—Exigiendo la libertad de Martín Rodríguez y Lorena Torres en Mendoza. Contanos qué pasó Chiquito.
—Bueno, luego de una semana muy fuerte acá en Mendoza y hoy (21/3) en todo el país con cortes y movilizaciones en más de 100 puntos, desde Ushuaia hasta la Quiaca, pasando por todas las rutas principales del país. Salieron miles de personas a la calle. Lo cual es un síntoma para mí, para nosotros, de una gran vitalidad de la lucha por las libertades democráticas en la Argentina. Y ha sido aquí en Mendoza donde efectivamente hay un gobierno que se lo podría catalogar de fascista, con características muy marcadas de atacar las libertades democráticas, e inclusive entendiendo esto como un laboratorio, como un globo de ensayo aquí en Mendoza de lo que puede ser la Argentina. Porque vos sabés que aquí el que corta el bacalao es Cornejo, que es aliado de Patricia Bullrich. Por lo tanto, se pusieron como un eslogan donde decía: ‘con Mendoza no’. Me atacaron mucho a mí diciendo ‘este viene a Mendoza y no va a pasar lo mismo que pasa en Buenos Aires, que nadie hace nada’. Haciendo toda una puesta en escena también electoral que, finalmente, y por suerte gracias a que los compañeros de todo el país salieron fuertemente con la Unidad Piquetera, con la movilización, con la acción de lucha, hoy alrededor de las 15:00 la jueza, que vendría a ser jueza de Garantía, decretó la libertad, pero sigue el proceso.
—¡Qué buena noticia!
—Están en libertad, ya están en su casa. En un rato los voy a volver a ver porque nos vamos a juntar para festejar. Y ya estoy partiendo de vuelta para Buenos Aires porque estamos en la víspera del 24 de marzo. Está en juego esa pelea de todo el país por los compañeros procesados, por los compañeros detenidos.
Lamentablemente en la Argentina hay muchos procesados, hay una campaña de criminalización que no trepida en detener compañeros y compañeras, en procesarlos, y que recorre todo el espinal político de todos los gobernadores de todos los colores. En Mendoza están los Radicales/Pro, pero también en Salta hay un protocolo represivo, en Córdoba y lógicamente todo lo que ocurre en todas las provincias del norte que está difícil la pelea por las reivindicaciones, y que a veces tenemos tantas dificultades en la lucha que los compañeros llevan adelante inevitablemente. Porque el ajuste se lleva puesto todo: salarios, los impuestos, la comida. Por lo tanto, el escenario es de lucha, lamentablemente.
—Sí, yo había visto que también el martes pasado (14/3), en el marco de la jornada de la Unidad Piquetera habían sido reprimidos compañeros de Mar del Plata frente al ministerio de Desarrollo de esa ciudad.
—Sí, creo que hubo un incidente ahí, pero por suerte no tuvo mayores consecuencias. Efectivamente, hay una tendencia… no tanto a la represión abierta quizás, pero sí a la criminalización. Hay cientos y cientos de procesados por muchas luchas, no solo por las nuestras. Por luchas ambientales, los compañeros de los pueblos originarios también son procesados, bueno ni hablar del movimiento piquetero, pero también hay gremios como acá en Mendoza mismo los trabajadores del Estado, los docentes que también están siendo criminalizados por el gobierno provincial. Y lógicamente forma parte de una política en común de todos los gobiernos porque son todos partidarios de un ajuste y, por lo tanto, son partidarios de que los trabajadores no resistan ese ajuste que manda el FMI y aplican los gobiernos.
—Chiquito, hoy se reunieron para definir el Salario Mínimo Vital y Móvil, ¿qué información tenés al respecto?
—Que nuevamente la burocracia volvió a traicionar no solo a los trabajadores, sino también a los jubilados, sobre todo. El salario mínimo rige la jubilación mínima. Por lo tanto, han votado y han aprobado la CGT y las CTAs, sin que tuvieran mandato, un salario de miseria. Es decir, condenan a los jubilados y a los trabajadores más bajos a un salario por debajo de la canasta de indigencia. Es una traición tan grande sin ningún tipo de mandato, sin ningún tipo de convocatoria, de asamblea, de haber convocado a los trabajadores a ver qué opinan.
Aquí ha habido un avance extraordinario de la clase capitalista sobre los trabajadores y los sindicatos son cómplices de ese avance, porque no han movido un dedo para defender el salario. Y esto es un clavo más en el ataúd de una burocracia sindical que es escandalosamente entregadora frente a un gobierno que es fondomonetarista. Tenés un gobierno entregador y una CGT totalmente burocratizada que ni siquiera les pregunta a los trabajadores si les parece bien un salario mínimo de miseria como el que tenemos en la Argentina.
—Chiquito, a festejar. Un fuerte abrazo a los compañeros Martín Rodríguez y Lorena Torres. Y bueno, a seguir la lucha ¿no es cierto? Para que esta causa se cierre definitivamente.
—Siempre, siempre. Te agradezco mucho.
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