Los niños están reemplazando a las mujeres como objetos publicitarios. Según un estudio desarrollado por pediatras del Hospital de Jerez de la Frontera (Cádiz), la presencia de menores en los anuncios ha aumentado a la vez que disminuía la de mujeres, menos alejadas ya del estereotipo de símbolo sexual que las convertía en reclamo comercial. […]
Los niños están reemplazando a las mujeres como objetos publicitarios. Según un estudio desarrollado por pediatras del Hospital de Jerez de la Frontera (Cádiz), la presencia de menores en los anuncios ha aumentado a la vez que disminuía la de mujeres, menos alejadas ya del estereotipo de símbolo sexual que las convertía en reclamo comercial.
De acuerdo con las conclusiones de esta investigación, presentada en el Congreso de la Asociación Española de Pediatría, los menores aparecen en un tercio de los anuncios emitidos por televisión . En la mitad de ellos su presencia no está justificada ni por ser consumidor ni por ser destinatario del mensaje.
Tampoco la prensa está exenta de este uso de los niños.
El estudio se llevó a cabo durante seis meses, en los que se analizó el contenido publicitario de cuatro periódicos con el fin de conocer en qué materias y en qué proporción destaca la imagen infantil. «Los niños aparecían en el 4,5% de las materias publicitarias», ha asegurado el jefe de Servicio de Pediatría del hospital gaditano, Joaquín Ortiz Tardío. Su imagen se asoció a las secciones más dispares, entre los que destacaban ONG, en un 31,3%, sociedad, en un 21,1%, política, en un 8,7% o viajes, en un 4,9%.
Los datos aumentan en televisión
El equipo de pediatras analizó durante cuatro días entre las 16.00 y las 21.00 más de 400 anuncios emitidos en televisión. En ese tiempo pudieron comprobar que, en este soporte, las cifras se multiplican.
«Las principales materias publicitarias que hallamos fueron el hipermercado , la cultura y los medios de comunicación , entre otros», ha asegurado Ortiz Tardío. La figura infantil apareció en el 27,2% de los contenidos publicitarios.
Para este especialista, el aumento en la publicidad de la imagen infantil se debe, entre otras causas, «a su papel como compradores y consumidores, debido al incremento del gasto familiar referido a los hijos, así como al incremento de la capacidad adquisitiva de los menores. En segundo lugar, a la creciente influencia de los niños sobre el consumo familiar , y por último, al interés de incorporar cuanto antes a los niños a la actual sociedad de consumo».
Finalmente, los pediatras que participaron en esta investigación han expuesto que existe una discriminación de género en cuanto a los valores que están presentes en el discurso publicitario.
«El niño casi siempre se muestra como protagonista, activo, rebelde y violento mostrando valentía, destreza, ingenio e imaginación. La niña suele aparecer como secundaria, pasiva, obediente y delicada con ternura, abnegación, sensual y, en suma, con plena identificación con los aspectos más tradicionales de la mujer», ha concluido Ortiz.