El Gobierno de Ecuador reaccionó este miércoles en contra de una publicación del diario español El País que lo relaciona con la guerrilla colombiana de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (Farc), y anunció que analizará enjuiciarlo por lo que consideró una calumnia. «Analizaremos cómo enjuiciar penalmente por estas calumnias», señaló el ministro de Defensa […]
El Gobierno de Ecuador reaccionó este miércoles en contra de una publicación del diario español El País que lo relaciona con la guerrilla colombiana de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (Farc), y anunció que analizará enjuiciarlo por lo que consideró una calumnia.
«Analizaremos cómo enjuiciar penalmente por estas calumnias», señaló el ministro de Defensa Wellington Sandoval al desmentir las denuncias difundidas por el rotativo, según las cuales las Farc «han mantenido conversaciones con las autoridades ecuatorianas al más alto nivel».
«Ni las autoridades ni el gobierno ni las Fuerzas Armadas tienen relación con las Farc», replicó el funcionario.
El País citó el testimonio de un ex guerrillero que aseguró que «altos mandos militares» proporcionan a los rebeldes colombianos «logística, armamento, carpas y uniformes».
Asimismo, denunció que las Farc «tienen ocho campamentos en Ecuador», desde donde trafica armas y drogas.
La canciller ecuatoriana, María Isabel Salvador, consideró «parcializada» la versión del periódico añadiendo que con ese tipo de informaciones se busca desprestigiar al gobierno.
«A mí me preocupa seriamente, me asusta, cómo un medio de comunicación como El País de España publica notas como ésta, con una corresponsal en Bogotá,
que sólo va a una fuente que hace todas declaraciones y no busca otros elementos», cuestionó la funcionaria.
Ecuador suspendió relaciones con Colombia a raíz de una incursión en su territorio que dio muerte a Raúl Reyes, número dos de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (Farc), y a otra veintena de personas, incluidos dos mexicanos que se encontraban en el campamento bombardeado.
Bogotá vinculó luego a Quito y Caracas con el grupo insurgente apoyado en una supuesta evidencia que halló en el computador de Reyes, abatido el 1 de marzo.
Aun cuando los gobiernos de Rafael Correa y Alvaro Uribe dieron por superada la controversia, por la que Colombia pidió perdón comprometiéndose además a no incursionar nunca más en otro territorio, Quito todavía no ha reactivado los vínculos.