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El Frente para la Victoria busca recuperarse en las generales, mientras el universo opositor intenta ganar terreno

Certezas, tendencias e indefiniciones

Fuentes: Revista Debate

El 11 de agosto pasado, la Argentina tuvo las primeras elecciones Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias legislativas de su historia. Si bien la experiencia de las PASO de 2011 había dado algunas señales de las peculiaridades de estas elecciones, las PASO de agosto desde la óptica del análisis electoral han mostrado comportamientos a nivel nacional […]

El 11 de agosto pasado, la Argentina tuvo las primeras elecciones Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias legislativas de su historia. Si bien la experiencia de las PASO de 2011 había dado algunas señales de las peculiaridades de estas elecciones, las PASO de agosto desde la óptica del análisis electoral han mostrado comportamientos a nivel nacional y otros a nivel distrital interesantes de tener en cuenta.

El perfeccionamiento de las PASO va a ir construyéndose cuando las fuerzas políticas elijan a quienes van a representarlas en las elecciones entre los distintos candidatos a los mismos cargos por medio de las internas abiertas obligatorias. Ha vuelto a predominar una elección consensuada entre los principales actores de los partidos políticos, en forma previa a las PASO, de una sola lista de candidatos a legisladores. Esta definición previa le deja al electorado dos opciones: anticipar en las PASO con su voto la elección del partido político que más simpatiza o participar en la elección de alguna lista de las fuerzas políticas que presentaron distintas opciones si considerara que es de interés la definición del candidato de una fuerza política que quizá no es la más afín a su simpatía política. A diferencia de otras elecciones internas, con características muy disímiles a las PASO, que acapararon el interés de gran parte de la población, como la interna del PJ Menem-Cafiero de 1988, sólo unas pocas internas de algunos distritos fueron vistas con interés en las elecciones del 11 de agosto: la interna de UNEN en Ciudad de Buenos Aires o la interna del MPN en Neuquén son algunas de las excepciones.

Antes de abordar las perspectivas de las elecciones de octubre, es importante destacar, en una de las posibilidades que le permite las PASO al electorado, el importante porcentaje que totalizó la sumatoria del voto de las múltiples boletas partidarias de distintos partidos políticos que se encontró el electorado en el cuarto oscuro. Seguramente estos porcentajes, en la mayor búsqueda del voto útil que predomina en una elección presidencial, no se hubieran producido.

Analizándolas como una gran encuesta nacional de conocimiento público, las PASO sientan la base de expectativas del resultado electoral de octubre. En el trabajo de análisis de las tendencias electorales, los consultores sobre dicha base debemos prever en cada uno de los distritos las modificaciones que pueden tener cada una de las listas partidarias. Si no se producen hechos sumamente relevantes nacionales o distritales desde la óptica de la opinión pública, difícilmente se produzcan oscilaciones que superen el rango de entre 5 y 7 puntos porcentuales del resultado obtenido por cada fuerza. Es más, probablemente la mayoría de las modificaciones electorales estarán por debajo de los cinco puntos porcentuales.

Las primeras investigaciones electorales realizadas pos PASO están indicando los siguientes resultados:

-Mantenimiento del resultado electoral de los candidatos del FPV en los distritos donde no fueron ganadores. Ésta es una de las características de los candidatos del kirchnerismo a lo largo de todo el país, un piso electoral sólido con serias dificultades de crecer sobre dicho piso. Adicionalmente, los candidatos del FPV que tienen un camino a recorrer en su nivel de conocimiento deberán delinear los ejes de campaña que le permitan mejorar su posicionamiento en la carrera a octubre generando una impronta propia y territorial.

-Algún crecimiento (menor al 5%) de los candidatos del FPV en los distritos donde ganaron las elecciones, beneficiados por el porcentaje de electores que votaron opciones políticas que por no llegar a los pisos electorales no van a estar presentes en las elecciones de octubre.

-Los candidatos opositores ganadores de las elecciones de las PASO o que tuvieron elecciones competitivas con posibilidad de ganarle al FPV en octubre están creciendo en detrimento de los candidatos opositores que quedaron lejos de la pelea electoral.

En vistas al comportamiento electoral descripto, con certeza el FPV va a volver a ser derrotado en todos los principales distritos electorales y probablemente repetirá en su mayoría las derrotas en los otros distritos donde perdió las PASO. Dos de cada tres argentinos no votarán los candidatos del Gobierno. La falta de acuerdo de alianzas políticas de los distintos candidatos opositores fuera de sus distritos de influencia no les permite conformar una fuerza política nacional que supere al caudal electoral del FPV.

El gobierno nacional va a fijar como objetivo lograr un crecimiento de tres a cinco puntos porcentuales que le permitiera llegar al rango del 33-35% a nivel nacional. Este resultado sería algo mejor que el resultado electoral legislativo 2009, permitiéndole tener una mejor representación legislativa. Este crecimiento a su vez afianzaría al FPV como la primera minoría a nivel nacional.

La actual sensación de derrota del gobierno nacional por parte de la opinión pública instalada a partir del resultado de las PASO, con influencia decisiva del termómetro electoral de lo que sucedió en la provincia de Buenos Aires, y con la altísima probabilidad de que en octubre nuevamente Massa derrote al FPV en la provincia de Buenos Aires, no se va a ver modificada.

Sobre estos ejes ya están redactadas las lecturas y análisis que van a realizar los distintos medios y actores políticos de acuerdo a su afinidad mayor o menor al Gobierno. Los medios afines al gobierno nacional van a destacar que en el marco de una elección legislativa no se modifica la composición de las Cámaras y el FPV sigue siendo la primera fuerza política a nivel nacional y los sectores opositores señalarán el porcentaje claramente mayoritario de la sumatoria de los votos de los candidatos opositores, incluyendo todos los grandes distritos electorales.

Federico Aurelio. Director de Consultora Julio Aurelio-ARESCO.

Fuente: http://www.revistadebate.com.ar/?p=4533