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Televisiones comunitarias

La experiencia de Catia Tv

Fuentes: Revista Pueblos

Durante los últimos años en Venezuela se ha vivido un proceso de democratización de las comunicaciones, un cambio de paradigma comunicacional en el que radios populares, prensa barrial, agencias contrainformativas y televisiones comunitarias comienzan a ser protagonistas de la historia, un ejercicio de poder donde la producción y gestión de los medios está en manos […]

Durante los últimos años en Venezuela se ha vivido un proceso de democratización de las comunicaciones, un cambio de paradigma comunicacional en el que radios populares, prensa barrial, agencias contrainformativas y televisiones comunitarias comienzan a ser protagonistas de la historia, un ejercicio de poder donde la producción y gestión de los medios está en manos de las comunidades barriales y organizaciones sociales. En este movimiento de medios comunitarios y alternativos, la televisión comunitaria emerge como una experiencia representativa del proceso. A través de la herramienta audiovisual y de la autogestión del canal los vecinos y vecinas participan, se organizan y buscan soluciones a sus problemas locales.

Al llegar al barrio caraqueño de Catia, situado al oeste de la ciudad, una se sorprende al ver el letrero sobre una casa de estilo colonial: «No vea televisión, hágala», es la sede de Catia Tv, la primera televisión autogestionada por vecinos y vecinas.

El nacimiento de Catia Tv

Hace 17 años que la comunidad realiza un trabajo sociocultural en esa zona; tras la revuelta popular del «Caracazo» en 1989 un grupo de vecinos y vecinas dio sus primeros pasos con la creación de la Casa de la Cultura Simón Rodríguez. Siguiendo la experiencia del movimiento «cineclubista» de fines de los 70 comenzaron a proyectar películas de 16 mm. al aire libre, así nace el Cine Club Manicomio.

Más tarde consiguen una cámara y comienzan a registrar la vida cotidiana y la memoria colectiva de los fundadores de esos barrios, de las poblaciones desplazadas del campo a la ciudad, por lo que la producción audiovisual pasa a convertirse en herramienta de participación y organización. En palabras de Wilfredo, fundador de Catia Tv: «Una noche se nos ocurrió proyectar la historia del barrio; la gente comenzó a verse, les gustaba escuchar lo que pensaban. Nosotros decíamos que allí la gente era protagonista de su propia historia. Fue ahí cuando al compañero Ricardo Marquet se le ocurre montar una televisora. Estábamos aprendiendo, no sabíamos qué era una televisora comunitaria, no entendíamos ni qué eran las ondas hertzianas».

Al principio nadie creía que este deseo colectivo fuera realizable. Mientras los trataban de «locos», el grupo seguía creyendo en la utopía de hacer televisión para la comunidad. Al principio pensaban en un canal en circuito cerrado, luego conocieron Tv Rubio, que llevaba años experimentando con el medio, y entraron en contacto con el técnico que hacía transmisores caseros. La concreción de la cadena en Catia se hace posible en el marco del proceso de autoorganización comunicacional en comunidades y organizaciones sociales. El proceso bolivariano de transformación social, cultural y político llevaba ya tres años, y uno la creación de la Asamblea Nacional, el órgano representativo de la nueva democracia «participativa y protagónica».

A raíz de la inauguración de un ambulatorio por parte del presidente, los miembros del proyecto deciden entrevistar a Hugo Chávez. Wilfredo recuerda la anécdota: «… Ricardo agarró la cámara y Blanca el micrófono y se colaron hasta llegar a donde estaba el presidente (…). Blanca logra hacerle una pregunta: ‘Presidente, un saludo para Catia’; el presidente se da la vuelta y dice: ‘Un saludo para Catia’. Luego de relatar algunas vivencias de su niñez por las calles de Catia, les pregunta a mis compañeros de qué medio eran y ellos le contaron que teníamos un proyecto de televisora comunitaria. Todavía no se hablaba de Catia Tv; pero fue así como Chávez se comprometió, a través del Fondo Económico Social, a que nos destinasen un dinero para el proyecto.»

