Mucho se ha dicho sobre el poder de los medios de comunicacion masiva, sobre su capacidad para influenciar nuestras sociedades, marcar la agenda política, hacernos desear lo que no necesitamos o discutir apasionadamente sobre temas que no nos interesaban cinco minutos antes. Entre esos «superpoderes», los medios cuentan con la capacidad de inducirnos en la […]
Mucho se ha dicho sobre el poder de los medios de comunicacion masiva, sobre su capacidad para influenciar nuestras sociedades, marcar la agenda política, hacernos desear lo que no necesitamos o discutir apasionadamente sobre temas que no nos interesaban cinco minutos antes. Entre esos «superpoderes», los medios cuentan con la capacidad de inducirnos en la toma de decisiones que marcan nuestra vida, desde qué zapatilla comprar hasta quién nos debe gobernar. En las elecciones del domingo último en la Argentina, el establishement mediático nacional ha dado muestra, de la forma mas clara imaginable, de su capacidad para crear candidatos y catapultarlos a lo más alto del escenario político, con gran eficacia y en tiempo record.
El primero de abril del corriente año, y luego de tres décadas de carrera artística y un cierto prestigio en el mundo del espectaculo, el actor Miguel del Sel presentó oficialmente en conferencia de prensa su candidatura a gobernador de Santa Fe para las elecciones llevadas a cabo el 24 de Julio último. El gestor de la idea Mauricio Macri, Jefe de gobierno (alcalde) de la ciudad Autónoma de Buenos Aires, acompañó al comediante y explicó la trastienda de la candidatura : «hace varias semanas le dije [a Del Sel], por qué no te animas a ser candidato a gobernador de Santa Fe, después de la sorpresa inicial dijo que lo iba a pensar seriamente y hablar con la familia y hoy nos esta acompañando acá para anunciarles que ha decidido ser el candidato».
El partido liderado por Mauricio Macri PRO (Propuesta Republicana) se vanagloria por su «vocación» de traer gente nueva al escenario político argentino en pos de una renovación de líderes, discurso muy popular en el país sudamericano desde el «que se vayan todos !» en el climax de la crisis del 2001. Sin embargo, tan loable argumento, ha permitido la presentación del actor Miguel Del Sel, quién desde su total inexperiencia en la cosa pública, al no haber militando jamás en un partido político, pasó luego de 10 minutos de conferencia de prensa a transformarse en candidato para administrar la segunda provincia más grande de la Argentina, que con más de tres millones de habitantes iguala a la población de la República Oriental del Uruguay.
El anuncio
Ya en la misma conferencia, luego de las palabras de su ahora padrino politico Mauricio Macri, Del Sel estrenó su rol de candidato con una apertura de discurso haciendo gala de su estilo políticamente incorrecto y su caracter de «outsider», como si fuera un politico half-time : «Ante todo buenas noches, espero que no se haga tan largo esto [la conferencia] porque tengo un show esta noche en Mar Del Plata… [risas]».
Tras contar que «siempre hablaba de política con Mauricio Macri» y elogiar a su mentor, la conferencia llega al momento cumbre cuando Del Sel explica el origen de su «conocimiento» sobre la realidad del país y su provincia. Así, en un esfuerzo poco convincente y en vano intento por «compensar» su falta de experiencia en la arena política, el comediante realiza un impensado paralelismo entre las giras artísticas con su grupo humorístico MIDACHI (de reconocida y larga trayectoria) por el interior del país y las recorridas que realiza una figura política. Como si entre el camarín de un teatro y un ocasional encuentro con un grupo de fans pudiera encontrarse con la realidad social de un pueblo al mismo nivel que un político visitando obras o zonas necesitadas, dialogando con autoridades, líderes sindicales y organizaciones de todo tipo discutiendo en pos de una busqueda de soluciones concretas que ayuden al progreso de la sociedad. «Todo el mundo esta reclamando un cambio, lo noto porque con MIDACHI hemos hecho giras por toda la Argentina y el reclamo de la gente es siempre el mismo, la gente quiere estar tranquila, los chicos tienen que estudiar y los padres tienen que trabajar […] la gente no reclama más que lo esencial para vivir felices, nada más…» explicó el actor.
Asi las cosas, en una conferencia con pocas ideas políticas y mucho de monólogo teatral, llegaron los detalles de la propuesta para administrar la segunda provincia mas importante del país: «…y por eso el ofrecimiento que me hizo Mauricio el 25 a la noche [Navidad] mientras yo comía un bife hecho por su señora, que estaba bastante frío porque yo llegué tarde [risas]». Entre sonrisas y humaradas el comediante devenido súbitamente en candidato politico cerró la conferencia de prensa : «puedo ser muy loco en el escenario, porque me pagan para ser payaso, yo soy muy feliz haciendo reír a la gente, y hoy, desde otro escenciario les voy a alegrar la vida, un beso para todos [aplausos]».
