El Gobierno Nacional emitió tres letras del Tesoro por 3.481 millones de pesos. Los préstamos fueron realizados por CAMMESA y la ANSES para cubrir gastos en materia energética y pagos de deuda pública. Las emisiones fueron autorizadas por la Ley de Presupuesto 2012. Este viernes 31 de mayo de 2013 se publicó en Boletín Oficial […]
El Gobierno Nacional emitió tres letras del Tesoro por 3.481 millones de pesos. Los préstamos fueron realizados por CAMMESA y la ANSES para cubrir gastos en materia energética y pagos de deuda pública. Las emisiones fueron autorizadas por la Ley de Presupuesto 2012.
Este viernes 31 de mayo de 2013 se publicó en Boletín Oficial (1) la emisión de tres letras del Tesoro por 700 millones de dólares. Los títulos serán colocados en la Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico Sociedad Anónima (CAMMESA) y el Fondo de Garantía de Sustentabilidad del Sistema Integrado Previsional Argentino (ANSES). El dinero prestado será destinado a cancelar anticipo a proveedores por obligaciones relativas a la Ampliación de Gasoductos Troncales y cancelación de vencimientos de deuda pública.
CAMMESA le prestará al Tesoro Nacional 545 millones de dólares. Recibirá del Estado dos letras intransferibles sin cotización en los mercados por valor de 1.800 millones de pesos y 598 millones, con fecha de emisión 17 de diciembre de 2012 y vencimiento al 15 de enero de 2014. Devengará una tasa de interés de 13,81 % y 15 % anual, con pagos a efectuar mensualmente. El capital se amortizará en cuotas durante el 2013 y 2014. La transferencia de activos la efectuará el Banco Central (BCRA) de sus reservas. La deuda contraída tiene por objeto cancelar el anticipo a proveedores.
Por su parte, el Fondo de Garantía de Sustentabilidad de la ANSES suscribió una letra del Tesoro por valor de 1.083 millones de pesos (205 millones de dólares) con fecha de emisión de 22 de octubre de 2012 y vencimiento a un año. La tasa de interés anual aplicada será la Badlar más doscientos puntos básicos (17%) pagaderos trimestralmente. El capital se amortizará a su vencimiento y la letra del Tesoro será transferible y tendrá cotización en los mercados de valores. El dinero obtenido de la ANSES será destinado a la cancelación de servicios de deuda pública según lo especifica la Ley 26.728.
Las emisiones de deuda fueron autorizadas por la Ley de Presupuesto 26.728 del año 2012. La deuda asumida por la ANSES fue autorizada por el Art. 42 de dicho cuerpo normativo, dentro del permiso conseguido por el Gobierno Nacional para endeudar a la Administración Central por más de 138.000 millones de pesos. El Art. 46 autorizó al Poder Ejecutivo, a través del Ministerio de Planificación, a realizar operaciones de crédito adicionales (al Art. 42) por 9.178 millones de dólares. De allí proviene la habilitación de estas emisiones colocadas en CAMMESA.
Leyes de Presupuesto y «operaciones de crédito adicionales»
Todos los años el Gobierno envía al Congreso Nacional el proyecto de Ley de Presupuesto de gastos del Estado. Allí se consignan las cifras de los futuros endeudamiento públicos y las erogaciones a realizar en el pago de servicios y amortización de la deuda. Las emisiones publicadas esta semana en Boletín Oficial corresponden a deuda autorizada en Ley de Presupuesto del año 2012. Recordemos que dicha norma autorizaba al Gobierno a endeudarse por más de 50.000 millones de dólares.
Estas leyes traen consigo pesadas cargas de endeudamiento público. Así, la ley 26.784, correspondiente al Presupuesto de gastos del ejercicio 2013, estableció un endeudamiento de 48.000 millones de dólares. Pagos de 36.000 millones de dólares en concepto de amortización de capital y 10.844 millones en cancelación de intereses. Los pagos de deuda representan alrededor del 30 % de los presupuestos de gastos si se suman las aplicaciones financieras. La deuda sigue condicionando nuestro bienestar social. Se lleva cinco veces más que las partidas destinadas a educación y nueves veces lo destinado a salud (2).
En las leyes de presupuesto no sólo se habilita el endeudamiento público de Estado Nacional, además aparece una autorización para la emisión de «operaciones de crédito adicionales». El endeudamiento puede dispararse peligrosamente. Para el año 2012, el Ministerio de Planificación Federal fue autorizado a emitir «operaciones de crédito adicionales» por 9.178 millones de dólares. Es aquí donde aparecen las actuales emisiones colocadas en CAMMESA. Pero en la Ley de Presupuesto 26.784 (ejercicio 2013) se autoriza al Gobierno a realizar «operaciones de créditos adicionales» por 34.341 millones de dólares. También habilita al Ejecutivo Nacional a otorgar avales, fianzas o garantías a determinadas sociedades comerciales por 33.585 millones de dólares (3).
