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Una psicóloga demanda a la provincia patagónica por “maltrato laboral”

Comenzó en Neuquén el primer juicio por «mobbing» en el país

Fuentes: Rebelión

Claudia Barrionuevo es una psicóloga del Hospital de Junín de los Andes que entabló una demanda a la provincia de Neuquén para que «cese el maltrato laboral del cual es víctima en su puesto de trabajo». Las audiencias -que pueden durar un mes y que se realizarán en la capital neuquina como en la misma […]

Claudia Barrionuevo es una psicóloga del Hospital de Junín de los Andes que entabló una demanda a la provincia de Neuquén para que «cese el maltrato laboral del cual es víctima en su puesto de trabajo». Las audiencias -que pueden durar un mes y que se realizarán en la capital neuquina como en la misma Junín- comenzaron ayer en el Juzgado laboral N° 4 de Neuquén, a cargo de la jueza Elizabeth Rivero de Taiana. Se trata de un juicio histórico ya que es el primer caso de amparo por «mobbing» que fue declarado admisible en el país, por lo que la sentencia que se dicte será importante para todos los trabajadores que sufren situaciones similares de maltrato y explotación laboral en su lugar de trabajo.

«Si bien yo venía sufriendo distintas presiones apenas llegamos a Junín (de los Andes) con mi compañero, que también trabaja en Salud mental, la última situación desencadenante fue que me prohibieron hacer tareas. Mediante una nota me informaron que no podía continuar realizando actividades grupales ni comunitarias y tampoco interinstitucionales. Lo único que me permitían era atender por consultorio»expresóla misma profesional demandante, poco antes de ingresar a la primera audiencia en el juzgado laboral. «Un jefe que fue nombrado recientemente secuestró toda la documentación con los registros de pacientes que yo tenía, negándome la posibilidad de volver a recuperarlos. Y luego de eso, me acusaron de llevar historias clínicas paralelas, cuestión que todos los trabajadores de salud mental, tanto de psicología como de psiquiatría, es habitual que utilicemos un registro aparte, específico de la disciplina, que tiene el sentido de proteger la intimidad de nuestros pacientes» detalló Barrionuevo, quien remarcó que «cualquiera se puede imaginar que en una población de 13 mil habitantes (como Junín de los Andes) muchos de los empleados tienen un parentesco sanguíneo o político con los pacientes, por lo que preservar la intimidad de los casos es fundamental. Pues bien: esa documentación fue extraída del lugar de atención y se la incorporó a una historia clínica central que circula en manos de muchísimas personas».

La propia psicóloga -quien hace 4 años trabaja en el hospital de Junín de los Andes, siendo la primer profesional de esa disciplina que llegó a ese pequeño nosocomio rural cordillerano- reclamó varias veces a su jefatura, en forma personal y por escrito, la situación de persecución que era objeto. «El diálogo es como de sordos y en realidad esta es otra de las formas del mobbing, ya que se manipula el significado y el sentido de lo que reclama uno y responden otra cosa, acusándote a vos por algo que no hiciste». Consultada sobre lo que espera del juicio que comenzó ayer, Claudia Barrionuevo aseguró que «las trabajadoras y los trabajadores debemos luchar por esto y que se haga justicia. Yo desde aquí convoco a que nadie se calle de esto, porque lo peor que podemos hacer es soportar y callarnos. Hay que hablar de esto, desocultarlo, ponerlo en el espacio público para fortalecernos y tener un mecanismo de protección… Más allá del resultado, yo sé que mi situación en ese lugar ya cambió. Puede ser distinto. Tiene la potencial posibilidad de que sea diferente».

Ivana Dal Bianco, la abogada de la psicóloga demandante, recalcó a que lo inédito de este caso, además de ser el primero que llega a juicio a nivel nacional, es que «Claudia (Barrionuevo) está en funciones, por más que ahora se encuentra con licencia laboral, producto del maltrato que ha sufrido y que exige que cese por vía judicial». «Ya ha habido un primer fallo de la cámara laboral de Neuquén que ha dicho que este amparo era admisible y que el acoso y el maltrato laboral va por la vía del amparo, lo cual es un antecedente muy importante para Claudia y para el resto de los trabajadores en todo el país» concluyó la abogada.