Con indignación he visto que El País publicó 3 artículos tendenciosos sobre Venezuela en un solo día, el pasado 16 de abril. El primero titulado «60% de venezolanos rechaza políticas de Chávez» cita encuestas de Consultores 21 e Hinterlaces, que no especifican la ficha técnica del sondeo, ni su metodología. Sería positivo para sus lectores […]
Con indignación he visto que El País publicó 3 artículos tendenciosos sobre Venezuela en un solo día, el pasado 16 de abril.
El primero titulado «60% de venezolanos rechaza políticas de Chávez» cita encuestas de Consultores 21 e Hinterlaces, que no especifican la ficha técnica del sondeo, ni su metodología. Sería positivo para sus lectores que su periódico reconozca que las dos encuestadoras tienen muy poca credibilidad, por sus equivocadas proyecciones en el pasado y conocido vínculo con partidos de la oposición venezolana.
Según la reciente encuesta del Instituto Venezolano de Análisis de Datos, un 66,5% de los venezolanos aprueba la gestión de Chávez, frente a un 31% que la rechaza.
En el segundo, «Los países andinos con mayor nivel de democracia son los que menos creen en ella» hace referencia a un informe de la Comisión Andina de Juristas (CAJ) que utiliza una ridícula argumentación al basar el alegato de que los venezolanos están contentos con su democracia porque confunden esta palabra con asistencialismo. Esta organización de dudosa reputación financiada por EE UU a través de la Nacional Endowment for Democracy , no elabora sus propias investigaciones y encuestas, sino que interpreta subjetivamente las elaboradas por otros, como ha ocurrido en el presente caso al manipular datos muy positivos sobre la percepción de la democracia en Venezuela recogidos por Latinobarómetro.
Por último, «Dictadores» encaja en la línea de hostigamiento editorial que mantuvo El País durante el 2007 cuando vinculó a Chávez con el calificativo «autoritario» 34 veces, 10 veces «dictador», 7 veces «totalitario» y un sinnúmero de veces «caudillo». Este artículo tilda al presidente de Venezuela de «payaso», «caudillo» y «dictador».
Además divulga información falsa al presentar la decisión de la Comisión Nacional de Telecomunicaciones de cambiar la franja horaria de la emisión de Los Simpsons de la infantil a la nocturna, como un acto de censura ordenado por el presidente.
Esta parcializada cobertura de Venezuela en El País desde el inicio del gobierno bolivariano está afectando seriamente la credibilidad del diario.