El PTS ha lanzado en su acto la propuesta de construir un partido unificado de la izquierda entre los partidos obreros y socialistas. No ha dicho hasta ahora nada más que lo expresado por Del Caño en su discurso, aún no se sabe cómo propone hacerlo, con que programa y con qué método de construcción […]
El PTS ha lanzado en su acto la propuesta de construir un partido unificado de la izquierda entre los partidos obreros y socialistas. No ha dicho hasta ahora nada más que lo expresado por Del Caño en su discurso, aún no se sabe cómo propone hacerlo, con que programa y con qué método de construcción interna. Tampoco las fuerzas de la izquierda obrera, socialista y anticapitalista a la que va dirigido el planteo, hemos recibido hasta hoy ninguna propuesta, ningún pedido de reunión o dialogo verdadero para hablar sobre este tema. Está solo el lanzamiento de la propuesta, en un discurso de un acto precedido esencialmente de su disputa interna con PO, sobre la base de no haber podido hacer, por desacuerdos políticos, un acto común del FIT.
Con este marco, la pregunta es si estamos o no ante una verdadera propuesta unitaria del PTS. Todos sabemos que cuando una organización se propone avanzar seriamente en un curso de unidad, realiza propuestas que faciliten ese camino, piensa distintas variantes, emprende reuniones, charlas, consultas y eventos que posibiliten la unidad declamada. En ese sentido, alertamos que declamaciones generales, sin una discusión verdadera con los partidos de izquierda que realmente actuamos en el país, en general termina transformándose en un nuevo capítulo de disputas y polémicas, sin llegar a ningún punto común. Eso es lo que debe evitar quien quiere una unidad verdadera.
La unidad de toda la izquierda anticapitalista es un reclamo muy genuino de miles de militantes, de activistas obreros, feministas y de la juventud, y también del amplio espectro de votantes de la izquierda. Es una unidad tan necesaria que no admite maniobras, simulaciones ni frases de ocasión. Cuando tenemos enfrente al gobierno, al FMI, a las patronales y sus partidos, a la burocracia sindical y a la Iglesia retrógrada, no podemos andar con vacilaciones ni propuestas al paso. Hay que hacer un debate serio, profundo y sin ningún tipo de exclusiones. Hay que querer la unidad de la izquierda de verdad y sin vueltas. Y eso significa dar pasos en las formas que sea realmente posible avanzar, sin imposiciones ni propuestas ultimatistas.
Divisiones reales y unidades dudosas
Lxs compañerxs del PTS plantean de repente hacer un partido unificado. Cómo toda propuesta es lícita. A la vez no se la puede abstraer del contexto de divisiones permanentes en varios frentes obreros y estudiantiles que este propio partido protagoniza. Se opone al espacio del sindicalismo clasista que el resto de la izquierda conformamos, divide en las elecciones de ATEN, también en Medicina de la UBA, intenta vetar al MST en diversas elecciones universitarias, se niega a ampliar o abrir el FIT a otras fuerzas de izquierda anticapitalista, entre otras políticas equivocadas. Sobre esta realidad ahora propone un partido unificado, lo cual aparece como un cambio, a contramano de varias de sus propias prácticas.
¿Significa que por estas divergencias pasadas o presentes no puede haber unidad? Claro que no. Siempre desde el MST planteamos que hay que saber convivir con acuerdos y diferencias. Si ahora hacemos notar las divisiones que existen a causa de la política equivocada del PTS es para que veamos, realmente, por qué caminos se puede avanzar en un proceso de unidad, si de verdad se lo quiere hacer. Porque si en este contexto complejo, la única propuesta es un partido común no debatido con nadie, más que una propuesta unitaria puede terminar siendo una pantalla, mientras las divisiones reales seguirán. Y eso es lo que no queremos.
