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Los medios corporativos en Nicaragua y sus contrapartidas del FSLN

Fuentes: Rebelión

En Nicaragua, como en muchas otras naciones del mundo, la ofensiva del capitalismo global ha provocado que los principales medios de comunicación nacional se han vuelto obstáculos entre la sociedad e información esencial para el bienestar social. Informaciones, opiniones e ideas relevantes y necesarias para superar los más urgentes problemas sociales, culturales y económicos, son […]

En Nicaragua, como en muchas otras naciones del mundo, la ofensiva del capitalismo global ha provocado que los principales medios de comunicación nacional se han vuelto obstáculos entre la sociedad e información esencial para el bienestar social. Informaciones, opiniones e ideas relevantes y necesarias para superar los más urgentes problemas sociales, culturales y económicos, son pocas veces discutidas a profundidad por los medios corporativos nicaragüenses.

Como es el caso en muchas otras partes del mundo, esta situación es causada sobre todo por el simple hecho de que los dueños y patrocinadores de los medios de comunicación más grandes, quienes ejerzan control casi exclusivo sobre el contenido informativo y cultural de esos medios, forman parte de grupos económicamente poderosos que tienen aspiraciones que van en contra del bienestar de la sociedad en su conjunto.

Mientras que, por un lado, el contenido cultural (o de entretenimiento) de los principales canales de televisión, estaciones de radio y periódicos es generalmente comercializado y frívolo, y normalmente importado de corporaciones mediáticas extranjeras. Por el otro lado, programas nacionales de información y noticias son generalmente presentados desde una perspectiva que va contra los intereses de la mayoría de los nicaragüenses.

Es verdad que los medios alineados con el gobierno progresista del FSLN son fuentes alternativas informáticas y, hasta cierto punto, culturales. Sin embargo, se puede argumentar que frecuentemente estos medios, igual que sus socias corporativas, no logran contribuir a un debate constructivo sobre los asuntos más relevantes que preocupan a la mayoría de la población. Entre los medios pro gobierno son Canal 4 y La Nueva Radio Ya (en los cuáles el FSLN tiene fuerte influencia) y el periódico semanal del partido El 19.

Entretenimiento importado, valores importados

La inmensa mayoría del contenido de entretenimiento divulgado en los canales nicaragüenses de televisión (incluyendo Canal 4) es importado. Al importar este contenido, también se importan ciertas series de normas culturales y estereotipos sociales. Películas de acción y otras películas comerciales son importadas de los Estados Unidos mientras que telenovelas y programas de reality TV son importados de países grandes latinoamericanos como México y Brasil. Mientras tanto sólo unos cuantos de los miles de programas radiales que se trasmiten en Nicaragua se dedican a la promoción de música no comercial.

Es comprensible que la gran mayoría de las películas y programas televisivos son importados dado que muy pocos han sido producidos en Nicaragua. No es tan fácil aceptar la falta de promoción de música no comercial nicaragüense y latinoamericana dado la larga y saludable tradición de música folclórica y testimonial que Nicaragua comparte con el resto de América Latina, y el entusiasmo que tiene la población para esos géneros musicales.

Este bombardeo inundante de entretenimiento comercial importado está provocando un proceso progresivo de desnaturalización cultural y contribuye a ciertas tendencias culturales y psicológicas en la sociedad nicaragüense como la instalación generalizada de una mentalidad consumista, la normalización de violencia, el refuerzo de estereotipos opresivos de género y el aislamiento cultural de comunidades empobrecidas.

De nota roja a terrorismo mediático

En términos de la presentación de noticias e información el estilo de reportaje conocido como nota roja predomina la cobertura de muchos medios. Se tipifica el estilo nota roja (roja como sangre) en programas como Acción 10, 22 22, el periódico Hoy y los noticieros de La Nueva Radio Ya. En este tipo de reportaje se dedica mucho tiempo a los detalles sangrientos (se enfoca en primer plano, por ejemplo, las heridas de víctimas de choques vehiculares) y cobertura de confrontaciones entre individuos o grupos (quienes, casualmente, son casi exclusivamente de comunidades marginadas), mientras tanto se da poca importancia al relevante contexto, ya sea social, político u otro, dentro del cuál esos eventos toman lugar. Este tipo de reportaje voyerístico normaliza la violencia y fomenta irrespeto para la dignidad de individuos y grupos sociales procedentes de comunidades empobrecidas.

Entre los medios noticiosos que no enfoquen sus esfuerzos alrededor de la nota roja son los periódicos La Prensa, El Nuevo Diario y El 19, TV Noticias de Canal 2 y Multinoticias de Canal 4. Mientras que a un lado del cerco están El Nuevo Diario, La Prensa y TV Noticias que están alineado con la oposición derechista y centro derechista y que presentan información de una manera diseñada para socavar cada acción del gobierno, al otro lado están El 19 y Multinoticias según los cuáles el gobierno no comete nunca errores.

Escritores independientes y expertos de la comunicación han analizado a profundidad sobre la utilización de los medios corporativos en América Latina para socavar esfuerzos populares hacia un cambio político social. En Nicaragua los medios corporativos han confirmado que no son la excepción en esta tendencia continental demostrando, desde la llegada del gobierno FSLN al poder en enero 2007, que no les causa ninguna inquietud empeñarse en la falsificación sistemática de información.

