Un fantasma recorre de nota en nota de prensa en la prensa conservadora y restauradora del viejo orden dominante. Sí, de nota en nota de prensa, de EFE hasta Claridad, desde El Vocero hasta El País y 80 Grados. Todos coinciden en que algo huele mal en el Frente Sandinista de Daniel Ortega. Coincido en […]
Un fantasma recorre de nota en nota de prensa en la prensa conservadora y restauradora del viejo orden dominante. Sí, de nota en nota de prensa, de EFE hasta Claridad, desde El Vocero hasta El País y 80 Grados. Todos coinciden en que algo huele mal en el Frente Sandinista de Daniel Ortega. Coincido en muchas cosas incluidas su mal hedor, pero sospecho tanto del auspicio que le da el Banco Popular de Puerto Rico a 80 Grados como de prácticamente todo lo que sale como noticia de EFE, Claridad, El Vocero, El País, etcétera. Me explico con intención de complicar, implicar, retar.
EFE es un medio estatal del Estado español, una monarquía constitucional no electa sucesora directa de un dictador, un tal Francisco Franco. Las imágenes como las palabras que difunde EFE de los sucesos que acaecen dentro de Nicaragua no se presentan igual que los que se dan dentro de la Comunidad Autónoma de Cataluña. ¿Toleraría el Estado español actos similares dentro de Cataluña como los que presenta de la Nicaragua del Frente Sandinista de Daniel Ortega? Estoy convencido que no.
España siquiera tolera actos legislativos o proclamas legislativas de independencia, menos ejercicios de democracia tan básicos como una consulta plebiscitaria de autodeterminación organizada por la sociedad civil catalana. En la España de EFE, plebiscitar es rebelión contra el orden monárquico-constitucional establecido por disposiciones o actos propios de la última voluntad de un tal Franco. En Puerto Rico, la descendencia catalana ha realizado tres plebiscitos desde el Estado-nación puertorriqueño contra el interés nacional de los Estados Unidos dentro de Puerto Rico y sus islas adyacentes, su zona de influencia histórica dentro del Caribe, que no ha avalado ninguno.
Y lo mejor, como si no fuera suficiente, su secretario de Estado exige a Estados Unidos derrocar al gobierno electo de Maduro, mientras que su Procuradora del ciudadano procura derrocar con credenciales de diplomática internacional al gobierno electo de Frente Sandinista de Daniel Ortega. Entonces, no sé si sea descabellado pensar que, si los catalanes dentro de Puerto Rico pueden plebiscitar contra Estados Unidos, y a su vez, conspirar desde organismos internacionales de Estados contra la soberanía nicaragüense y venezolana, rebelión no puede ser el ejercicio del Derecho a decidir dentro de Cataluña entre los propios catalanes.
Claridad es un semanario de prensa paraestatal del Estado-nación puertorriqueño. De los pocos anuncios que se solían leer en su publicación impresa, hasta hace poco resaltaba el de uno de los publicistas ligados a la gestora internacional de distribución gratuita de contenidos para los medios de Periodistas Sin Fronteras contra Cuba. Hace unos días nos publicó un artículo intitulado «Las venas abiertas de Nicaragua», de Boaventura de Sousa Santos. Se trata de un artículo que fue circulando de medio en medio hasta que fue depositado en las páginas de Claridad, y desde el 19 de julio en 80 Grados.
Toma su título de un libro muy conocido y querido por quienes aprendimos a indignarnos con él, Las venas abiertas de América Latina, de Eduardo Galeano. Su contenido invita a la indignación contra el Frente Sandinista de Daniel Ortega. Es con dicho artículo que Claridad abre sus páginas «a la discusión sobre la situación política reinante en Nicaragua». Así salda el semanario del Estado-nación boricua la constante solidaridad del gobierno del Frente Sandinista de Daniel Ortega con el Derecho del pueblo de Puerto Rico a su libre-autodeterminación e independencia plena.
Ingratos, es la palabra que mejor les describe, por no decir que también descarados. Ni viles ni malvados, pues esas son dos palabras que Mario Vargas Llosa ya difundió respecto a la dictadura de Fujimori. Ya que Claridad abrió sus páginas a la discusión sobre la situación política reinante en Nicaragua, ¿cuándo va a abrir sus páginas Claridad a la discusión sobre la situación política reinante en Puerto Rico? ¿Por qué contra Nicaragua sí lo que contra Puerto Rico no? ¿No será porque lo que reina es un país soberano cuya soberanía vale para desplazar ciudadanos al exterior a la par que para desde su personalidad jurídica internacional interferir -como desde las páginas abiertas de Claridad– en países que incomodan los intereses estratégicos de los Estados Unidos?
