pregunta que nos hacemos los que de una forma o de otra nos mantenemos vinculados a las informaciones en el mundo de la comunicación, es si el sistema será capaz de llevar las investigaciones hasta el final de las consecuencias, o si el escándalo será tapado adecuadamente, condenando a un empleado de otro nivel, que aceptará la culpabilidad, mientras recibe un jugoso cheque por debajo de la mesa y Murdoch continúe sus «negocios» felizmente.
Dentro de las estructuras del sistema capitalista a nivel mundial, no es pequeño el control de los medios de comunicación, en la defensa y manipulación sobre la llamada democracia representativa, a la vez que se participa de forma estridente en el ataque a las ideas socialistas, y contra todo lo que asome como una amenaza a sus valores. De ello, somos víctimas permanentes todos los que nos tomamos el derecho de defender nuestra libertad y soberanía. Y en este escándalo, se sabe de antemano quien ganará, a no ser que intereses mayores entren a jugar.
De todos modos, esperemos el final de la película «La ley y Murdoch».
Fuente: http://lapupilainsomne.wordpress.com/2011/07/13/murdoch-%C2%BFlibertad-de-prensa-o-de-empresa/