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Entrevista a Hernán “Vasco” Izurieta, representante de la Junta Interna del Ministerio de Trabajo

«Cuando venzan las contrataciones trimestrales, vamos a tener una dimensión verdadera del ataque del gobierno a los trabajadores estatales»

Fuentes: Rebelión

-M.H.: Por un lado quería saber cómo marcha la lucha contra los despidos en el ámbito del Ministerio de Trabajo, pero fundamentalmente a lo que considero una de las primeras expresiones unitarias que se han dado en el marco de esta lucha, la que han impulsado desde la Junta Interna de los trabajadores del Ministerio […]

-M.H.: Por un lado quería saber cómo marcha la lucha contra los despidos en el ámbito del Ministerio de Trabajo, pero fundamentalmente a lo que considero una de las primeras expresiones unitarias que se han dado en el marco de esta lucha, la que han impulsado desde la Junta Interna de los trabajadores del Ministerio de Trabajo.

-H.V.I.: En principio la situación con los despidos que tenemos en el Ministerio, que como todos sabemos se da en el marco de una gran cantidad de despidos en el ámbito de la Administración pública, ya sea en el Estado Nacional, en distintas provincias y muchos municipios; el Ministerio no está por fuera de esa situación general y en nuestro caso lo que ha sucedido es que las autoridades dieron de baja una modalidad de contratación que son las asistencias técnicas convenidas con una Universidad, en este caso de La Matanza. Una de las diversas formas de contratación precaria y flexible que tiene el Estado en tanto empleador.

Dentro de esa decisión resultaron afectados cerca de 30 compañeros trabajadores que podemos acreditar de su laburo cotidiano en distintos sectores, que están siendo dejados en la calle por esa decisión. Nosotros tenemos una pelea muy importante porque sabemos que éste es un primer intento de aplicar una política mucho más global que se inicia por la modalidad más débil desde el punto de vista de lo contractual y que si pasa después van a ir por otras modalidades, que también tienen el gravísimo problema de no garantizar la estabilidad en la contratación, situación heredada de las anteriores administraciones kirchneristas y eso es aprovechado por el macrismo para llevar adelante un durísimo golpe contra los trabajadores y trabajadoras del Estado en distintas dependencias.

-M.H.: Recuerdo que hace un par de años haciendo una nota me comentabas que casi la mitad de los empleados del Ministerio de Trabajo estaban en condiciones de precariedad laboral.

-H.V.I.: El 70%. Cuando nosotros empezamos la gestión, resultado de un proceso de organización de base que en junio de 2010 nos permitió ganar la Junta Interna de ATE en el Ministerio de Trabajo de la Nación, el punto de partida eran 70% de trabajadores precarizados sobre un total de más de 4.000; hoy rondan los 5.000 compañeros y compañeras en todo el país.

Nosotros hacemos una distinción y reconocemos la ampliación de funciones en el Estado en general, con un componente de trabajo en los sectores más vulnerables de nuestra sociedad, eso nos parece un aspecto valorable y reivindicable, lo que pasó es que se realizó sobre modalidades sumamente precarizadas en términos de empleo y hoy los resultados están a la vista, el macrismo simplemente ajusta apretando las variables más débiles de esas modalidades contractuales. Son contratos de asistencia técnica, compañeros que le facturan al programa de Naciones Unidas para el Desarrollo, otro tipo de contratación que se llama artículo 9, que es un contrato sin expectativas de continuidad, que ni siquiera tienen que anticiparte que te van a echar, simplemente lo dan por terminado.

Frente a lo que pasó en el Ministerio, fruto de nuestras denuncias, por haber insistido durante mucho tiempo por esa situación de precariedad, de exigirle al anterior ministro Tomada que el trabajo decente tenía que empezar por casa, el Ministerio de Trabajo dio una respuesta parcial a través de concursos y fue la jurisdicción de la Administración pública nacional que mayor cantidad de concursos llevó adelante, hicimos 3.000, no hay otro organismo del Estado que haya tenido ese volumen de concursos. Lo que pasa ahora es que como esa respuesta parcial llegó muy tarde, de esos 3.000 hay designaciones que están a mitad de camino administrativo y dentro de las cuestiones que ponen bajo revisión los decretos de Macri en relación a las contrataciones de la administración pública que instruye al Ministerio de Modernización. Con lo cual, si por algún motivo, como lo indica el decreto, el nuevo gobierno considera que no fue pertinente alguno de los cargos convocados o que hubo algún aspecto que no se cumplió, lo pueden hacer retroceder, lo que sería un desastre total, pero no permitiríamos una agresión de esas características.

Como verás, entre los contratos precarios y los concursos que no llegaron a plasmarse en designaciones, estamos en una situación sumamente crítica porque sabemos que esto a mediados de febrero-marzo, cuando empiecen a vencer las contrataciones trimestrales que en muchos lados se hicieron para salir del paso a fin de año, vamos a tener una dimensión verdadera del nivel del ataque que va a desplegar este gobierno contra los trabajadores del Estado.

