El corresponsal de la cadena Telesur en Colombia declaró y quedó detenido, acusado de pertenecer a las FARC y cometer actos de terrorismo. La fiscalía asegura tener pruebas sólidas, pero la cadena acusa al gobierno de Uribe de orquestar la detención por razones políticas
El corresponsal en Colombia de Telesur, Fredy Muñoz, sospechado de tener vínculos con las FARC y participar en ataques terroristas, ayer se declaró inocente de los cargos en su contra. Muñoz declaró durante cinco horas ante la Fiscalía Quinta de la ciudad de Barranquilla (norte), después de que el fiscal le informara que la Justicia colombiana lo acusa de terrorismo y rebelión. Tanto la cadena Telesur como varias organizaciones internacionales condenaron el arresto. «Hay un interés político en atacar la imagen y la credibilidad de Telesur», acusó el presidente de la emisora, Andrés Izarra.
Muñoz es investigado por su supuesta participación en ataques con explosivos realizados a infraestructuras eléctricas de las ciudades de Cartagena de Indias y Barranquilla en 2002 y 2003. El periodista fue detenido el lunes por agentes del Departamento Administrativo de Seguridad (DAS) en el aeropuerto Eldorado, de Bogotá, cuando regresaba de Caracas, donde participó de un taller de periodismo con Telesur.
«La Fiscalía encontró méritos para escucharlo en indagatoria, de acuerdo con investigaciones adelantadas por detectives de DAS durante tres años», indicó un comunicado de los servicios de Inteligencia. Aunque indicaron que no podían hacer declaraciones oficiales hasta terminado el proceso indagatorio, fuentes de la fiscalía negaron a Página/12 que la detención de Muñoz estuviera políticamente motivada.
Fuentes de la Fiscalía señalaron que el interrogatorio de Muñoz continuará. Cuando Muñoz termine su declaración, el fiscal Manuel Molano deberá decidir si lo deja libre o si le dicta la prisión preventiva y lo deja preso hasta el juicio.
En su comparecencia ante el fiscal, Muñoz dijo desconocer las imputaciones de las cuales es objeto, puntualizando que no ha realizado ningún ataque terrorista ni ha militado o colaborado con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC). «El fiscal tiene información de tres reinsertados de la guerrilla que dicen haberme visto en alguna ocasión como jefe de explosivos de las FARC (…) y me adjudican unos atentados inverosímiles en muchas ciudades de la costa», dijo Muñoz. «Son unos cargos bastante graves, que están apoyados únicamente en los señalamientos que estas tres personas hacen de un alias ‘Jorge Eliecer’ que dicen que soy yo», agregó.
Muñoz, de 36 años, es realizador audiovisual, escritor y periodista. Trabajó para la programadora estatal Señal Colombia, donde realizó la serie llamada Leyendas, uno de sus trabajos más exitosos. Fue redactor del diario El Universal de Cartagena, del zonal El Nuevo Día, y también trabajó en el canal Telecaribe. «Muñoz se vinculó a Telesur desde sus inicios. Tiene una trayectoria muy importante, de más de doce años, y por eso fue contratado para trabajar en nuestra cadena», explicó a Página/12 Andrés Izarra, presidente de Telesur.
El propio Muñoz se considera un periodista incansable. «Yo no tengo tiempo de ser jefe de milicias. Yo sólo tengo tiempo para ser periodista. No me quedaría un minuto para otra cosa en la vida, menos para ser jefe de milicias terroristas. Yo quiero mucho a mi país como para iniciar una acción de esas», destacó Muñoz.
Según Izarra, la detención del periodista fue una operación política del gobierno de Alvaro Uribe o de otras fuerzas de la región que están en contra de Telesur, la cadena de noticias estatal promovida por el presidente venezolano Hugo Chávez como una mirada alternativa a la información ofrecida por las cadenas internacionales privadas. En Telesur tienen participación los gobiernos de Venezuela, Argentina, Cuba y Uruguay.
«Todo aquel que haga periodismo en Colombia sabe que está sujeto a una actividad que conlleva un riesgo considerable», explicó Izarra en diálogo telefónico. «En el caso de Telesur, tenemos un riesgo adicional, ya que desde Colombia han venido los ataques más graves a nuestra cadena. Desde antes de que saliera al aire, decían que promocionaría el terrorismo, que llevaría la voz de las FARC o que era una cadena de campaña de Chávez.» Izarra también indicó que el caso contra el periodista colombiano presenta serias irregularidades. «Aquellos que indicaron que Muñoz es ‘Jorge Eliecer’ están en negociaciones con la Fiscalía, por lo que tienen un interés en delatar», apuntó el presidente de Telesur. «Además, se dice que la persona que participó de uno de los ataques por el que se acusa a Muñoz resultó herido con graves quemaduras, que dejan marcas de por vida. Muñoz no presenta ninguna de esas huellas», agregó.
La defensa de Muñoz también alega que se lo persigue por su condición de periodista. «Se trata de una acción para retaliar el papel que Fredy ha venido cumpliendo en el último período como corresponsal de Telesur y como persona cercana a diferentes expresiones sociales y de defensa de derechos humanos», afirmó Tito Augusto Gaitán, abogado del periodista en declaraciones radiales.
La organización Reporteros Sin Fronteras (RSF) se expresó de modo similar. «La detención de Fredy Muñoz es pura y simplemente un abuso de poder y una arbitrariedad. Si se confirma que está relacionada con la difusión en Telesur, hace un año, de unas entrevistas con guerrilleros, entonces el gobierno colombiano será culpable de atentar contra la libertad de prensa», señaló RSF en un comunicado.