Llegando a finales del año 2007, creemos necesario puntualizar sobre algunos temas que hacen al futuro de la lucha llevada a cabo por los obreros del puerto. Intentando humildemente señalar algunas falencias o experiencias que esperamos sirvan al fortalecimiento de la clase trabajadora, en esta y en otras luchas, recordando que todos los que deben […]
Llegando a finales del año 2007, creemos necesario puntualizar sobre algunos temas que hacen al futuro de la lucha llevada a cabo por los obreros del puerto. Intentando humildemente señalar algunas falencias o experiencias que esperamos sirvan al fortalecimiento de la clase trabajadora, en esta y en otras luchas, recordando que todos los que deben trabajar tienen los mismos intereses.
Llegaron los subsidios: Durante este último año pudimos ver, a través de las distintas medidas de lucha (corte de calles, piquetes en fábricas, marchas, etc.), o en las Asambleas desarrolladas para la toma de decisiones, que la justeza, la claridad, la permanencia del reclamo por la registración laboral, no fue acompañada la mayoría de las veces, de la cantidad de trabajadores suficientes. Y más aún si tomamos en cuenta que los trabajadores en negro son alrededor de 6.000 y la lucha constante sólo fue llevada por un núcleo de aproximadamente 200 personas.
Mal que nos pese, debemos reconocer que una gran parte de los mismos trabajadores afectados, se inclina por la indiferencia y comodidad, respecto a las condiciones de trabajo que les toca en suerte.
Un sentimiento de bronca y tristeza invade a aquellos trabajadores que siempre lucharon, cuando ven que la gran masa de sus compañeros en actividad o no, sólo se acercan cuando se habla de la posibilidad de obtener un subsidio. Pero no es algo nuevo, ya sucedió años atrás con el reparto de bolsas de comida.
Además de la concientización para la lucha hace falta pensar en el futuro, en el recurso, en las cuotas de captura, en las especies en extinción y en las nuevas especies que son pasibles de ser procesadas por la mano del hombre.
La cantidad de pescado para procesar es cada vez menor, las especies también varían. A esto se suma el procesamiento a bordo de los buques y la nula decisión del gobierno de priorizar el aprovisionamiento de materia prima para su procesamiento, y no su exportación sin valor agregado.
Sin quererlo, es el propio desarrollo de la producción a través de sus diferentes fases, la que une a los trabajadores en busca de sus intereses comunes.
La modernización de los medios de producción (llámese barcos, nuevas plantas, etc), como la optimización de las fases o sistemas de producción (las nuevas especies a capturar deben ser sometidas a otro tipo de trabajo, debe proporcionarseles valor agregado no sólo ya con el fileteado), hacen que los trabajadores se empiecen a preocupar, no ya sólo por su blanqueo -que afirmamos es lo primario- sino por las nuevas modalidades de trabajo.
PERSPECTIVAS
Como venimos sosteniendo desde la O.T.M., una vez que las elecciones pasaron, la «tolerancia» por parte del gobierno se terminó: se desalojo de los trabajadores autoconvocados de la sede de su Sindicato y se los procesó por usurpación; la militarización del Puerto continúa. Ya pasaron las Marchas a la Municipalidad, asambleas, discusiones en el seno de la clase, sufriendo amenazas verbales y físicas, teniendo en contra a los patrones, al Estado, a parte de sus mismos compañeros, registrados o no, ante la indiferencia de la sociedad y también de gran parte de la clase. Hoy hace más de 5 meses que estos trabajadores no tienen su fuente de trabajo, no tienen cómo procurarse los medios de su propia existencia, y siguen esperando.
UNION Y ORGANIZACIÓN. Lo único que puede abrigar las esperanzas de los trabajadores y defender las conquistas que supieron conseguir es: la UNION Y ORGANIZACIÓN.
UNION: las cámaras patronales sí se unieron y enfrentaron, junto con sus aliados de poca monta los cooperativistas, a los asalariados. El Estado se une en todas sus facetas (intendente, consejo deliberante, órganos de represión, ministerio de trabajo, etc.), para defender los intereses de los empresarios.
Los trabajadores deben UNIRSE y dejar atrás divisiones ridículas, como la pertenencia a tal o cual empresa. Todos los trabajadores pertenecen a la misma clase, la unión para defender sus intereses es fundamental. La división es derrota segura.
ORGANIZACIÓN: la clase debe organizarse, agruparse, fortalecer el núcleo que se va formando, para resistir los momentos defensivos como este. Y para esto es fundamental un Programa de Lucha, que contenga máximas y mínimas. Como venimos sosteniendo desde las publicaciones de la O.T.M. los trabajadores debemos prepararnos para conflictos cada vez más largos en el tiempo. La agudización en las contradicciones de clase, también se verá reflejada en la cada vez mayor dificultad en arrancar a la clase empresaria y al Estado, los beneficios o conquistas económicas.
ORGANIZACIÓN DE TRABAJADORES MARPLATENSES
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