Luego de declinar su participación en la cumbre del Mercado común del Sur (Mercosur) en Paraguay, el presidente argentino Javier Milei participará de la ultraderechista Conferencia Política de Acción Conservadora (CPAC) que se realizará en el balneario de Camboriú. Milei finalmente decidió no dar la cara, no asistir al encuentro, boicotear los intentos de integración. Uno de los motivos de su ausencia, según argumentó, fue el cruce que tuvo con Lula, a quien llamó corrupto y comunista.
Lo cierto es que el Mercosur “no despierta interés” para el libertario, no solo por la falta de aliados en la región sino también por las temáticas que el bloque suele abordar, como la integración regional. Milei porefiere “integrarse” a la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), como si Buenos Aires fuera la capital de Europa.
El vínculo entre el mandatario argentino Javier Milei y el presidente brasileño Luis Ignacio Lula da Silva, está roto, en medio de una crisis diplomática latente y un pedido de disculpas a Milei por haber dicho “muchas tonterías”.
«¿Qué le dije? ¿Corrupto? ¿Acaso no fue preso por corrupto? ¿Y qué le dije? ¿Comunista? ¿Acaso no es comunista? ¿Desde cuándo hay que pedir perdón por decir la verdad? ¿O estamos tan enfermos de corrección política que a la izquierda no se le puede decir nada, aún cuando sea verdad?», dijo Milei a La Nación.
Ante la inminencia de la Cumbre del Mercosur, que se llevará a cabo el próximo 8 de julio en Asunción, Milei finalmente decidió no dar la cara, no asistir al encuentro. Este es un nuevo golpe de Milei a las posibilidades de reencauzar la integración regional en la próxima reunión del Mercosur.
El dólar
Los dólares paralelos volvieron a subir, el riesgo país se mantiene por encima de los 1500 y la brecha cambiaria supera el 55%, el máximo en la era Milei. Los bancos, las empresas, las patronales agrarias están inquietos por el rumbo económico en lo que algunos analistas vaticinan como el fin de la luna de miel de Milei y los “mercados”.
Mientras el FMI exige una devaluación, más reformas estructurales, Luis Caputo, ministro de Economía, afirmó que no va a devaluar. Caputo no aceleró el aumento del dólar oficial (crawling peg) y es menor a la suba de la inflación. Esto provoca, en la consideración de los grandes capitalistas exportadores, un atraso cambiario y por eso presionan por una devaluación.
Además no hay dólares frescos del Fondo Monetario Internacional (FMI), a pesar de las promesas del ministro de Economía, Luis Caputo, al presidente de conseguir 15.000 millones de dólares para salir del cepo cambiario. El Fondo presiona otro rumbo económico, que incluya medidas como terminar con el dólar blend (un beneficio para el sector agroexportador que liquida un 80% de las exportaciones al tipo de cambio oficial y el restante 20% en el “contado con liquidación”), devaluación, reformas estructurales, tasas de interés reales positivas.
Sin embargo, el Gobierno libertario no quiere devaluar para evitar que se acelere la inflación, ni tampoco quiere terminar con el beneficio a las patronales agrarias
«La parálisis de la obra pública produce un daño fiscal enorme. Existen 3.500 obras públicas nacionales paralizadas, muchas no han recibido ningún pago de noviembre pasado y no tienen perspectiva de solución ni eventual reinicio», dijo Gustavo Weiss, presidente de la Cámara Argentina de la Construcción. El secretario de Obras Públicas Luis Giovine admitió que recibió del Gobierno anterior una cartera de 6.600 obras… y reconoció que el 40% estaban finalizadas, pero decidieron paralizarlas igual.
El papelón en la OEA
La 54ª Asamblea General de la Organización de Estados Americanos, en Asunción, Paraguay, terminó el viernes, con sorpresas y controversias alrededor de la delegación oficial argentina que propuso cambios retrógrados en las resoluciones sobre derechos humanos, con especial énfasis en barrer las referencias a derechos sexuales y reproductivos, ambientales y los relacionados con la diversidad, objetando. términos como «población LGBTI», «género», “tolerancia” y “cambio climático”.
La propuesta argentina solo fue apoyada por Paraguay y recibió críticas de Estados Unidos, Canadá y México –entre otros- y este papelón dejó en claro el giro ultraconservador en materia de política exterior y también la lucha interna entre los funcionarios mileinistas de la cancillería
La abogada antiderechos Úrsula Basset, conocida por defender una mirada retrógrada contra la educación sexual integral (ESI) en las escuelas, contra la Ley de IVE y el matrimonio igualitario, sostiene posiciones contrarias a la Agenda 2030 de la ONU, y en Asunción explicó “las posturas argentinas” ante la comunidad internacional.
