El pasado jueves siete de junio, los estudiantes que se oponen a la decisión del gobierno venezolano de no renovar la licencia de un canal de televisión fueron invitados a un debate en el Parlamento o Asamblea Nacional junto a otros estudiantes que defienden la medida. El acto fue difundido por todos los medios de […]
El pasado jueves siete de junio, los estudiantes que se oponen a la decisión del gobierno venezolano de no renovar la licencia de un canal de televisión fueron invitados a un debate en el Parlamento o Asamblea Nacional junto a otros estudiantes que defienden la medida. El acto fue difundido por todos los medios de comunicación públicos y privados de Venezuela por instrucción gubernamental. Los opositores no se esperaron al debate y tras exponer se posición decidieron abandonar la Asamblea. Fuera del edificio, se encontraban movilizados numerosos estudiantes partidarios de uno u otro bando, la salida de este grupo podría generar algún problema de seguridad por lo que la policía les brindó la posibilidad de salir protegidos dentro de un vehículo policial, lo que aceptaron gustosos al comprender la situación. Ello no impidió que siguieran esgrimiendo por la ventana del vehículo sus reivindicaciones.
La salida de los estudiantes protegidos por este coche policial blindado, al que -recordemos- se subieron voluntariamente, fue recogida y difundida mediante esta fotografía por la agencia Efe.
La foto fue ampliamente utilizada por la prensa antichavista venezolana al día siguiente, el 8 de junio. Así, el diario El Nacional recurre a ella con este ambiguo pie: «El debate se fue en jaula de la PM [policía metropolitana]». Por su parte, El Universal la publicaba con estas palabras: «Y así se fueron los muchachos», sin explicar que iban voluntariamente y protegidos.
Lo más asombroso fue el diario colombiano El Tiempo. En él también la publicaron el mismo día con el siguiente título y texto a modo de pie e foto: «Protestas estudiantiles en Venezuela. Estudiantes venezolanos fueron detenidos por la Policía frente al Palacio Legislativo, en Caracas, por protestar a favor de la libertad de expresión».
En conclusión, el mundo al revés: un gobierno invita a estudiantes opositores a exponer sus posiciones en el Parlamento, ordena difundir su discurso por todos los medios de comunicación, lo escoltan policialmente a la salida y lo que publica la prensa es que fueron detenidos por la Policía.