La señal del naciente canal latinoamericano Telesur puede ser vista en 14 países alrededor del mundo. Este proyecto abre una ventana a la teleaudiencia mundial para estar al tanto del auténtico acontecer latinoamericano contado por sus protagonistas, a la vez que rompe los estereotipos culturales, vendidos por los intereses políticos y económicos de los dueños […]
La señal del naciente canal latinoamericano Telesur puede ser vista en 14 países alrededor del mundo. Este proyecto abre una ventana a la teleaudiencia mundial para estar al tanto del auténtico acontecer latinoamericano contado por sus protagonistas, a la vez que rompe los estereotipos culturales, vendidos por los intereses políticos y económicos de los dueños de las trasnacionales de comunicación en conspiración tramposa, promovida por el Imperialismo Cultural de la Casa Blanca.
«Se trata en realidad del principio del fin del pensamiento único y hegemónico impuesto por Estados Unidos, el tiempo transcurrido ha comenzado a demostrar la equivocación de quienes pensaban que el proyecto no coincidía con la realidad: Se terminó lo del pensamiento único y el mensaje y las imágenes únicos», dijo el periodista uruguayo Aram Aharonian y director general de Telesur a la agencia Prensa Latina.
En cuanto al alcance de la programación el intelectual explicó «aunque sólo se está empezando, la programación es visible en ciudades de Brasil, Venezuela, Perú, Colombia, Ecuador, Argentina, Uruguay, Cuba, República Dominicana, Guatemala, Honduras, El Salvador, Nicaragua y Costa Rica».
La imagen de Telesur puede ser vista, además, en varios sitios alternativos de Internet que promueven la señal popular como vía para contrarrestar el poder hegemónico del gobierno de Bush y sus métodos de marginalización social. Este racismo y exclusión quedaron expuestos en los miles de cadáveres de raza negra que inundaron las aguas al paso del Huracán Katrina por Nueva Orleáns.
En un desesperado intento de buscar el tiempo perdido y dar una imagen de presidente lúcido y doliente ante los enfurecidos electores norteamericanos, Bush despertó del letargo vacacional que compartía en su rancho de Texas, junto a su célebre mascota, «The First Dog», Barney. La ex primera dama Bárbara Bush salió a la defensa de su primogénito cuando en un arrebato de conciencia expresó» Todos (los damnificados) se quieren quedar en Texas. Todos están abrumados por la hospitalidad. Y como de todas maneras son indigentes, esto les está resultando muy bien «. No es necesario recurrir a la teoría semiótica de Umberto Eco para develar el significado de estas palabras.
Por otro parte Aharonian indicó «una de las sorpresas del período de formación es la constatación de que, pese a su carácter multiestatal, se puede hacer una televisión independiente».
«Gran parte de la información está manipulada y se impone la necesidad de crear nuevos caudales de información latinoamericana, vista con ejes propios. Los obstáculos para la difusión de la señal de Telesur se deben a su carácter alternativo y su línea clara a favor de los procesos de integración, respetando la diversidad y pluralidad del continente», afirmó el comunicador.
En cuanto a la relación entre lo alternativo visto como marginal comentó: » la televisora comenzó a modificar paradigmas como el de que lo alternativo debe ser marginal. Lo alternativo no se contradice con lo masivo. Somos alternativos al mensaje hegemónico del Norte, pero para poder llegar a los pueblos debemos tener una política de masividad».
Las corresponsalías de Telesur ya se extienden a Buenos Aires, Brasilia, La Habana, La Paz, Bogotá y Caracas. A partir de octubre abrirán las oficinas en México y Estados Unidos. En cuanto a este último La Cámara de Representantes aprobó precipitadamente una enmienda para la creación de una emisora, distintiva para Venezuela, para informar «la verdad» a la audiencia de ese país.
Acerca de a este tema de penetración mediática el presidente venezolano Hugo Chávez apuntó: «Si el gobierno de Estados Unidos se atreviera a tomar alguna acción cualquiera que ella sea, que lancen señales muy potentes, entonces sería una guerra electrónica. Si Fidel Castro ha podido neutralizar la señal de Radio Martí, aquí también neutralizaremos cualquier señal».
Uno de los principales temores de Estados Unidos en relación a Telesur, es que al igual que lo hizo Al Jazeera en el conflicto de Irak, este canal neutralice el reinado de la CNN y revele, entre otras oscuras verdades, la situación de los 40 millones de pobres que tiene Estados Unidos y el centro de torturas mantenido por decenas de años en la ilegal base militar de Guantánamo.
Cuando se empezaron a dar los primeros pasos para la puesta en marcha del canal latinoamericano, y en Cuba se conoció la noticia, una significativa parte de los habitantes de la Isla, la acogió con agrado. A los cuatro canales oficiales se le sumaría uno que sería visto por millones de espectadores a nivel mundial.
«Desde todas sus aristas comunicacionales, Telesur es una oportunidad magnífica para reconocernos y adentrarnos en la realidad de nuestro expoliado continente. La función que puede llegar a desempeñar el canal dentro del rescate de las identidades culturales y de promoción de una cultura autóctona, lejos de las manipulaciones mediáticas, es todavía insospechable. Es un esencial proyecto, al que debemos apoyar todos los que de alguna forma estemos vinculados al mundo de la comunicación. Creo que es necesario crear las condiciones en nuestro país para incrementar el tiempo de transmisiones, más allá de la síntesis de una hora que bajo el nombre de «Lo mejor de Telesur», transmiten los medios cubanos», consideró un estudiante de la Facultad de Comunicación de la Universidad de la Habana.
En palabras de Aharonian, a pesar de inconvenientes, adelantos y retrocesos el canal se encamina a alcanzar su plenitud, traducida en las 24 horas diarias de programación previstas desde sus inicios, y prevalece la satisfacción «porque apenas en seis meses se construyó una televisora capaz de llenar las expectativas creadas».