Los lectores de los mayores rotativos de España que estén interesados en la situación en América latina, no encontrarán en ellos una descripción equilibrada de las realidades de aquel continente. Todo lo contrario, hay un sesgo conservador que aparece sin ninguna sutileza en aquellos medios. En realidad sorprende el carácter propagandista de las noticias, tomando […]
Los lectores de los mayores rotativos de España que estén interesados en la situación en América latina, no encontrarán en ellos una descripción equilibrada de las realidades de aquel continente. Todo lo contrario, hay un sesgo conservador que aparece sin ninguna sutileza en aquellos medios. En realidad sorprende el carácter propagandista de las noticias, tomando posturas muy favorables hacia gobiernos conservadores y extremadamente hostiles, casi histriónicas, hacia gobiernos de izquierda, como el presidido por Hugo Chávez en Venezuela o Evo Morales en Bolivia. Es imposible leer un artículo en esos medios que sea favorable o meramente equilibrado sobre dichos gobiernos. Ese comportamiento se hace bajo el pretexto de que tales medios están defendiendo la democracia, supuestamente amenazada por aquellos gobiernos. Tal argumento, sin embargo, pierde credibilidad, cuando se compara su cobertura de los gobiernos venezolano y boliviano con la de gobiernos conservadores en Latinoamérica de muy dudosas credenciales democráticas, como el gobierno Uribe de Colombia. Sus reportajes sobre ese gobierno son un ejemplo de la escasa credibilidad de su supuesta defensa de la democracia. En sus reportajes sobre el gobierno colombiano no han informado de que:
- Según la agencia de los derechos humanos Human Rights Watch, Colombia es uno de los países de América Latina donde se violan más los derechos humanos de sus ciudadanos. Según las denuncias presentadas a los tribunales colombianos, han desaparecido 17.000 personas en los últimos 16 meses.
- Según la Federación Internacional de Sindicatos, Colombia es el país del mundo donde se han asesinado más sindicalistas, (2.732). Menos de un 5% de esos asesinatos ha terminado en los Tribunales de Justicia. En el último Congreso de la Federación Sindical de EEUU (AFL-CIO), la sindicalista colombiana Jessica Hoyos denunció la relación existente entre las fuerzas paramilitares y otros grupos violentos, que han asesinado a sindicalistas, con el mundo empresarial y con el gobierno Uribe, y muy en especial con la oficina del Vicepresidente Francisco Santos. Mostró evidencia de cómo aquellos grupos que asesinan a los sindicalistas están financiados por las compañías estadounidenses Drummond Coal y Chiquita Brand (que se llamaba antes United Foods). 3.000 fusiles automáticos y 2,5 millones de municiones se enviaron a Colombia en aviones de Chiquita y fueron recogidos por el conocido grupo paramilitar AUC (responsable del asesinato de más de 24.000 personas), que está relacionado con los cuerpos de seguridad del estado.
- Según el Center for Economic and Policy Research de Washington, Colombia es el país de América Latina, después de México, donde se han asesinado más periodistas, y existe un miedo generalizado entre los profesionales de los medios. La mayoría de los medios de información ha seguido la línea oficial del gobierno en temas como la apertura de bases militares de EEUU en Colombia.
Ninguno de los rotativos de mayor distribución en España ha informado de estos hechos. En realidad, El País entrevistó al Presidente Uribe (17.05.09) y El Periódico al Vicepresidente Francisco Santos (11.10.09), sin preguntarles específicamente sobre ninguno de los hechos citados anteriormente. Y cuando El País publicó un artículo escrito por Miguel Angel Bastenier (12.10.09) en el que se criticaba al Presidente Uribe por su proyecto de cambiar la Constitución para perpetuarse en el poder, inmediatamente El País publicó un artículo del Embajador de Colombia, Carlos Rodado Noriega (15.10.09) defendiendo al Presidente Uribe. El País nunca ha permitido tal privilegio al Embajador de Venezuela, a pesar de que se escriben casi a diario artículos estridentes sobre Chávez en ese rotativo.
Es cierto que, como consecuencia de las quejas de los lectores, la línea «Vargas-Llosista» de El País se ha modificado algo, permitiendo, muy de vez en cuando, artículos menos halagadores para Uribe, como «La tentación de Álvaro Uribe», de Tomás Eloy Martínez (22.10.09), o «Bases Militares estadounidenses en Colombia», de Ernesto Samper Pizarro (12.11.09). Pero, El País dista mucho de ofrecer un análisis equilibrado de aquella realidad. Lo mismo ocurre con otros rotativos. Así, la entrevista de El Periódico al Vicepresidente Francisco Santos por la periodista Eva Peruga (11.10.09), llegaba incluso a excusar la represión, presentándola, como hace el gobierno colombiano, como una lucha contra el narcotráfico, convirtiendo a tal periodista (seguramente resultado de su ignorancia sobre el tema) en cómplice de aquella represión. El Periódico ha dado el Premio Antonio Asenso a la Sociedad Interamericana de Prensa, una asociación de profesionales de los mayores grupos mediáticos que presentan un sesgo en su denuncia de los abusos de los gobiernos hacia los medios, destacando que los más contrarios a la libertad de prensa son, como era predecible, Venezuela, Bolivia y Ecuador (todos ellos gobernados por las izquierdas) sin poner en esta categoría a Colombia, y ello a pesar de que hay más diversidad ideológica en los medios escritos, orales y televisivos en Venezuela que en Colombia, hecho fácil de verificar contando el número de diarios y cadenas de televisión contrarias a los gobiernos de ambos países. Hay más, muchos más, en Venezuela que en Colombia.