En marzo de 2001 Catia Tv logró salir al aire de forma regular y legal, luego de varias trabas burocráticas, con un permiso otorgado por CONATEL (Comisión Nacional de Telecomunicaciones). Meses más tarde sufre amenazas de grupos antichavistas hasta ser desalojados del Hospital Lídice, en el Manicomio, por la Alcaldía Mayor de Caracas, opositora en ese momento al gobierno nacional. El canal estuvo sin transmitir un año a consecuencia de esta situación, que llevó al colectivo a dedicarse a la producción audiovisual como forma de obtener recursos económicos para volver a salir al aire, a mediados de 2002.

Durante este primer período se abre un proceso de discusión entre instituciones del Estado (CONATEL y MINCI -renombrado recientemente como Ministerio del Poder Popular para la Comunicación y la Información) y los medios comunitarios y alternativos sobre la reglamentación que regiría a estos últimos. Catia Tv, junto al resto de radios comunitarias y proyectos emergentes de televisión, marcaron un hito en el proceso de democratización del espectro radioeléctrico y de comunicaciones que replanteó el panorama de propiedad y gestión de los medios. Así es como en marzo de 2002 se sanciona el «Reglamento de Radiodifusión Sonora y Televisión Abiertas Comunitarias de Servicio Público, sin fines de lucro».

«… Cuando el presidente va a inaugurar Catia Tv en diciembre de 2000, lo llama el presidente de CONATEL para decirle que no puede inaugurar la televisora porque es una televisora sin permiso. Entonces, se suspende la inauguración de Catia Tv; sin embargo el presidente dice que nos den un permiso provisional. Catia Tv accede a un permiso, sin existir reglamento; pero esta situación obligó a que se diera la discusión del nuevo reglamento de medios comunitarios» resalta Gabriel. Un mes después de la aprobación de este reglamento, en abril de 2002, se produce el intento de golpe de Estado por parte de una alianza entre partidos de derecha, grupos empresariales y un sector militar que, con fuerte apoyo de los grupos económicos de comunicación, intentan destituir a Chávez. Entonces, los medios alternativos y comunitarios jugaron un rol importante en informar y defender los intereses de las mayorías populares que exigían la restitución del gobierno democrático de Chávez, a la vez que buscaban contrarrestar el discurso manipulador de los medios privados que tergiversaban la realidad social en favor de los golpistas.

Aquella coyuntura obligó al gobierno a reconocer a los medios comunitarios y alternativos como canales legítimos de participación social. De esa situación se desprende la negociación entre Estado y movimientos de la cual emana la reglamentación actual que avala la habilitación, el desarrollo y fortalecimiento de dichos medios, mediante dotación de tecnología, certificación y homologación de equipos por parte del MINCI y CONATEL. De esta manera queda establecido un acuerdo de cooperación donde para el Estado el espectro radioeléctrico pasa a constituirse en recurso estratégico del proyecto de «soberanía nacional» y para los medios comunitarios y alternativos, la radio y la televisión pasan a ser herramientas colectivas, e independientes del Estado, para la organización popular.

Otro modo de entender la comunicación

«Concebimos una comunicación en función de la transformación y para la liberación social. No creemos en una comunicación que no transforme y eso es parte de lo que nos define como medio comunitario (…). Catia Tv tiene varios objetivos, siendo el principal el fortalecimiento de la organización dentro de las comunidades más pobres de Caracas. De alguna manera, nos definimos como un medio de clase, un medio de la clase pobre (…). La gente no viene a dar su opinión, la gente viene y elabora sus propios contenidos, graba y edita y los transmite; empieza a entender a Catia Tv como un real espacio del ejercicio del poder, en el cual no sólo está participando sino tomando su decisión de qué es lo que está saliendo por esta señal. Cuando uno le pregunta a la comunidad, la gente realmente siente que éste es su canal, que éste es un medio del pueblo, hecho por el pueblo y para el pueblo,» enfatiza Meylin.

