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Denuncian la represión del gobierno de Kirchner a los movimientos sociales

Fuentes: Rebelión

El Colectivo AMAUTA denuncia:    Durante todos estos meses hemos asistido a un festival mediático donde se obligó al pueblo argentino a optar entre Guate-MALA (el gobierno del PJ) y Guate-PEOR (la gran patronal sojera). Una pelea por el botín de la renta que enfrentó a los chetos de countries y barrios pudientes capitalinos y […]

El Colectivo AMAUTA denuncia:   

Durante todos estos meses hemos asistido a un festival mediático donde se obligó al pueblo argentino a optar entre Guate-MALA (el gobierno del PJ) y Guate-PEOR (la gran patronal sojera).

Una pelea por el botín de la renta que enfrentó a los chetos de countries y barrios pudientes capitalinos y a los oligarcas de grandes estancias provinciales con los empresarios del gobierno, sus tecnócratas ministeriales, sus funcionarios de trajecito y corbata y sus burócratas sindicales (en ambos bandos hubo pobres, pero nunca dirigieron nada, fueron remolcados como carne de cañón por intereses ajenos).

Unos y otros, funcionarios oficialistas y defensores de la vieja oligarquía regaron de carpas la Plaza Congreso. No hubo problema alguno… todo se cocina en familia… todo bien mediático.

Hoy, en cambio, las calles y avenidas de la capital fueron ganadas por un tercer sector (plural y diverso) que no quiere ir a remolque de la Sociedad Rural ni quiere bailar la música oficialista del gobierno del PJ que paga la deuda externa y se humilla ante Bush.

Dejando mezquindades e incomprensibles rivalidades de parroquia a un costado, las principales corrientes piqueteras (no oficiales) ganaron la calle abriendo el bosque para encontrar un tercer camino, distante al mismo tiempo de la Sociedad Rural y del aparato burocrático del PJ.

Ni con las cacerolas de teflón ni con los sacos y las corbatas de los ministerios oficialistas

¿Qué reclamaban y reclaman estos movimientos piqueteros acompañados por estudiantes y jóvenes rebeldes?

Reivindicaciones tan «subversivas», tan «irracionales» y tan «terroristas» como las siguientes:

Trabajo   Que se otorguen puestos de trabajo en la obra publica para todos los desocupados. Blanqueo laboral general. Pase a planta permanente de los planes sociales. Por la derogación del estatuto negrero del peón rural.

Seguro al desocupado universal de $650 (canasta de indigencia)

Salario mínimo vital y móvil igual a la canasta familiar para los trabajadores de la ciudad, el campo, 82 % para los jubilados. Reapertura de las paritarias. No a los topes del gobierno y la burocracia. Doble aguinaldo en julio.

Garantizar alimentos y energía para todos. Derogación del IVA en los productos de primera necesidad. Restitución de todos los comedores escolares, asignación mínima de $8 por comensal. Garrafas sociales a $10.

Exención de pago de servicios para desocupados o trabajadores por debajo de la línea de la pobreza.

Los manifestantes piqueteros, primero fueron amedentrados con una cantidad inmensa de Infantería en Corrientes y 9 de julio. Durante horas las fuerzas de represión del Estado «progresista», armadas como para una guerra (contra los pobres…) o para una película futurista, con carros hidrantes, carros de asalto y todo lo que tenían a mano, amedentraron y amenazaron a los manifestantes. Realmente daban miedo.

Luego, en Plaza de Mayo, cuando este tercer sector intentó hacer lo mismo que hace ya largo tiempo hicieron los ruralistas y los funcionarios oficialistas (es decir… algo tan grave y tan terrible como… ¡¡¡levantar una carpa!!!) fueron violentamente reprimidos y sin previo aviso. Le pegaron a mujeres y chicos. Se llevaron detenidos, incluso a menores de edad. No perdonaron ni a las familias. Hubo muchas cabezas rotas por los bastones policiales.

Entre todos los compañeros golpeados y detenidos hay algunos cumpas y amigos que conocemos desde hace muchos años y con quienes hemos compartido numerosas iniciativas militantes y varias escuelas de formación política.

Luego, la TV oficialista, la misma que transmitió en directo a De Angelis durante semanas…, la que apoyó a Blumberg…, la que da crédito a las cifras truchas del INDEC…, la que siempre acompaña al poder de turno… apeló al montaje y, una vez más, aparece ante los televidentes el DEMONIO SUBVERSIVO (va cambiando de nombre década a década…). Parece que la gran víctima es la policía. Las mujeres humildes de los barrios periféricos, ferozmente apaleadas, se convierten en «grandes agitadoras» y «activistas».

Desde el Colectivo AMAUTA acompañamos a nuestros compañeros a la comisaría, nos solidarizamos con su libertad y convocamos a todo el campo popular a defender la libertad de los presos políticos y rechazar la represión de la infantería y la policía.

¡No se puede invocar a Rodolfo Walsh y dar leña con la infantería al mismo tiempo!
¡No se puede hablar de los «pobres chacareros» y luego defender en la práctica a la patria sojera!
¡Basta de macartismo y demonización de la protesta social!

Colectivo AMAUTA
Cátedra Che Guevara