El acuerdo previo establece el pago del total en seis años, sin quitas en el capital. Se trata de un préstamo que otorgó Madrid a Argentina en medio de la crisis de 2001. Resta acordar con el Club de París. Sólo falta oficializarlo, pero Argentina llegó a un acuerdo con el gobierno de España para […]
El acuerdo previo establece el pago del total en seis años, sin quitas en el capital. Se trata de un préstamo que otorgó Madrid a Argentina en medio de la crisis de 2001. Resta acordar con el Club de París.
Los 960 millones de dólares surgen de un préstamo por 836 millones de la misma moneda más los intereses caídos desde la moratoria unilateral de la deuda que Argentina decretó e fines de 2001. Ese dinero proveniente de Madrid pasó a integrar el llamado «blindaje» financiero con el que el ministro de Economía de entonces, Domingo Cavallo, atrasó un año el estallido de la crisis más severa en la historia económica argentina.
El pago de estos compromisos debió superar el inconveniente de que los países desarrollados pretendían que esta negociación fuese multilateral y con el Club de París como contraparte, y no en forma bilateral, postura que fue la que se impuso. Como consecuencia, este salvataje va a concretarse independientemente de que se llegue a un acuerdo con el club parisino.
El Club de París es una organización integrada por los países desarrollados que han realizado préstamos a otras naciones, en épocas en las que los Estados y los bancos eran los máximos prestamistas. Hoy es más común que sean los particulares y los administradores de fondos los que prestan a los gobiernos.
Ese club reúne a Alemania como el principal acreedor argentino, seguido de Japón, Holanda, Suiza, España y Estados Unidos. La deuda con el Club de París asciende a 6.300 millones de dólares, impagos desde 2002. El Palacio de Hacienda en Buenos Aires también avanza en una propuesta con esa organización, donde trascendió que la propuesta a elevarse es saldar los compromisos en nueve años, con una tasa Libor más 1 por ciento, en diez años, y sin quitas en el capital.
En los próximos días se espera la llegada de técnicos ibéricos para repasar la letra fina. Estos son los pasos que la ministro de Economía argentina, Felisa Miceli, coordinó con su par español, Pedro Solbes Mira, en una conversación mantenida la semana pasada y dada a conocer esta semana. Las negociaciones comenzaron oficialmente el 4 de noviembre pasado durante la XVI Cumbre Iberoamericana de Montevideo, cuando el presidente Néstor Kirchner y el jefe del gobierno de España, José Luís Rodríguez Zapatero, acordaron avanzar en un pronto programa de cancelación.
En el 2001, el presidente de la Rúa pidió al Fondo Monetario Internacional un salvataje financiero con el objetivo de evitar la crisis, y fue el organismo multilateral de crédito que extendió el pedido a países integrantes del Club de París. España dispuso para la Argentina una línea de 1.000 millones de dólares, de los cuales llegaron a usarse 836 millones.
Según informase el diario argentino LA NACION, se supo que los dos pagos anuales iniciales serán del 5 por ciento del total (equivalentes a 48 millones de dólares) y que el primero se desembolsaría a los seis meses de la suscripción formal del convenio. Luego continuarán los pagos hasta saldar en forma definitiva este pasivo dentro de seis años.