La misión diplomática de Washington en Bs.As. podría haber participado en el homicidio que hace semanas ocupa la atención de los argentinos. Además, develan sus conexiones con el terrorismo. La embajada de Estados Unidos en Argentina aparece involucrada en el triple crimen cometido hace algo más de dos semanas en la provincia de Buenos Aires, […]
La misión diplomática de Washington en Bs.As. podría haber participado en el homicidio que hace semanas ocupa la atención de los argentinos. Además, develan sus conexiones con el terrorismo.
La embajada de Estados Unidos en Argentina aparece involucrada en el triple crimen cometido hace algo más de dos semanas en la provincia de Buenos Aires, hecho que ocupa las primeras planas de la prensa escrita y los principales espacios de los noticieros televisivos.
Así se desprende de una investigación publicada el domingo último por el diario Crítica de la Argentina, en la que se revelan los contactos telefónicos del guardaespaldas de una de las tres víctimas, acusado de ser colaborador de la policía antinarcóticos de Estados Unidos (DEA).
A mediados del mes pasado, el joven empresario Sebastián Forza y dos amigos aparecieron acribillados en General Rodríguez, una localidad de la provincia de Buenos Aires, cercana a esta capital.
Las investigaciones judiciales y policiales indican que se trató de un triple homicidio vinculado al narcotráfico, en el que aparecen comprometidos traficantes locales, colombianos y mexicanos; funcionarios municipales de General Rodríguez y efectivos de la policía provincial bonaerense, según lo afirmado por el periódico Crítica de Argentina.
«Durante sus últimos meses de vida Sebastián Forza fue informante de la DEA en la Argentina. La agencia de drogas de los Estados Unidos lo había reclutado a través de Julio César Pose, su guardaespaldas. Pose, en realidad, es un soplón de los norteamericanos que también trabajó para la SIDE (servicios de inteligencia argentinos) y, como Forza, fue aportante de la campaña presidencial de Cristina Fernández de Kirchner. Pose, conocido como «Gitano», estuvo preso por el tráfico de 80 kilos de cocaína en 2004″, sostiene Crítica de la Argentina.
El mismo medio continúa: «En esa causa, a cargo del juez federal Claudio Bonadío, se confirmó su vínculo con la DEA. Fue excarcelado. El 14 de agosto último, al día siguiente de que aparecieran los cuerpos de los tres fusilados, Pose se comunicó con la embajada de Estados Unidos. En una escucha que figura en el expediente del triple crimen un funcionario norteamericano le dice: «Afuera de la Argentina usted puede recibir el crédito». Pose contesta: «Ok, necesito el crédito y una residencia en Miami please». Hace 12 días le pidió autorización a Bonadío para salir del país».
De confirmarse la veracidad de las afirmaciones de ese diario, un escándalo diplomático entre Argentina y Estados Unidos sería inevitable.
La Cancillería local debería dirigirse en forma inmediata a la embajada estadounidense en esta capital, para que la misma dé las explicaciones que impone el derecho internacional.
«Consultada por Crítica de la Argentina sobre el vínculo de Pose con la DEA, la agregaduría de prensa de la embajada norteamericana desvió la consulta hacia dos miembros de la agencia de drogas: en ninguno de los dos números de los Estados Unidos respondieron a los llamados», añadió la investigación publicada por el matutino local, consultable en su sitio electrónico www.criticadigital.com .
A continuación APM reproduce párrafos sobresalientes de ese artículo: «Su premura por viajar (la de Pose)quedó registrada en una conversación que tuvo con un funcionario de la embajada de los Estados Unidos. A través de dos fuentes que leyeron esas escuchas Crítica reconstruyó el diálogo. Fue al día siguiente del hallazgo de los cuerpos. Llamó él. «Hablan de cómo anduvo la cosa. El otro le dice que el día estuvo movido, por lo de los cadáveres. Luego le advierte que se tiene que cuidar. Después charlan con códigos que no se comprenden. Hasta que Pose lo aprieta con que está apurado por lo del dinero», reconstruye el investigador.
-Hoy voy a Tribunales. Porque también corre peligro mi vida -le dice Pose al funcionario de la embajada.
-Eso ya va a salir -lo tranquiliza quien parece ser su jefe. Y en el tramo más inquietante el norteamericano le sugiere:
-Afuera de la Argentina usted puede recibir el crédito.
Pose negocia.
-Ok, necesito el crédito y una residencia en Miami, please.
El mismo medio da cuenta de las relaciones de Pose con el salvaje atentado terrorista cometido hace más de 10 años contra la sede la mutual judía en Buenos Aires (AMIA), hecho en el que indudablemente aparece involucrado el gobierno del ex presidente Carlos Menem y tiene repercusiones internacionales de primera magnitud.
«La relación de Pose con la SIDE, si bien ha sido desmentida, tiene un antecedente cierto. Durante la investigación del atentado a la AMIA, uno de los imputados descubrió que antes del primer pago de 200 mil pesos a Telleldín hubo un llamado telefónico a un celular que resultó estar a nombre de Julio César Pose. Pose declaró en esa causa y en las actas del proceso se lo sindica como «quien con el nombre supuesto de Gitano se desempeñaba en la Secretaría de Inteligencia y tenía como jefe directo a Alejandro Brousson», subrayó Crítica de la Argentina.
Otro tema que debería aclarar la diplomacia estadounidense, no sólo ante la Cancillería sino ante la Justicia de este país: sus relaciones oficiales con terroristas.