Nosotros estamos enfrentando los despidos con mucha fuerza ahora porque sabemos que si nos quedamos de brazos cruzados hasta marzo, lo que viene después va a ser mucho peor.

A ATE le cabe la responsabilidad de organizar la resistencia con la mayor amplitud política 

-M.H.: Hablabas de la fuerza con la que se están enfrentando los despidos y creo que lo que se dio en el Ministerio de Trabajo, en el acto del pasado jueves 14 fue una de las expresiones más unitarias que se han dado a nivel nacional. Destacaba hace unos días, hablando con Carlos Ghioldi de La Toma de Rosario, la reunión de sindicatos pertenecientes a distintas centrales nacionales que hubo en esa ciudad. Estos dos hechos serían las primeras expresiones de lo que en alguna medida pudimos dialogar la semana pasada con Norberto Señor de ATE Sur, cuando nos decía: «si no hacemos la unidad por abajo, por el medio y por arriba no llevan puestos».

-H.V.I.: Ese concepto nosotros lo tomamos y lo hacemos propio. Para la medida que pudimos llevar adelante el jueves, que fue muy fuerte en su concurrencia, trabajamos con el objetivo político de lograr la unidad de acción de nuestro sindicato ATE, tanto a nivel nacional como ATE Capital y logramos una expresión unitaria. Nos parece que las discusiones políticas que tenemos al interior del sindicato, las diferencias de posicionamiento político-sindicales no pueden ser obstáculos para desplegar las acciones que requiere esta situación. Si no anteponemos la unidad ante la disputa de sectores estamos en problemas. Si la disputa interna del gremio le gana a la posibilidad de ofrecer un frente unificado para enfrentar los despidos, no estaríamos a la altura de nuestras responsabilidades. El camino a seguir es construir y traccionar desde las bases la unificación de ATE como primer paso para luego ir hacia el conjunto de los trabajadores y trabajadoras estatales, porque acá estamos viendo solamente una porción de laburantes que son los que representa ATE, pero hay una porción importante que en el caso del Estado nacional está organizada en UPCN, hay muchísimo malestar con esa conducción por las agachadas históricas de Andrés Rodríguez que es miembro de la Sociedad Rural Argentina, dicho sea de paso.

-M.H.: El papá del actual Ministro de Trabajo y dirigente del gremio plástico, fue socio del Jockey Club en los ’90.

-H.V.I.: Hay una extraña alcurnia oligárquico sindical. Frente a la no respuesta de UPCN, ya que lo único que dijo Andrés Rodríguez fue que iban a evaluar los despidos vía judicial, es un insulto a los compañeros, cualquiera sabe que si un gremio te está proponiendo eso frente a los despidos te está entregando de pies y manos porque un juicio dura de 6 a 7 años y si sale te pagan una indemnización y si perdés pagás los costos del juicio.

Es una burla que el máximo dirigente de un sindicato ofrezca como respuesta la incursión en el poder judicial para enfrentar los despidos, tenés que plantear la lucha, la defensa de los puestos de trabajo y eso no lo está haciendo UPCN, lo cual genera mucho malestar por la base, muchas veces se establece una imposición burocrática, porque a veces los compañeros se afilian casi en una lógica de rehenes, porque como esos dirigentes son los que los pueden entregar se afilian para que no lo hagan, un efecto síndrome de Estocolmo en la relación de una gran porción de esos afiliados de base con esas estructuras sindicales que están totalmente entregadas a la patronal.

UPCN es el gremio oficialista del oficialismo de turno y va a seguir siendo así. A ATE le cabe la responsabilidad de organizar la resistencia con la mayor amplitud política para generar las condiciones y poder intervenir de manera unificada y, al mismo tiempo, desde esa unidad, animarnos a desarrollar una política realmente masiva que interpele a la gran cantidad de compañeros y compañeras que no están afiliados y los que están afiliados a UPCN pero que ven que su sindicato no quiere salir a luchar.

Los despidos en el Estado tienen como objetivo disciplinar al conjunto del movimiento obrero

-M.H.: Estuviste en el plenario de IMPA el sábado 16 de enero, convocado por dos agrupaciones estatales «ATE desde abajo» y la «Víctor Choque». ¿Qué balance hacés?

-H.V.I.: Convocamos al plenario desde las dos agrupaciones, yo milito en «ATE desde abajo», Seccional Capital, la «Choque» es una agrupación de una larguísima trayectoria combativa entre los provinciales bonaerenses, conduce dos seccionales, ATE Lomas de Zamora y ATE Alte. Brown y venimos trabajando en conjunto buena parte de la militancia de ambas agrupaciones, somos a su vez impulsores de la corriente «Rompiendo Cadenas» y en nuestras agrupaciones siempre se dan confluencias amplias de compañeros que militan en diferentes organizaciones, y un montonazo de compañeros y compañeras independientes.