El embajador de Estados Unidos ante la OEA, Frank Mora, dijo que si bien su país respetaba la postura argentina, esperaba que la aprobación de los documentos no se volviera un «show».
Pero durante jueves y viernes, la mayoría de los países se quejó por el ritmo que adquirían las negociaciones debido a que la comitiva argentina obstaculizaba objetando contantemente conceptos que desde hace mucho tiempo son consensos básicos y discusiones cerradas. Incluso casi todos esos Estados, Argentina incluida, han ratificado adhiriendo a convenciones y tratados internacionales.
Entrega al Reino Unido
Reino Unido anunció que planea saquear 500 millones de barriles de petróleo de las Islas Malvinas, territorio argentino en el Atlántico Sur, ocupado por tropas británicas. El lugar elegido para la exploración petrolífera es el estuario de la Isla de los Leones Marinos, ubicada 240 kilómetros al sur de la Isla Soledad.
La empresa israelí Navitas Petroleum es quien tiene en su poder la mayoría de los derechos de explotación sobre ese territorio. De concretarse la operación, la mayor parte de las ganancias irían a los accionistas en Israel y Estados Unidos, precisó medio británico The Telegraph.
Reino Unido calcula que en la Isla de los Leones Marinos hay un total de 1.700 millones de barriles de petróleo. Se trata de un yacimiento varias veces más grande que Rosebank, el mayor desarrollo planificado para el Mar del Norte de Reino Unido, que se estima que contiene 300 millones de barriles.
El sitio estadounidense de análisis político, económico y militar The National Interest señala que «El presidente Javier Milei ha virado la política exterior Argentina en una dirección pro americana, pro OTAN».
Para el Gobierno de Joe Biden la postura argentina en la OEA es funcional a sus principales intereses en la región ya que opera como un ariete de peso frente a los gobiernos de izquierda, en especial de Venezuela y de Nicaragua. Detrás de la misiones argetinas, están los vínculos ideológicos y programáticos construidos por una ultraderecha cada vez más articulada a nivel.
Por eso el Gobierno de Javier Milei utiliza a la OEA principalmente como campo de práctica ante a la posibilidad de que Donald Trump retorne a la Casa Blanca con un programa mucho más radicalizado y regresivo que el de su anterior mandato.
Cristina
El comienzo del juicio por el intento de asesinato a la expresidenta Cristina Kirchner y la aprobación de la ley Bases impuesta por el Gobierno del libertario Javier Milei dieron forma la última semana a un diagnóstico aproximado sobre la crisis remanente o quizá sobre la forma como Argentina resuelve los conflictos y toma un rumbo.
Cabe recordar que la hoy ministra de Seguridad Patricia Bullrich se negó a repudiar el intento de asesinato de la dos veces presidenta y entonces vicepresidenta Cristina Kirchner. Quienes festejaron, callaron, minimizaron, fueron cómplices del discurso de odio que habían instalado en la sociedad y que culminó con ese atentado.
“Sé que hubiera provocado una guerra civil”, dijo el criminal Fernando Sabag Montiel en el banquillo de los acusados. La prensa hegemónica insiste en la tesis del “lobo solitario.
Los investigadores borraron los celulares de los atacantes y de todas las personas involucradas, no se investigaron los vínculos políticos de los acusados, militantes de agrupaciones macristas caracterizados por sus acciones violentas, ni sus fuentes de financiamiento: se sabía que uno de sus principales dirigentes recibía mucho dinero de empresas de la familia Caputo, del actual ministro de Economía, señala Página12.
Los periodistas que acusaron sin pruebas en medios que amplificaron mentiras y los jueces que condenaron sin fundamentos, fueron cómplices de a ignominia. Cristina Kirchner era el obstáculo, una referente popular que molestaba a estos intereses que buscaron sacarla de circulación con esa campaña.
El discurso de odio se enfocó con mucha claridad en la obra pública y en las políticas sociales como formas de corrupción que servían –supuestamente- para enriquecer a Cristina Kirchner. No lograron comprobar nada, investigaron y amplificaron mucho más estas falsas denuncias que su intento de asesinato, en su afán de imponer una matriz de opinión contra la dirigente política de más arraigo en la población.
En la misma semana que comenzó el juicio por el intento de asesinato de Cristina Kirchner –casi ignorado por los medios que responden al Gobierno libertario- se aprobó la Ley Bases. Una semana que explica a la Argentina de hoy, señala Luis Bruschtein.
*Economista y docente argentino, investigador asociado al Centro Latinoamericano de Análisis Estratégico (CLAE, www.estrategia.la)
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