Cabe reiterar lo manifestado en anteriores notas, el endeudamiento público sigue creciendo año tras año en igual medida que los pagos de deuda. Así lo manifiesta expresamente el Gobierno en la confección de las leyes de Presupuesto presentada al Congreso cada 22 de septiembre. Un endeudamiento del orden de los 50.000 millones de dólares anuales, y pagos en similares cifras, conllevan un combo de deuda de difícil escapatoria al bolsillo y bienestar del pueblo trabajador. Pero las cifras de endeudamiento pueden exorbitarse si el Gobierno realiza las «operaciones de créditos adicionales» por las que fue autorizado. Y parece dispuesto a ejecutarlas.
Deuda interna y pagos a acreedores
América Latina está viviendo en el último tiempo un nuevo proceso de endeudamiento. Toma preeminencia la colocación de títulos del Estado Nacional en organismos públicos, sustituyendo acreedores externos y privados por internos y públicos. Esto no es inventiva puramente nacional. América viene transcurriendo por los mismos senderos. Ello representa un peligro político de licuar responsabilidades jurídicas de bancos y empresas privadas nacionales y extranjeras. Fueron cancelando créditos de acreedores privados con dinero de organismos públicos. Sendas transferencias de capital del sector estatal al privado, y licuación de responsabilidades por ilícitos cometidos en la conformación de sus fraudulentas acreencias.
Así llegamos a una situación de extremada debilidad financiera, al endeudar fuertemente a organismos públicos para obtener fondos destinos a saldar compromisos financieros con acreedores privados. La letra que colocará el Tesoro Nacional en el Fondo de Garantía de Sustentabilidad (FGS) de la ANSES por 205 millones dólares tiene por objeto obtener dinero del sistema previsional para cancelar servicios de deuda pública. Expresamente lo consigna la ley y las resoluciones conjuntas de la Secretaría de Hacienda y Finanzas Públicas.
Hoy el 60 % del Fondo de Garantía (4) está prestado al Estado para sostener los pagos de deuda (120.000 millones de pesos). La AFIP, el Fondo de Reconstrucción Empresaria, Lotería Nacional y Casinos, el PAMI, el Banco Nación (5) son los nuevos acreedores del Tesoro Nacional. Más de la mitad de la deuda del Estado Central es deuda intra-sector público, sin capacidad demostrada de pago. Muchas dependencias tienen en su poder títulos que pagan intereses menores que la inflación y atados al Coeficiente de Estabilidad Referencial (CER).
La política nacional del «desendeudamiento» trae consigo fuertes endeudamientos públicos. Terminados los negocios de las administradoras privadas de pensión (AFJP), el dinero de los trabajadores sigue (como destino manifiesto) engordando a los buitres financieros que ofician como acreedores de la nación. Antes las AFJP tomaban el dinero del ahorro en vida de los trabajadores para lucrar en el mercado financiero con abultadas burbujas de ganancias extraordinarias de empresa y bancos. Hoy el dinero de los trabajadores fluye a los mismos acreedores con la intermediación del Estado Nacional.
El Gobierno sigue la senda del endeudamiento perpetuo. Como contrapartida se licuan las responsabilidades históricas de los enemigos de los pueblos. La política del (des) endeudamiento trae consigo una peligrosa e infame política de impunidad de empresarios, banqueros, funcionarios y militares en la conformación de nuestra ilegítima e ilícita deuda pública. Oficialismo y oposición integran juntos el maldito partido de la deuda. La idea de auditar el crédito público y el proceso de endeudamiento de los últimos 30 años, ha quedado en el olvido de una dirigencia política rastrera y prebendaría, contenta con desempeñar su papel histórico de furgón de cola del capitalismo mundial.
Notas:
(1) Boletín Oficial, 31/5/2013. Resoluciones Conjuntas 292/2012 y 76/2012, y 371/2012 begin_of_the_skype_
(2) Según la 26.784 (Presupuesto de Gastos 2013), las partidas destinadas al área de Salud son de 24.983 millones de pesos, y 47.780 millones correspondientes a Educación. El pago de deuda pública es de 176.366 millones en concepto de amortización de capital, y 44.808 millones la cancelación de intereses.
(3) La ley de presupuesto 2013 autoriza al Poder Ejecutivo en su Art. 43 a otorgar avales, fianzas o garantías, «a efectos de garantizar las obligaciones destinadas al financiamiento de infraestructura y/o equipamiento» para ENARSA, Nucleoeléctrica Argentina SA, Banco Nación, ACUMAR, CAMMESA, Administración de infraestructura ferroviaria SE, YCRT, Dirección General de Fabricaciones Militares, ARSAT y AYSA. Es altamente preocupante la emisión de deuda autorizada al Gobierno Nacional por $ 247.722 millones de endeudamiento ordinario, más los $ 175.139 millones (U$S 34.341 millones) de «operaciones de crédito adicionales», y los $ 171.283 millones ( U$S 33.585) para avales del Estado. Un total de endeudamiento directo e indirecto que supera los 120.000 millones de dólares para el 2013.
(4) Al 30.9.2012 el fondo totalizaba 227.200 millones de pesos.
(5) El Banco Nación tiene el 40 % de sus activos en títulos públicos.
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