En el diario Clarín de Argentina titulan Por críticas a Chávez, prohíben un recital de Alejandro Sanz, en El País de España afirman que Chávez le ha prohibido actuar el 1 de noviembre en el escenario previsto, de titularidad estatal. La agencia AFP titula también Venezuela deniega una sala para un concierto de Alejandro Sanz […]
En el diario Clarín de Argentina titulan Por críticas a Chávez, prohíben un recital de Alejandro Sanz, en El País de España afirman que Chávez le ha prohibido actuar el 1 de noviembre en el escenario previsto, de titularidad estatal. La agencia AFP titula también Venezuela deniega una sala para un concierto de Alejandro Sanz y Europa Press Venezuela prohíbe a Alejandro Sanz actuar en Caracas por sus críticas a Chávez.
Independiente de que a Alejandro Sanz le gustase Chávez o no, lo sucedido es simplemente que el ministerio de Educación Superior no ha cedido una sala de su propiedad, el poliedro de Caracas, para el concierto. Los organizadores habían comenzado a vender las entradas sin contar con la autorización y ahora deberán buscar otra centro donde llevar a cabo el concierto. No existe ninguna prohibición para que el cantautor toque en cualquier otra sala o lugar del país, venda sus discos, o haga la campaña musical o de promoción que le de la gana. A mucha gente el gobierno de Venezuela no le cede el Poliedro, ni el de España les cede el Teatro de la Opera, ni el Real Madrid C.F. permite a cualquiera utilizar el Santiago Bernabeu, ni los gobernantes autonómicos canarios ceden el teatro Pérez Galdós. Pero sólo en el caso de Venezuela se convierte en noticia diciendo que Chávez prohíbe a un cantante.
En las mismas fechas pasó mucho más discreta la noticia de que el alcalde de Toledo, gobernado por el PSOE, denegaba el uso de un Centro Social Polivalente para I Concilio Ateo, que iba a tener lugar del 9 al 11 de noviembre del año 2007. El motivo era la presencia del acto Leo Bassi, quien ya el año pasado no pudo presentar su obra de teatro La revelación en las dependencias municipales de esta ciudad, entonces gobernada por el PP, y tuvo que hacerlo en un salón de CC.OO. A diferencia del caso Alejandro Sanz, el concilio de ateos no tenía ánimo de lucro. La misma obra de Leo Bassi fue también cancelada el pasado mes de abril y mayor por los ayuntamientos de Marchena y Utrera a pesar de ya estar contratada por la Diputación de Sevilla.
No es este el único ejemplo. En septiembre de 2003, el ayuntamiento de Murcia se negó a ceder sus instalaciones municipales al cantante Fermín Muguruza que actuaba junto a Manu Chao. Posteriormente tampoco le permitieron utilizar las instalaciones públicas, en ciudades como Valencia o Madrid.
Y todavía hay más, el pasado 20 de noviembre, el Gobierno de la Comunidad Autónoma de Madrid (CAM), a través de su Consejería de Educación, obligaba a suspender la celebración del Festival «Rock contra la intolerancia y por la libertad de expresión» en un centro público de la región.
Más recientemente, el 27 y 28 de septiembre de 2007, el alcalde de Puerto Lumbreras (Murcia) también impidió la actuación del grupo italiano Banda Bassotti.
Existen muchos más ejemplos de actuaciones o actos públicos que han tenido problemas o impedimentos para llevarse a cabo en España como la prohibición del Ayuntamiento de Salamanca para que en el polideportivo de esa ciudad se celebrase el acto de apoyo a Cuba y Venezuela en la Cumbre Iberoamericana, la proyección de la película de Julio Medem, «La pelota vasca», el veto al grupo «Las niñas» a tocar en la televisión pública la canción «No a la guerra» durante el gobierno Aznar la interrupción de la emisión también en TVE cuando los participantes del concurso Operación Triunfo corearon «no a la guerra», también en las mismas fechas.
No recordamos que todas esas informaciones fueran destacadas por la gran prensa y tituladas como prohibiciones, como se ha hecho ahora con el concierto de Alejandro Sanz en Caracas. Una vez más, es el doble rasero cuando se trata de informar de Venezuela.