M.H.: Vicente está haciendo una presentación de su obra de teatro «Eva Perón resucitada» en el teatro Melany del Centro de Arte RadioCity+Roxy+Melan en Mar del Plata que ha tenido un exitoso debut durante la primer semana de enero. ¿Cuál es la experiencia que estás viviendo allí con esta obra? Recuerdo que el año pasado […]
M.H.: Vicente está haciendo una presentación de su obra de teatro «Eva Perón resucitada» en el teatro Melany del Centro de Arte RadioCity+Roxy+Melan en Mar del Plata que ha tenido un exitoso debut durante la primer semana de enero. ¿Cuál es la experiencia que estás viviendo allí con esta obra? Recuerdo que el año pasado me comentabas de todas tus dudas sobre la posibilidad que esto tuviera repercusión y parece que finalmente sí la ha tenido.
V.Z.L.: Así es. Cuando uno humildemente quiere contribuir a cambiar el mundo tiene que no mentirse a sí mismo. A nosotros nos había ido muy bien en Buenos Aires haciendo esta obra en la fábrica recuperada IMPA, pero ahora nos habían ofrecido montarla en un sitio muy popular y tradicional de Mar del Plata en pleno centro, a metros de la Catedral, y donde en general los espectáculos son de otro tipo, más específicamente del espectáculo, de la música. Por ejemplo, en otro horario está en el mismo teatro, Cacho Castaña, que obviamente es gente a la que uno respeta y también al público que va a verlo pero, obviamente, nada tiene que ver ese público y ese tipo de espectáculos, que es ya clásico en esos teatros de temporada en Mar del Plata, con la propuesta nuestra de montar «Eva Perón resucitada», que ideológicamente, y muy fuertemente desde la estética, apela a otros códigos.
Por eso cuando nos cruzamos esa vez yo te hablaba de mi inseguridad. También es cierto que a pesar de que pasan los años uno quiere intentar concretar sus sueños y, para mí y las 20 personas que llevamos a la realidad esta obra, nos interesaba ver qué pasaría.
Nos animamos, agradecemos a los compañeros de la sala Melany que organizan los espectáculos y que se animaron también ellos a meternos en una variante que generalmente poco se cruza con nuestra estética y nuestra ideología.
M.H.: Recuerdo que ese día que nos vimos estabas con Regine, tu esposa, y ella afirmó que entendía que esta obra tenía éxito porque venía a llenar un vacío.
V.Z.L.: Así es, es un vacío desde muchos lugares, porque por más que en el verano y desde los medios hegemónicos se apela a una desmemoria activa, a bajar el nivel de exigencia en los que hacen el análisis de la realidad, es dejarse ganar por la memoria histórica, por la poesía en el sentido más profundo de lo que es la poesía y lo que simboliza en la humanidad.
A pesar de todo eso nos jugamos y a veces uno tiene que hacer una autocrítica, porque desde algún lugar cuando yo dudaba que nos pudiera ir bien, también estaba dudando de la potencia de nuestro trabajo y no hablo solo de mí que la escribí, la dirijo, la pongo en escena y hasta me animo a hacer uno de los papeles principales junto a Nara Carreira, que encarna a Eva Perón.
Lo cierto es que desde que empezamos cada vez sumamos más gente, tal es así que los encargados de la sala nos ofrecieron sumar otra función a la semana y en un horario loco, porque nosotros la hacemos los domingos a las 21:00 y había una chance de ver qué pasaba si nos animábamos a inaugurar un nuevo horario y lo único que tenían libre era los lunes a las 18:00. Uno imagina que a esa hora en Mar del Plata toda la gente está en la playa y si el día no da para la playa busca otra actividad para hacer, pero aunque todos los días dieron para ir a la playa, este lunes abrimos y se llenó, quedando gente afuera.
M.H.: Hasta Hollywood no parás.
V.Z.L.: Inclusive estoy pensando que con todos los millones que voy a ganar en Hollywood luego puedo hacer teatros por toda Latinoamérica. Hasta puedo lograr comprarle a Racing los jugadores más grandes del mundo y que salga alguna vez campeón. O sea, tengo muchas posibilidades.
M.H.: Muchos proyectos a partir de «Eva Perón resucitada».
V.Z.L.: Voy a resucitar yo. Nosotros hacemos bien en tomarnos todo así, con humor, porque es un momento complicado para la sociedad argentina y superando lo que toda persona que escribe y que como en mi caso tiene su propio narcisismo, que es parte del proceso creador, tengo conciencia que así como pasó en Buenos Aires, lo que está siendo «Eva Perón resucitada» en Mar del Plata adquiere una trascendencia social que merece un análisis más complejo, a lo que la Psicología social puede dar armas para el entendimiento.
Te cuento que además el diario La Capital, que es el más importante, una especie de Clarín o La Nación en Mar del Plata, nos dio la tapa, eso cambia el panorama, incluso me hicieron un reportaje de una página completa para hablar de la obra.
Nos han entrevistado de todos los medios de la ciudad, nos han tratado con un amor y solidaridad muy fuerte, también los artistas marplatenses que están haciendo continuas denuncias de la actual gestión; estoy hablando del Intendente Arroyo y de su equipo, especialmente en Cultura.
La gente de la cultura en Mar del Plata, se ha quejado en forma unánime y están en una especie de denuncias públicas de los ataques del Intendente y su equipo de «Cultura» a los artistas de la ciudad, que superando diferencias se han unido en la denuncia a esto que ellos entienden como la constitución de uno de los momentos de mayor espanto que vive la cultura de la ciudad.
En medio de toda esa situación que «Eva Perón resucitada» tenga tanto apoyo se convierte también en símbolo de muchas cosas.
Gracias a todos los que hacen el programa por habernos dejado compartir la alegría que nos está dando esta obra.
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