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Marchas y reclamos de pueblos originarios contra el bicentenario

«No tenemos nada que celebrar»

Fuentes: Página/12

Bajo la consigna «el otro Bicentenario, el de los pueblos», se movilizará en Tucumán el pueblo diaguita. «No tenemos nada para festejar, se cumplen 524 años de resistencia indígena», afirma la convocatoria, para marchar hacia los tribunales tucumanos. «A 200 años de la llamada independencia de los españoles, los pueblos originarios no tenemos nada que […]

Bajo la consigna «el otro Bicentenario, el de los pueblos», se movilizará en Tucumán el pueblo diaguita. «No tenemos nada para festejar, se cumplen 524 años de resistencia indígena», afirma la convocatoria, para marchar hacia los tribunales tucumanos.

«A 200 años de la llamada independencia de los españoles, los pueblos originarios no tenemos nada que celebrar. Por el contrario, es un día de luto y reflexión por todos estos años de opresión», afirma la convocatoria al Segundo Parlamento de Pueblos y Naciones Originarias, que se realizará en la ciudad de Buenos Aires esta semana. En el mismo, hoy lunes en Tucumán, se movilizará el pueblo diaguita bajo la consiga «el otro Bicentenario, el de los pueblos». Exigen justicia por el asesinato del comunero Javier Chocobar, sucedido en 2009 y que aún permanece impune.

El 12 de octubre de 2009 fue asesinado de un disparo en la comunidad diaguita de Chuschagasta (departamento de Trancas) Javier Chocobar. El momento del crimen está filmado (incluso se puede observar por Internet), pero el Poder Judicial demora el juicio y los acusados (un empresario y dos ex policías -Darío Amín, Humberto Gómez y José Valdivieso- están en libertad.

«Desde Tucumán, donde se hizo la ‘declaración de independencia’ de España, nos preguntamos: ¿Qué tenemos para festejar? Se cumplen 524 años de resistencia indígena y popular, y 200 años de la constitución de un estado represor y genocida», afirma la convocatoria para hoy 4 julio a las 8.30 en la capital provincial (en Plaza Urquiza, para luego movilizar a los tribunales).

Firmada por la Unión de los Pueblos de la Nación Diaguita de Tucumán, el escrito aborda la historia desde un punto de vista silenciado por el discurso oficial: «Nuestra lucha es un proceso de siglos, donde nuestros abuelos resistieron la instalación paulatina del Estado en territorio diaguita del Valle Calchaquí, de Tafí y Trancas, y luego resistieron la invasión de encomenderos devenidos en terratenientes».

Explican que el Estado facilitó e impulsó la «ocupación territorial», donde a los pueblos indígenas se les asignó el rol de ser la servidumbre de los grandes estancieros. «Hoy, frente al gobierno nacional y provincial que presentan el discurso patrio de la unidad nacional y el patriotismo, salimos a las calles a recordarles que nos falta Javier Chocobar, asesinado por un usurpador y dos ex policías», denuncian. Y precisan que en los últimos diez años contabilizan once detenidos indígenas por defender el territorio, quince desalojos, 30 heridos y 100 causas judiciales.

Los dos pedidos principales son justicia por Chocobar y aplicación efectiva de los derechos de los pueblos indígenas. Acompañados por una decena de organizaciones sociales, las acciones (que se desarrollarán durante todo el año) se detallan en el sitio juicioporchocobar.com.ar

En Buenos Aires se realizará, los días 6 y 7, el Segundo Parlamento de Pueblos y Naciones Originarias (en avenida Belgrano 2527). «Para los pueblos originarios en lo que hoy es Argentina, la llamada independencia de los españoles significó la continua opresión por parte de las elites criollas descendientes de los mismos españoles que nos invadieron hace cinco siglos», contextualiza el escrito de una decena de organizaciones indígenas y recuerda que en las guerras por la independencia los indígenas fueron «utilizados como carne de cañón y luego dejados de lado».

«En 1816 comenzaba una nueva era de colonialismo en contra de nuestros pueblos, donde nuestros derechos ancestrales fueron violados sistemáticamente hasta nuestros días. Esto significó un nuevo genocidio, la pérdida de gran parte de los territorios en donde habitábamos y trabajábamos», afirma la convocatoria.

El parlamento indígena propone unificar una coordinación para la defensa de los derechos indígenas en el presente, exigir la libre determinación sobre los territorios comunitarios y hacer cumplir las leyes vigentes, que (entre otros puntos) establece que el Estado debe contar con el consentimiento previo, libre e informado de los indígenas de toda medida o proyecto que afecte a cada comunidad. También remarcan la criminalización de los pueblos originarios en la actualidad, recuerdan la «deuda histórica» del Estado argentino construido sobre el genocidio indígena y advierten que seguirán en lucha para recuperar los territorios usurpados.

Luego de 200 años de la Declaración de la Independencia, los pueblos indígenas afirman que ya es momento de construir «el anhelado Estado Plurinacional de Argentina».

El primer parlamento indígena se realizó en marzo pasado y se denunció al gobierno nacional por profundizar el extractivismo (minero, petrolero, agronegocios), favorecer a las grandes compañías y dejar de lado los derechos vigentes de los pueblos indígenas. «No vamos a permanecer pasivos, nos autoconvocamos y nos paramos frente al extractivismo neoliberal, frente a la criminalización, en defensa de la vida», señaló el documento de marzo, firmado por un centenar de dirigentes indígenas y que anunció una escalada de resistencias en los territorios rurales.

Otra actividad, también en Buenos Aires, será en la plaza frente al Congreso Nacional. «Acampe por la definitiva independencia», que se realizarán desde el jueves 7 hasta el sábado 9 de julio. Organizado por la Cátedra de Estudios Americanistas (Facultad de Filosofía y Letras de la UBA), la Organización de Comunidades y Pueblos Originarios (Orcopo) y el Movimiento Indígena de Naciones Originarias (Moino). Habrá proyección de documentales y charlas sobre la situación de los pueblos originarios en 1816 y en el presente, las luchas socioambientales, los movimientos campesinos y los derechos humanos.

Fuente: http://www.pagina12.com.ar/diario/sociedad/3-303331-2016-07-04.html