Tres mujeres contra «el último dictador de Europa». Así titula «Público» su artículo de defensa de la agresión contra la soberanía de Bielorrusia.
Destacar que estas tres mujeres: Sviatlana Tsikhanouskaya, Veronika Tsepkalo y María Kolesnikova, no tienen ninguna experiencia política, y básicamente son las esposas de tres «referentes» de la «oposición Bielorrusa».
La mujer de un bloguero, la mujer de un banquero y la mujer del ex embajador en EEUU reconvertido en empresario.
Al bloguero lo voy a dejar aparte porque a fin de cuentas parece el peon más obvio.
El banquero está en la cárcel por fraude y blanqueo de capitales.
El tercero en discordia es Valery Tsepkalo. Ex embajador de Bielorrusia en EEUU y fundador del Silicon Valey Bielorruso fue despedido de su cargo como gestor del desarrollo tecnológico en su país por un conflicto de intereses creado entorno a la figura de Viktor Prokopenya, empresario e intento de banquero, actualmente residente en Londres.
Es decir, estas tres mujeres, que no son ni han sido nada, pero son útiles como comparsa de sus maridos, sirven para representar la verdadera lucha que hay ahora mismo en Bielorrusia, que no es más que una lucha de clases donde los oligarcas que se crearon al amparo de la destrucción de la URSS y sus voceros, quieren tomar el poder para usar al estado como garante de sus ambiciones mafiosas.
Por no decir, que el uso de sus mujeres es propaganda zafia, que pretende disfrazar de «feminismo» que tres mujeres «florero» defiendan los intereses oligarcas de sus familias.
Entrevista a Albert Santin sobre Bielorrusia
Carmen Parejo Rendón es directora de la Revista La Comuna