La propuesta unitaria del MST
De nuestra parte venimos proponiendo avanzar en conformar un gran espacio político común y nacional de toda la izquierda anticapitalista. Volvimos a reiterarlo públicamente semanas atrás diciendo: «construir frente al macrismo y al PJ, un tercer gran espacio político de toda la izquierda, de las organizaciones que compartimos un programa común y proponemos un modelo antiimperialista y anticapitalista independiente de todas las viejas estructuras e instituciones políticas, sindicales y de la Iglesia. Es hora de convocarnos a reuniones, foros, intercambios y toda instancia que sirva para motorizar el camino de unidad de la izquierda política, social, sindical, feminista y estudiantil. Es tiempo que el FIT se abra y se ponga a la altura de las necesidades políticas del presente. Es momento que organizaciones, movimientos feministas, clasistas y de la juventud actuemos y nos convoquemos en torno a la construcción de esta gran unidad que hace falta. Quienes estemos de acuerdo confluyamos y demos pasos en común. No puede haber ni excusas sectarias ni justificaciones que impidan construir un gran espacio político de toda la izquierda independiente de los viejos partidos del régimen» (Unir a la izquierda o favorecer al PJ. www.mst.org.ar 26/9/18).
Sobre esta propuesta invitamos a debatir a toda la izquierda, a los sectores en lucha, al movimiento feminista, disidente y a la juventud. Porque se puede debatir hacer o no, un partido común. Solo que previo a esa posibilidad hay muchos pasos y cosas esenciales en las que se puede avanzar ahora mismo.
En este sentido le hacemos al PTS, a todo el FIT y al conjunto de la izquierda anticapitalista el siguiente planteo:
· Hagamos una reunión común de todas nuestras fuerzas para intercambiar sobre la unidad de cara al enfrentamiento a Macri y al FMI, y la convocatoria a una gran marcha de toda la izquierda a rodear el Congreso contra el Presupuesto 2019. Y seguirla después con otras grandes acciones a Plaza de Mayo.
· Un compromiso de unificar fuerzas en todas las elecciones estudiantiles que quedan hasta fin de año, para no dividir el voto de la izquierda.
· Fortalecer las luchas y el plenario del sindicalismo clasista debatiendo nuevas iniciativas de lucha y organización sindical.
· Un compromiso público sobre la unidad política de nuestras fuerzas, hacia la conformación de un frente con un programa anticapitalista y socialista en todas las provincias del país y en las próximas elecciones presidenciales.
· Junto a estos pasos, abrir un debate serio y sin exclusiones sobre la posible construcción de un partido unificado.
Sobre esto último recordamos que desde el MST siempre hemos tenido diversas propuestas al respecto, tratando que los acuerdos dentro de la izquierda no sean solo limitados a frentes electorales, sino que se pueda construir una unidad mayor, a mediano y largo plazo. En ese sentido propusimos conformar frentes, o un gran movimiento político común y también un partido de tendencias; es decir un partido común bajo un programa común, que a su interior permita que cada una de nuestras corrientes puedan seguir organizadas democráticamente, defendiendo sus ideas. En el marco de la estrategia de construir partidos revolucionarios, esta variante sigue teniendo validez, en la medida que haya acuerdos político-programáticos y voluntad política real para hacerlo.
Desde el MST creemos que todo este debate tiene que ser bien claro. Propuestas concretas sin ambigüedades y reuniones rápidas y comunes de todos los partidos que queramos avanzar en la unidad de la izquierda obrera, socialista y anticapitalista. Hasta ahora no ha surgido del PTS una explicación a fondo de su propuesta ni tampoco una convocatoria para debatirla. Por lo cual los próximos días tiene la responsabilidad de dar algún paso que muestre que quiere contribuir de verdad, a unir a la izquierda socialista y anticapitalista. Sin estos pasos, lamentablemente su propuesta quedará solo en palabras. Por eso se trata de ver, finalmente, si estamos ante una propuesta seria o una maniobra política. La realidad dirá. Esperamos sea un cambio positivo y no más de lo mismo.
Sergio García. Dirigente del MST
Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.