Ni que decir tiene, que cualquier persona con sensibilidad democrática debe denunciar cualquier restricción de la libertad de expresión en los medios, pero la selectividad en tal denuncia hace perder credibilidad en su supuesta defensa de la libertad, mostrando un cariz ideológico que debe, a su vez, denunciarse. En realidad hoy es más fácil encontrar un artículo crítico de Chávez en Venezuela que uno favorable a aquel gobierno en España. En nuestro país, sólo Público publica artículos y reportajes que permiten una visión más equilibrada de aquellas realidades.
Otras noticias ignoradas en los medios de información españoles
Tal sesgo conservador en la mayoría de los medios explica que la población española desconozca noticias que son de un indudable interés político y económico. Dos hechos recientes han sido ignorados por tales medios. Uno es que, según Mark Weisbrot, experto en temas sobre Latinoamérica del prestigioso Center for Economic and Policy Research de Washington, Bolivia tendrá este año el crecimiento económico más elevado de América Latina. Bolivia, hasta hace poco, tenía el desagradable privilegio de ser considerado el país más pobre de Sudamérica, bajo el tutelaje del Fondo Monetario Internacional (F.M.I.) durante los veinte años que precedieron a la victoria de Evo Morales (el primer presidente indígena del país) en las elecciones de 2005, pasando a gobernar en enero del año siguiente, 2006. Durante aquellos veinte años de tutelaje del país por parte del FMI, se siguieron las políticas liberales que el Fondo propuso en toda América Latina. Como consecuencia, en el año 2005, el PIB per cápita era menor que veinte años antes. El PIB de aquel país es sólo de 16.000 millones de dólares (con una población de sólo 11 millones, en una superficie que es la que ocupan España y Francia juntas).
No es de extrañar que el Presidente Evo Morales despidiera al FMI instándole a dejar el país, cambiando 180 grados las políticas estatales. Una de las primeras intervenciones fue la nacionalización de los hidrocarburos, y muy en especial del gas natural, intervención que, como era de esperar, cayó muy mal en los centros de la ortodoxia liberal. Otra intervención que también cayó muy mal en estos centros fue la decisión del nuevo gobierno boliviano de romper su relación con el Banco Mundial, cuyo centro de arbitraje tiende a favorecer sistemáticamente los intereses de las empresas a costa del sector público.
Estas políticas fueron muy eficaces, pues los ingresos de la industria de los hidrocarburos nacionalizada, permitió un aumento considerable de las inversiones públicas (pasando de un 6,3% del PIB a un 10,5% en 2009). Este crecimiento es incluso más meritorio, pues ha tenido lugar en un periodo que, como resultado de la crisis mundial, el precio de los hidrocarburos ha descendido Y la hostilidad internacional, incluyendo la mediática, ha crecido enormemente. El Presidente Bush incluso promovió grupos violentos en contra del gobierno, causa de que el Embajador fuera expulsado del país. El hecho de que el Presidente Morales haya intentado diversificar los medios de información, hasta ahora monopolizados por un grupo muy reducido de empresas informativas, ha sido una de las mayores causas de hostilidad mediática hacia su gobierno, como ha ocurrido también en Venezuela.
Otra noticia, publicada en la prensa extranjera pero ignorada en los mayores medios de información españoles es el discurso reciente del presidente Lula da Silva, de Brasil, en el que criticó duramente al presidente Obama por haber instalado las bases militares en Colombia, criticando también su política en Medio Oriente y en Irán. En este discurso celebró su amistad con el Presidente Chávez, denunciando la demonización de su figura por parte de los medios de información internacionales de sensibilidad conservadora y liberal, aplaudiendo y apoyando el establecimiento del Banco del Sur (promovido inicialmente por el gobierno venezolano), y refiriéndose a dicho Banco como la alternativa al Banco Mundial, de cuyas políticas fue muy crítico (Merco Press, 09.11.09).
Ninguna de estas noticias ha aparecido en nuestros medios, los cuales, con la excepción de Público están ocultando una realidad de enorme importancia para España. El surgimiento de las izquierdas en Latinoamérica está convirtiendo aquel continente (cercano a nuestro país por razones económicas, culturales y emotivas) en una de las áreas del mundo con mayor interés y vitalidad. Este hecho es consecuencia del enorme daño y descrédito de las políticas liberales (promovidas por la mayoría de los medios de información españoles) aplicadas en aquel continente durante los últimos treinta años. La ocultación de este resurgimiento está dañando a España, pues dificulta la comprensión por parte de la ciudadanía de lo que ocurre en aquella realidad.
Rebelión ha publicado este artículo a petición expresa del autor, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.