Desde esas dos referencias convocamos a un plenario con 4 días de antelación, surgido de la necesidad urgente de crear un espacio de discusión y organización para llevar adelante orientaciones comunes. Quedamos sorprendidos por la convocatoria, más de 230 compañeros, en el caso del Estado Nacional delegados, activistas y trabajadores de 31 sectores del Estado, de 10 de Ciudad de Buenos Aires, 10 localidades de la provincia, fue un plenario realmente masivo y de una gran riqueza.

A Norberto Señor y a mí nos tocó hacer la apertura, Norberto ofreció una perspectiva más general, los objetivos de estos despidos que no podemos perder de vista, que golpean sobre los trabajadores del Estado pero persiguen un objetivo mucho más de fondo que es el disciplinamiento del conjunto del movimiento obrero.

Lo que está haciendo el Estado al despedir a laburantes estatales es decirle a los grandes empresarios que es momento de despedir, que aprovechen, que aprieten a los laburantes de esa manera porque saben que es la herramienta fundamental para disciplinar a la baja a las negociaciones paritarias que se vienen y que se van a adelantar, porque venimos de inflación acumulada durante todo 2015, que en el último mes tuvo un salto impresionante en el alza del costo de vida a partir de la devaluación. Y sabemos que antes de que se concrete la devaluación, que se hizo bajo la forma de la liberación del cepo, las semanas previas los precios ya se estaban yendo a las nubes porque ya todos sabían que avanzábamos hacia una devaluación.

Con esto hemos perdido entre un 30/40% de nuestro salario, lo que quiere el gobierno macrista es que los laburantes elijamos entre salario o empleo, como lo dijo de manera perversa el Ministro Prat Gay. Los despidos en el Estado tienen como objetivo disciplinar al conjunto del movimiento obrero, parte de esta explicación es la que desarrolló Norberto en la apertura del plenario. Después a mí me tocó aportar ciertas dinámicas que ya estamos viendo, que constituyen todo un procedimiento de parte de la patronal, de cómo accionar y llevar adelante estas políticas, que en concreto se trata de sembrar de rumores, versiones y todo tipo de operaciones de desinformación y de manera casi psicológica entre los compañeros en los lugares de laburo. Echan a correr un par de rumores, diciendo que va a haber 800 despidos, luego caen 200 telegramas, entonces 600 creen que están respirando y que se están salvando, entonces amortigua el impacto. La diferencia entre el rumor y la medida concreta genera el terror y la parálisis del conjunto de los laburantes. Este es un procedimiento que aplicaron en los ´90 cuando desguazaron las empresas del Estado y que están replicando ahora.

El otro procedimiento es que toman medidas generalizadas, con la excusa de los «ñoquis» meten zarpazos generalizados y en el mejor de los casos si hay resistencia empiezan a revisar. La paradoja es que se invierte la carga de la prueba, si a través de la lucha se logra abrir esa mesa para que reviertan despidos, el trabajador tiene que demostrar que no es ñoqui. Es una cuestión muy perversa y deliberadamente planificada, no están cometiendo errores ni se les está escapando nada, están entrenados para hacer esto, saben cómo hacerlo y están empezando a llevarlo adelante.

-M.H.: ¿Cuáles son los próximos pasos?

-H.V.I.: En el Ministerio de Trabajo tuvimos hoy una muy buena reunión con el grupo de compañeros despedidos, nuestro Cuerpo de Delegados y el activismo de Sede Central del Ministerio para continuar con las acciones, seguiremos insistiendo para que las autoridades nos reciban y nos den una respuesta y si no la tenemos, vamos a ir escalonando medidas en las próximas dos semanas, entre acciones de difusión interna e ir preparando una nueva manifestación en la calle, porque creemos que es el único camino que nos queda para revertir estos despidos.

Paralelamente seguimos trabajando por la unidad de nuestro gremio, junto con otras Juntas Internas coincidimos en la necesidad de que ATE Nacional y ATE Capital llamen a un único plenario unificado de delegados, que defina un único plan de lucha, que es momento de centralizar todas esas fuerzas y lo hacemos con la urgencia y la convicción de que no podemos esperar hasta marzo porque si lo hacemos nos van a pasar por arriba, es una cuestión casi elemental de defensa en estos momentos. Si no oponemos una fuerte resistencia ahora, vamos a llegar muy debilitados a marzo y nos van a pegar un garrotazo terrible, entonces poder organizarnos ahora los sectores de abajo, unificar la lucha y salir a la calle es vital para nosotros.

Hay una campaña mediática que nos está estigmatizando con el objetivo de aislarnos para despedirnos con mayor facilidad, en ese marco, tener esta posibilidad de dar nuestra palabra y que sectores de la audiencia puedan conocer otro punto de vista es muy positivo y un aliciente para nosotros, así que muchas gracias.

Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.