La carrera mediatica
Luego de la presentacion oficial, que sorprendió al país a menos de cuatro meses de las elecciones provinciales, Del Sel comenzó la maratónica recorrida por el interior de Santa Fe y, por supuesto, por lo medios de comunicación, en su gran mayoría afines a cualquiera que se oponga al gobierno de la presidenta Cristina Kirchner. Con el canal 13 (primero en raiting entre los canales de aire) y Todo Noticias (primero en raiting entre los canales informativos), su dueño, el grupo Clarín (que posee además el diario del mismo nombre,el primero en ventas de la Argentina) ofreció una plataforma inmejorable para la proyección del candidato de Mauricio Macri, representante de la derecha económica de la Argentina, y niño mimado del grupo mediático en «guerra abierta» contra el gobierno nacional, de corte socialista.
Como si el escenario ofrecido por el grupo Clarín (dueño de más de 260 medios en el país) al candidato de la derecha liberal no fuera suficiente, y aprovechando las nuevas tecnologías, Del Sel hizo uso de una nueva herramienta de proselitismo médiatico: Internet. Asi, no tardó en aparecer el perfil migueldelsel2011 en la conocida plataforma de video YouTube, promocionada hasta el cansancio en sus aparicionens televisivas. En el repertorio ofrecido (cuyo material mas antiguo data de tres meses atrás) se puede observar una serie de videos donde el comediante recorre la provincia entregando camisetas y saludando gente en un ambiente informal y espontáneo al punto de permitirse decirle a un trabajador «votáme boludo!».
Interesante es el video en el cual la nueva figura política responde a la pregunta «Cuándo empezo tu vocación política?». La respuesta: «vocación política… capaz la tuve desde hace mucho tiempo, quizás no milité en ningun partido político, pero he militado desde mi trabajo, recuerdo haber ido a hospitales disfrazado de payaso para alegrar la tarde a los chicos que estaban internados y he jugado cientos de partidos [de fútbol] a beneficio». De esta manera, con el apoyo de los principales medios de comunicacion el candidato liberal llegó a la casa de los santafesinos día y noche, en cada almuerzo o cena frente al televisor.
La proteccion de los medios
Innumerables fueron las torpezas mediáticas del actor devenido en político. Torpezas que no tuvieron el rebote periodístico que tienen aquellas cometidas por los politicos kirchneristas. Sólo un par de días después de la presentación de su candidatura, en el programa «Con voz propia» el periodista Gustavo Silvestre, pidió a Del Sel una opinión sobre la gestion del actual gobernador de Santa Fé, Hermes Binner. Al reconocer que no conocia los detalles de su gobierno Del Sel argumentó «… de la gestión de Binner no puedo opinar porque sería un caradura si lo hago» y agregó «creo que le faltó estar más en contacto con la gente y hacer soñar más al santafesino».
En una entrevista en el canal opositor TN (Todo Noticias), el 14 de julio, se realizó una suerte de debate entre los tres candidatos: el liberal Miguel Del Sel, el socialista Antonio Bonfatti (candidato del actual gobernador) y el kirchnerista Agustín Rossi. Dato no menor, el comediante fue invitado al estudio, mientras que Bonfatti y Rossi se sumaron al programa vía móvil de exteriores. Cabe mencionar también que el kirchnerista Rossi no pudo participar en más de la mitad de la discusión ya que inesperadamente el micrófono dejó de funcionar por casi veinte minutos.
El punto cúlmine del debate, llegó cuando Del Sel decidió tirar artillería pesada contra el gobierno nacional en su afán por perjudicar la imagen del candidato kirchnerista. Así las cosas, el actor acusó al gobierno federal de eliminar a la provincia de Santa Fe del proyecto «Acueducto del Norte» a causa de peleas partidarias entre la provincia y la nación. El candidato kirchnerista replicó inmediatamente y remarcó que la obra sí incluye a Santa Fe y que está en plena realización, acusó a Del Sel de «mentir» o «estar mal informado» y exigió una retractación inmediata del actor. El mismo respondió : «bueno… esta es la información que yo tengo, quizás ya lo han solucionado… no sé cuando…» y arremetió con una frase poco aconsejable para alguien que se candidatea a administrar el futuro de una provincia : «…no tengo por qué saber [esas] cosas porque son ustedes los que estan gobernando».
Este y otros «resbalones mediáticos» fueron sistemáticamente ignorados o minimizados por el establishement periodístico argentino, con la excepción del canal público y algunos canales afines al gobierno nacional, la mayoría de ellos sin demasiada presencia en la pelea por el raiting.
El cierre de campaña, como lo hicieran la mayoría de los candidatos desde hace muchos años, se realizó en el programa de la diva número uno de la television argentina, Susana Gimenez. La estrella mediática, que recibiera en innumerables ocasiones al entonces presidente liberal y proamericano Carlos Menem y a su Ministro de economia Domingo Cavallo, y a cuanto candidato pase por la realidad nacional, reconoció recientemente que no invitaría jamás a la actual presidenta Cristina Kirchner. «No podría, tendría que preguntar cosas muy duras» argumentó en conocido programa radial. Sin embargo, Miguel del Sel, fue recibido con los brazos abiertos en una extensa, y nada dura, entrevista horas antes del comienzo de la veda electoral.
