La Asamblea Socio Ambiental del Noroeste Argentino (ASANOA – Tucumán) denunció que el Dakar es «una competencia neocolonial de carácter destructor». En un comunicado de prensa exhortan «a la población que no se deje engañar con estos espejitos de colores y reaccione ante esta actividad Ecocida y Genocida». Más de 550 máquinas y vehículos de […]
La Asamblea Socio Ambiental del Noroeste Argentino (ASANOA – Tucumán) denunció que el Dakar es «una competencia neocolonial de carácter destructor». En un comunicado de prensa exhortan «a la población que no se deje engañar con estos espejitos de colores y reaccione ante esta actividad Ecocida y Genocida».
Más de 550 máquinas y vehículos de apoyo ingresaran a campo traviesa en ecosistemas frágiles como la zona árida de los Valles Calchaquies y del río Santa Maria de Yocavil (entre Amaicha, Quilmes y Colalao del Valle en Tucumán). «Pedimos a la población que no se deje engañar con estos espejitos de colores y reaccione ante esta actividad Ecocida y Genocida».
En África sus habitantes se encargaron de hostilizar a los conductores luego de que por años sean atacados por estas máquinas produciendo más de 50 muertes entre los habitantes y destrucción a su medio ambiente.
Estos «deportistas», que en realidad son funcionarios rentados de marketing de empresas automotrices, que acuden con su troupe circense, a demostrar las disparatadas cualidades que los consumidores de los países ricos reclaman a estas fábricas, para seguir sosteniendo su escalada de consumo insustentable en la que están embarcados desde siempre.
En plena crisis planetaria por el cambio climático producido sobre todo por el consumo de combustibles fósiles (petróleo), estos vehículos de potencias absurdas completamente inservibles para cualquier actividad humana racional, pero si capaces de proezas inútiles, como gastar enorme cantidad de combustibles fósiles por KM, con el mismo grosero desenfreno consumista que los países ricos aplican a otras actividades.
Cada vez que termina este evento, además del derroche de combustibles fósiles, nos dejan montañas de cubiertas destruidas y hectolitros de aceites usados, para que nosotros, los nativos, ahora subdesarrollados sudamericanos, nos encarguemos de sus desechos, que por supuesto tienen como destino contaminarnos. Además de caminos vecinales, que a pesar de las promesas jamás restauran y luego deben ser reparados a nuestro costo y transitados por los sufridos vecinos que se tienen que hacer cargo de la resaca una vez terminada la fiesta.
En algunos lugares de nuestro país les niegan permiso para que circulen, pero gobernadores de algunas provincias, como la nuestra, haciendo gala de un subdesarrollado cholulismo lo autorizan, poniendo en evidencia una vez más el absoluto desinterés que tienen en preservar nuestra naturaleza.
Más de 550 máquinas y vehículos de apoyo ingresaran a campo traviesa en ecosistemas frágiles como la zona árida de los Valles Calchaquies y del río Santa Maria de Yocavil (entre Amaicha, Quilmes y Colalao del Valle en Tucumán).
Autoridades nacionales y provinciales nunca consultan realmente a las poblaciones de base sobre las necesidades reales e imponen esta actividad destructora y consumista de Naturaleza (humana y no humana).
Este tipo de actividad es la que promueve la Guerra en paises del «tercer mundo» para que los países centrales accedan al petróleo y es el mejor ejemplo que justifica la existencia de la megaminería en nuestro país (Minera Alumbrera – Veladero – Pascua Lama entre otras).
Pedimos a la población que no se deje engañar con estos espejitos de colores y reaccione ante esta actividad Ecocida y Genocida. Firma: Asamblea Socio Ambiental del Noroeste Argentino (ASANOA – Tucumán).
Fuente original: http://www.infoalternativa.com.ar/index.php?option=com_content&view=article&id=3376:ambientalistas-de-tucuman-cuestionan-el-dakar&catid=42:deportes&Itemid=61