Este proceso de falsificación incluye omisión, manipulación, afirmaciones sin base, e insinuaciones injustas. Programas exitosos del gobierno son boicoteados. Hechos, estadísticas, imágenes, comunicados y comentarios son manipulados con el objetivo de desacreditar todas las acciones gubernamentales. Afirmaciones que no pueden ser comprobadas con documentación o evidencia objetiva son presentadas como argumentos sólidos. Preguntas sobre la transparencia de transacciones oficiales son planteadas sin proceder a la correspondiente investigación periodística para clarificar si hay o no una respuesta válida.

Este tipo de anti reportaje es diseñado para asegurar que los receptores de informaciones carezcan del conocimiento y capacidad de análisis para ubicar las mismas en un contexto realista garantizando, por lo tanto, una falta de comprensión generalizada sobre temas claves. En este sentido los medios de la oposición practican una forma de terrorismo mediático, a como fue definido en la declaración de Caracas (del Primer Encuentro Latinoamericano Contra el Terrorismo Mediático en marzo del 2008). En esta declaración, suscrita por periodistas independientes y comunicadores sociales de toda América Latina, terrorismo mediático fue descrito como «una forma de agresión masiva y permanente [de corporaciones informáticas] contra los pueblos y gobiernos que luchan por la paz, la justicia y la inclusión.»

En aras de auto defensa el FSLN desnaturaliza sus propios medios de comunicación

Confrontados por la actitud agresiva de los medios de oposición la respuesta de los medios alineados con el FSLN ha sido adoptar un estilo de reportaje de elogio hacía el gobierno sin crítica alguna. Estos medios son importantes porque proveen una variedad de reportajes, muchas veces reportajes a fondo, que no son disponibles en otros medios. Sin embargo, la naturaleza estrictamente no crítica del estilo de reportaje significa que pocas personas de otras tendencias políticas utilizan estos medios.

Ni Multinoticias, ni La Nueva Radio Ya, ni El 19 suelan incluir contribuciones que se pueden considerar como críticas constructivas del gobierno, aunque viciosos ataques verbales de miembros de la oposición si se incorporan con frecuencia como justificación para verter ataques similarmente viciosos contra esos individuos.

William Grigsby, el Director de Radio La Primerísima, habló sobre este fenómeno durante una entrevista con Tortilla con Sal en Octubre. Según Grigsby «el Frente ha cometido un gran error. Han desnaturalizado sus propios medios. Es cierto que tiene una explicación. Está acosado. Al gobierno lo acosa la derecha con todos sus instrumentos. Y en el acoso el gobierno simplemente se defiende como puede. Y creo que se defiende de mala manera a veces. Creo que ha utilizado equivocadamente los medios. Los ha convertido en instrumentos de propaganda y no en medios de comunicación como tal.»

FSLN debe concientizar para mantener mayoría

Puede ser que, por estar disuadiendo audiencias, radio-oyentes y lectores en hogares que tradicionalmente no han apoyado al FSLN, los medios del partido, y de hecho el partido mismo, están perdiendo la oportunidad de concientizar a gran parte de la población sobre los temas reales que confronta la sociedad nicaragüense hoy en día. Además no está el partido en buena posición para contrarrestar comunes creencias equivocadas sobre lo que el gobierno puede y no puede hacer en términos de proveer soluciones para las principales preocupaciones de la población.

Es una cosa, desde un punto de vista académico, analizar y concluir que el tipo de políticas socio económicas que ha implementado el gobierno durante los últimos dos años son generalmente apropiadas dado la compleja situación socio-económica de la nación. Es una cosa muy distinta que la mayoría de los nicaragüenses, quienes han sido socavados personal, cultural e intelectualmente por el neoliberalismo en todas sus formas, puedan desenmarañar la sarta de desinformación y lograr comprender las limitaciones experimentadas por el gobierno.

En las recientes elecciones municipales el FSLN ganó con una mayoría global nacional. Probablemente esta victoria se debió en gran parte a la implementación de programas sociales exitosas durante los últimos dos años. Sin embargo, bien podría ser, que a muchos votantes, que votaron por el FSLN esta vez, pero que no son votantes tradicionales del partido, les haga falta sentir un cambio suficientemente sustancial como para asegurar un compromiso de futuro con el FSLN. Sí el FSLN quiere asegurar una mayoría global impertérrita para las elecciones presidenciales del 2011, es esencial concientizar a la población sobre los mecanismos del imperialismo y la actual situación geopolítica de América Latina.

Existen tantas posibilidades para realizar este tipo de trabajo de manera innovadora; la herencia cultural nicaragüense provee oportunidades numerosas para comunicar mensajes apropiados de manera sutil y atractiva. Por supuesto que la transformación del currículo nacional que entra en vigencia durante este mes representa una trinchera muy importante en esta lucha polifacética. En términos de su presencia mediática puede ser que el FSLN necesite repensar su estrategia. Por el momento todavía son los medios corporativos los que están imponiendo la agenda.

Karla escribe para www.tortillaconsal.com