El Vocero es un diario no alternativo de carácter privado cuyos contenidos se basan en difundir tanto notas de prensa propias de carácter local o no-nacional como ajenas cuando se trata de asuntos internacionales. Su línea editorial es contraria a la de Claridad, salvo en una que otra cosa, de la que resalto una aquí: Disparar notas de prensa contra el Frente Sandinista de Daniel Ortega. Es decir, si Claridad es el medio del Estado-nación puertorriqueño, El Vocero, entre otros medios boricuas, es uno de los medios de su negación. Santo y bueno, así se maja la diversidad editorial cuando de lo que se trata es de legitimar una dictadura colonial, por no adelantarles que también un Narco-Estado.
Sin embargo, resulta que el Estado-nación puertorriqueño sostiene relaciones internacionales, aún dentro del contexto de «crisis humanitaria» que atraviesa el país que tiene más de la mitad de su población nacional desplazada dentro de los Estados Unidos. Y esas relaciones internacionales se aprovechan para con el uso de fondos públicos nacionales e internacionales promover el derrocamiento, primero de la Venezuela democrática que votó a Nicolás Maduro (a través de su Departamento de Estado), ahora de la Nicaragua que eligió el retorno por la vía electoral del Frente Sandinista de Daniel Ortega (Procuraduría del Ciudadano). ¿La soberanía nacional al servicio de quién?
Lo hace por la vía de la presidencia de la Federación Iberoamericana de Ombudsman, que preside la boricua Iris Miriam Ruiz Class, la Procuradora del Ciudadano del Estado Libre Asociado de Puerto Rico, Estado parte de dicha entidad internacional de Estados. La soberanía que la Nicaragua de Daniel Ortega sostiene y sostenía inexistente al ceder credenciales diplomáticas al agente colonial del Estado-nación puertorriqueño, Rubén Berríos Martínez, resulta ser que las tiene de sobra a través de la Procuradora del Ciudadano del país, país, país que preside la Federación Iberoamericana de Ombudsman. Entonces, el tiempo -testigo de tanto- nos delata que el ejercicio de la soberanía internacional del país de cuatro pisos puede ser un arma para forzar el derrocamiento de un gobierno electo legítimamente en Nicaragua; claro, el del Frente Sandinista de Daniel Ortega. Y, ¿cuál es el próximo? ¿Venezuela? ¿Cuba? ¿España?
El País es un medio que responde a un conglomerado de contenidos que se dedican a legitimar en América Latina lo que, dentro de su escenario de origen, España, no sería otra cosa que terrorismo, y dentro de sí, noticias falsas, perlas -al decir de Pascual Serrano-, mentiras mediáticas, fake-news como diría ese loco bestial que lo entiende bien y mejor que tú y que yo, Donald Trump. Resulta sumamente alentador su rol en la difusión de escenarios de conflicto civil dentro de Venezuela como dentro de Nicaragua, los cuales no difunde de igual manera cuando se trata de España.
Allá, allende los mares, hay presos políticos y enmascarados que luchan «legítimamente» contra una dictadura electa. Allí, acá, cerca de la Moncloa, se desmiembra España, si nos hablan en catalán, vasco, recuerdan la república, la derrocada república por la fuerza de las armas que sostuvieron hasta el final la sucesión monárquica-constitucional actual. ¿Por qué si encapucharse de revolucionario se puede ver bien en la Nicaragua del Frente Sandinista de Daniel Ortega, vestir de demócrata catalán o vasco o de demócrata republicano no lo es en España? Prensa de PRISA, prensa con coartada, coartada.
Finalmente, 80 Grados, prensa sin prisa bajo el auspicio casi exclusivo del Banco Popular de Puerto Rico, nos publica antes del de Boaventura de Sousa Santos, un «riguroso» análisis de Pablo Torres Otero, intitulado: «Protestas en Nicaragua: Un acercamiento». Nadie mejor que un medio auspiciado en lo esencial, en lo fundamental, por ese amigo, por ese gran hermano, padre-maestro de la deuda que llevó a la «crisis humanitaria» que ha desplazado a los Estados Unidos a más de la mitad de la población nacional de Puerto Rico. En su artículo Torres Otero analiza con «rigurosidad» lo que no ha analizado igual de San Juan, de Puerto Rico, de Estados Unidos. Por ejemplo, ¿dónde está el artículo de Pablo sobre los incidentes del 1 de mayo de 2017 frente al Banco Popular de Puerto Rico? ¿Dónde está el artículo de Pablo sobre los incidentes del 1 de mayo de 2018 dentro del contexto de la Milla de Oro? Nunca es tarde para escribirlo, ya se sabe que 80 Grados se lo publica con el auspicio del Banco Popular de Puerto Rico. Camarada, motívese. Le esperamos con igual ansia, exigimos igual rigurosidad de análisis.
Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.