El latigillo de campaña, una vez más, la falta de experiencia política como un valor de honestidad y prestigio, como si la corrupción y la mentira estuvieran limitadas a los «políticos de carrera» y no tocara el resto de la sociedad en la que vivimos. «La gente está tan harta de los políticos que festeja cuando viene un tipo de afuera, puro, bueno, y serio como vos», arremetió la diva.
Dos días después, el «político de carrera» Antonio Bonfatti se consagraba gobernador de la provincia de Santa Fe con el 38,7% de los votos. Sin embargo, el actor y comediante se quedaba con un increíblemente cercano segundo puesto, con el 35,1% del electorado provincial y plantándose como la fuerza opositora mas importante de la provincia. Por su parte, el kirchnerista Rossi queda relegado a un tercer puesto con un magro 22,2% de la voces a favor.
Conclusion
Que las cosas sean claras. Miguel del Sel, como cualquier persona, tiene el derecho a participar en la arena política si su vocación se lo demanda. Como comediante de casi treinta años de carrera ha demostrado ser una persona honesta y trabajadora, y ha sabido ganarse el corazón de la gente no sólo en la Argentina sino en países de la región donde supo llegar con sus giras artísticas y sus programas de televisión que hasta lograron pisar suelo americano en un canal de Miami. No hay aquí la intencion de poner en duda ni la vocación social, ni la honestidad o las buenas intenciones de esta nueva figura política nacional, el tiempo juzgara esos aspectos.
La pregunta no es entonces si un outsider de la politica puede participar en ella. Numerosos son los casos de reconocidas figuras, argentinas e internacionales, que han llegado a la gestión de lo público desde carreras empresariales, deportivas o artísticas, muchos de ellos con rotundo éxito. Tal es el caso del actual gobernador de la provincia de Buenos Aires, Daniel Scioli, quien fuera un exitoso corredor de lanchas.
Sin embargo, ¿no seria mas lógico, y hasta recomendable, adquirir experiencia en el escenario político antes de ir por una responsabilidad tan grande como lo es el Poder ejecutivo? El mismo Scioli comenzó su carrera como diputado, otros lo han hecho como senadores, o a la cabeza de alguna Secretaría de gobierno, para luego ir de lleno por la administracion de una provincia.
Pasar de un show en Mar del Plata (como bien cuenta Del Sel en la conferencia de prensa) a la gobernación de una provincia suena tan lógico como pretender ser campeón olímpico cuando ni siquiera se ha competido en una maratón de barrio, o ser escritor sin haber jamás leído un libro. ¿Daría usted la potestad de administrar sus bienes o de educar a sus hijos a un hombre simplemente porque lo hizo reir? ¿No le exigiría usted, además de ser una buena persona, tener experiencia y capacidad demostrada en la tareas que deberá ejecutar?
Aparentemente la experiencia y la capacidad no parecen ser requisitos imprescindibles para una buena parte de la población, a juzgar por el rotundo éxito del Miguel Del Sel en las elecciones que lo catapultaron como principal fuerza de oposición en la segunda provincia más importante de la Argentina… a cuatro meses de «ese» show en Mar del Plata.
Así las cosas, la pregunta que surge inhexorablemente es cómo una figura mediática sin experiencia en participación política y sin preparación para la gestión y administración de lo público puede aparecer en el transcurso de cuatro meses en los medios de comunicación, catapultarse como figura política y quedarse a sólo un par de puntos del sillón de la gobernacion sobre el cual se decide el futuro de más de tres millones de seres humanos. ¿Hasta dónde puede llegar la frivolidad de la política y el poder de los medios de comunicación masiva para crear candidatos de la nada? ¿Hasta cuándo el asesor de imagen será más importante que el cuerpo técnico de un candidato?
Por su parte, en el bunker del Pro, y en medio de los festejos por tan digna elección, Miguel Del Sel aseguró que será nuevamente candidato en 2015, y declaró «voy a seguir con la política, pero me voy a ganar la plata con mi trabajo [la actuación], los voy a apoyar a los muchachos hasta que Macri sea presidente, pero me parece que corresponde que yo siga con lo mío». Ya no quedan dudas: un político half-time.
Pocas veces en la historia el show business y la política se fusionaron de manera tan evidente. Pocas veces la frivolidad de los medios de comunicación infectaron la vida pública en un ámbito tan fundamental como lo es la administración y la gestión de los intereses y el futuro de toda una sociedad. Alguna vez alguien dijo que el marketing es el arte de venderle a uno lo que no necesita. Cuando la política se fusiona con el marketing nada bueno puede salir de ello. Como dijera el intelectual norteamericano Noam Chomsky, «La propaganda es a la democracia, lo que la violencia es a la dictadura».
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