Meylin y Gabriel son dos jóvenes que se incorporaron a Catia Tv hace algunos años. Ambos son miembros de la Fundación Catia Tv, conformada por más de 30 personas. La gestión de la televisión la lleva a cabo la fundación y se dedica a tares administrativas y de capacitación, en la producción y la programación participan la fundación y los Equipos Comunitarios de Producción Audiovisual Independiente (ECPAI) de los barrios del oeste. La programación del canal se compone de un 15 por ciento de cuota de la fundación, otro 15 por ciento de producción independiente y un 70 por ciento de producción de los ECPAI. En este sentido, Gabriel resalta: «Lo fundamental fue una negociación entre los medios comunitarios y CONATEL y lo resultante es el reglamento. La idea fundamental es -y este es el gran logro del reglamento- la división del medio del mensaje; el mensaje es construido por las comunidades, mientras que el medio es administrado por una fundación; por lo tanto quien produce es la propia comunidad, es decir, el ECPAI».

Los ECPAI son pequeños grupos de la comunidad que realizan la mayor parte de los contenidos, son el mecanismo para que la comunidad acceda a la participación directa en el canal, priorizando las problemáticas territoriales como la agenda televisiva de Catia Tv. Actualmente en Catia Tv funcionan entre 45 y 50, cada uno formado por 4 ó 5 personas que hacen un total de 250 participantes en la parrilla de programación. Los temas son muy variados, desde las problemáticas sobre salud, educación, medioambiente, trabajo y vivienda, hasta las experiencias culturales, étnicas y generacionales de las comunidades afrodescendientes, indígenas y mestizas. El modelo de participación de los ECPAI se ha constituido en un verdadero ejercicio biopolítico que ha generado un proceso de autoorganización y autogestión de la comunidad. En este sentido, Gabriel describe el rol protagónico de los ECPAI, definiéndolos cómo:

«Comunitarios porque son las comunidades quienes producen el mensaje y, nosotros, la fundación, damos la asesoría técnica. Equipos porque la idea es que sean colectivos, no individualidades, y que tengan una necesidad comunitaria de comunicarse, que sean grupos que están trabajando en los barrios con los trabajadores, con los estudiantes, que estén de verdad ligados a un proceso social de transformación y de cambio. Productores audiovisuales, porque nosotros damos la formación audiovisual muy básica, pero lo importante es que a la gente se le quite el miedo a la cámara, a la idea de hacer televisión y que vea que es muy fácil hacerla. La mayoría de los ECPAI son territoriales; la idea es que cada sector tenga un equipo de producción donde la comunidad sepa que existe, que puede participar junto a él y que además de buscar a Catia Tv, pueda buscar al ECPAI e incluso colaborar con él. Así se va fortaleciendo la independencia del ECPAI y de la comunidad porque tienen un centro de comunicaciones en cada barrio.»

Catia Tv está en el aire todos los días desde las 10 de la mañana hasta las 12 de la noche con una programación de películas y documentales sociales independientes, además de las producciones de los ECPAI y de una hora en vivo de foro debate donde se discuten temáticas barriales o problemáticas de coyuntura política nacional, latinoamericana y mundial. El proyecto del canal es concebido como un espacio militante y de tra bajo, donde por una lado están las personas de la fundación que, al margen del trabajo asalariado, le dedican un tiempo voluntario; y por otro las personas que participan de los ECPAI que, poco a poco, pueden ir integrándose como miembros de la fundación y pueden financiar sus programas vendiendo pautas publicitarias a cooperativas, empresas solidarias y pequeñas y medianas compañías. Actualmente el modo de financiamiento de Catia Tv está compuesto por las publicidades que genera cada ECPAI para sus programas y un acuerdo de pautas comerciales con instituciones del Estado. El objetivo es lograr la autogestión del canal mediante la publicidad ética, con anunciantes que promuevan una economía alternativa y solidaria.

Desde sus inicios, Catia Tv ha sido una experiencia central y motor del resto de los proyectos televisivos. Ha dado cursos de capacitación a la mayoría de ellos, ha creado mecanismos para que la comunidad participe y se apropie del medio y ha sido además uno de los medios que más participación ha tenido en la mediación con el Estado para obtener el marco legal que rige actualmente los medios sin fines de lucro.

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*María Cecilia Fernández es comunicadora social en medios alternativos latinoamericanos. Este artículo ha sido publicado en el nº 25 de la edición impresa de Pueblos, marzo de 2007.