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Cede a las presiones de Washington

Argentina se abstendrá en la votación sobre Cuba

Fuentes: Agencias

El presidente Néstor Kirchner confirmó hoy que la Argentina votará por la «abstención» cuando sea debatido el caso Cuba en la Convención de Derechos Humanos, en Ginebra, a pesar de la gran movilización popular en ese país que solicitaba el voto en contra. De esta manera, el jefe del Estado cede una vez más a […]

El presidente Néstor Kirchner confirmó hoy que la Argentina votará por la «abstención» cuando sea debatido el caso Cuba en la Convención de Derechos Humanos, en Ginebra, a pesar de la gran movilización popular en ese país que solicitaba el voto en contra. De esta manera, el jefe del Estado cede una vez más a las presiones de Washington. Al hablar con Radio 10 desde Alemania, Kirchner sostuvo que «la posición argentina es la abstención».

«No intervenimos en los problemas internos de otros países, salvo para ayudar, como lo estamos haciendo en el caso de Haití», explicó Kirchner. El presidente ya había adelantado esta postura al canciller cubano, Felipe Pérez Roque, durante un encuentro que ambos mantuvieron en febrero en Buenos Aires, superados los roces por el caso de la médica Hilda Molina, quien había solicitado a Fidel Castro una autorización para pasar las fiestas con su familia en la Argentina, que fue denegada por el mandatario caribeño.

La comisión que sesiona actualmente en Ginebra, Suiza, tiene previsto tratar el próximo jueves la situación de los derechos humanos en Cuba, por iniciativa del gobierno norteamericano. Allí, la Argentina no rechazará una resolución que desde hace años promueve EE.UU. en ese foro para que expertos de la ONU controlen la situación de los derechos humanos en la isla. De esta forma, Kirchner se somete a las presiones de Washington para evitar que Argentina rechace la condena al gobierno de Fidel Castro, al igual que durante las gestiones de Carlos Menem y Fernando de la Rúa

La Argentina había votado en forma favorable durante las presidencias de Menem y De la Rúa, pero cambió su posición a la de «abstención» con la gestión de Eduardo Duhalde, postura que se repitió el 2004 y ahora se mantendrá, de acuerdo con los nuevos tiempos de gobiernos «progresistas».