El diario El País mantiene el pulso firme en una de sus más notorias matrices de los últimos meses: asegurar que la portada de su edición web tiene alguna noticia sobre el presidente de Venezuela, Hugo Chávez. Luego de años en los que el otrora «diario independiente» ensayara todo lo posible para reducir la estatura […]
El diario El País mantiene el pulso firme en una de sus más notorias matrices de los últimos meses: asegurar que la portada de su edición web tiene alguna noticia sobre el presidente de Venezuela, Hugo Chávez. Luego de años en los que el otrora «diario independiente» ensayara todo lo posible para reducir la estatura mundial del líder bolivariano, ahora parece haber claudicado ante la envergadura de su liderazgo.
Aunque toda la cobertura esté orientada a manipular la realidad para acosar a su gobierno y al proyecto continental que abandera, hay que reconocer que se trata de una muestra de realismo notable – sobre todo viniendo de un periódico acostumbrado a visibilizar la realidad al antojo de sus intereses.
En esta ocasión, el diario destaca las declaraciones de Chávez en visita a Argentina, donde al tocar un sinnúmero de temas, reiteró su demanda de que el Jefe de Estado constitucionalmente vitalicio del estado español presente sus disculpas por el tono insultante con el que pretendió silenciar sus declaraciones durante la pasada Cumbre Iberoamericana.
Asimismo, el hoy «periódico global» acompaña el titular en primera página con una nota titulada «Chávez, el líder mundial peor valorado por los españoles». La información recoge un sondeo realizado a 1200 personas por el «Real Instituto Elcano», en plena crisis derivada del encontronazo verbal entre ambos Jefes de Estado. Según aseguran sus responsables, la encuesta recoge «la opinión de los españoles» sobre distintos líderes mundiales.
Para quien no se acuerde – o nunca pudo conocer – el escenario en el que se dieron las palabras del Borbón, conviene recordar que Chávez le salía al paso al discurso ingerencista del presidente del gobierno español, José Luís Rodríguez Zapatero, quién pretendió explicarle a los mandatarios sudamericanos que no existían causas externas para los males que aquejan a sus naciones. A este ridículo discurso, respondió Chávez recordándole la abierta participación del anterior jefe de gobierno español, José María Aznar, y de varias corporaciones españolas, en el golpe de Estado de abril de 2002 contra su gobierno constitucional.
La mayoría de medios españoles han querido colocar el énfasis en el señalamiento de Chávez acerca del carácter fascista del expresidente español, pretendiendo equiparar un calificativo ajustado a la realidad con un supuesto insulto. Al respecto, vale señalar que si alguno de los mandatarios hubiera calificado a Chávez de socialista, él no se habría ofendido en lo más mínimo.
Regresando al tema del día, sin duda hay que sacarse el sombrero ante el diario, por su coraje al calificar a Chávez de líder mundial. Es un gesto que se agradece, habida cuenta su ejercicio editorial cotidiano de ningunear y vapulear al presidente de Venezuela.
El subtítulo de la noticia señala que Chávez está valorado incluso por delante de Fidel Castro y de George W. Bush. A primera vista, destaca que en esta ocasión, el presidente venezolano «gana» en la percepción de los encuestados al líder más vilipendiado por la prensa española en todas las décadas que tiene gobernando Cuba, así como al que resalta como el más mimado de todos en los últimos años, habida cuenta su prontuario genocida.
De acuerdo a la nota, la «mayoría de los españoles» califica al presidente venezolano de «autoritario», «no fiable», «violento», «antiespañol» y «antiamericano». Si aceptáramos que estas cinco palabras reúnen la visión sobre Chávez de 8 de cada 10 españoles – como asegura el «Real Instituto Elcano» – lo que estaríamos constatando no es en realidad una opinión independiente de una ciudadanía concreta, sino el éxito notable del ejercicio unísono de los principales medios españoles en demonizar al líder venezolano.
Chávez nunca ha dado muestras de ser «antiespañol» – ni antes, ni durante, ni después del incidente. Ni sus palabras de condena de la participación de Aznar en el golpe, ni la demanda de disculpas a Juan Carlos de Borbón se dirigieron nunca a «España», ni a los y las españolas. Muy al contrario, de manera permanente, el mandatario venezolano ha deslindado la actuación del expresidente y su gabinete de la ciudadanía española, reiterando así mismo su respeto y admiración por la historia y el significado de sus pueblos.
Por otra parte, de acuerdo a sondeos históricos, el sentimiento «antiamericano» es compartido por la mayoría de los españoles – por lo cual es difícil entender porqué es incorporado a la lista de «aspectos negativos» de la personalidad de Chávez. Si tuviera sentido sumar peras con manzanas, la conclusión inevitable sería entonces que los propios españoles se valorarían a sí mismos negativamente.
En cuanto al resto de líderes peor valorados en el sondeo del «Real Instituto Elcano», figuran inmediatamente después de Bush los presidentes de Nicaragua, Daniel Ortega, y Bolivia, Evo Morales – dos líderes socialistas a los que se les ha aplicado de manera sistemática el mismo tratamiento que a Hugo Chávez en los últimos años, y que a Fidel Castro por décadas. Complementariamente, los mejor valorados son el Alto Representante de Política Exterior y de Seguridad Común de la Unión Europea, Javier Solana, el ex director del Fondo Monetario Internacional, Rodrigo Rato, la canciller alemana, Angela Merkel, y el presidente francés, Nikolas Sarkozy.
Dos españoles, en primer lugar, asociados cada uno a los dos partidos del sistema bipartidista neoliberal realmente vigente en el estado español. El primero, estuvo al frente de la OTAN, el mayor aparato de ingerencia militar del mundo; y hoy día ejerce como director de las políticas de ingerencia militar de la Unión Europea. El segundo, fue vicepresidente del gobierno que llevó al estado español a participar en la guerra de invasión a Irak, y que participó además en el golpe contra Chávez; y de ahí fue escogido por EEUU para presidir el principal aparato de ingerencia financiera y extorsión económica de los países del sur. Siguen a estos dos ilustres los presidentes de Francia y Alemania, que lideran la renovación de las políticas más conservadoras, en las dos naciones de mayor peso en la Unión Europea.
Finalmente, cabe destacar que según el sondeo del «Real Instituto Elcano», los españoles siguen teniendo «una imagen positiva» de Venezuela, sólo superada por Alemania. Es de agradecer este reconocimiento por parte de los responsables del sondeo, especialmente teniendo en cuenta que han logrado constatar que para cuatro de cada diez consultados Chávez representa una «amenaza real» para los «intereses españoles». Es tranquilizante pensar que el maquillaje no llegó hasta el punto de confundir a Venezuela con la maquillada versión de su Jefe de Estado – algo que la corporación mediática española viene realizando desde hace décadas, de manera machacona y obsesiva, con respecto al estado español y su Jefe de Estado.