«Un triunfazo». Así calificó Claudio Marín, secretario adjunto del sindicato FOETRA Buenos Aires y miembro de la Mesa Nacional de la CTA, a las reivindicaciones laborales obtenidas ayer luego de 20 días de lucha. «Con la lucha conseguimos un 35% de aumento salarial y la reducción horaria de la jornada laboral», explicó. No fue una […]
«Un triunfazo». Así calificó Claudio Marín, secretario adjunto del sindicato FOETRA Buenos Aires y miembro de la Mesa Nacional de la CTA, a las reivindicaciones laborales obtenidas ayer luego de 20 días de lucha. «Con la lucha conseguimos un 35% de aumento salarial y la reducción horaria de la jornada laboral», explicó.
No fue una pelea sencilla. Fueron casi tres semanas de asamblea permanente, continua, en la que las empresas Telefónica y Telecom desoían las demandas laborales y el Ministerio de Trabajo de la Nación dictó la conciliación obligatoria entre las partes. Sin embargo la Federación de Obreros y Empleados Telefónicos de la República Argentina (FOETRA) continuó con la lucha. «Realizamos un medida de acción directa que fue una asamblea por tiempo continuo, permanente, que en términos prácticos, fue como un paro en los lugares de trabajo», detalló Marín en diálogo con ACTA, quien dio cuenta de los inicios del conflicto: «Fue hace aproximadamente 20 días, al quinto día el Ministerio de Trabajo dictó la conciliación obligatoria por quince días que nosotros acatamos».
«100% de acatamiento»
El dirigente telefónico subrayó la metodología, la participación y la resolución positiva de la lucha. «Los trabajadores tuvieron un acatamiento a la medida de fuerza de un 100%, y dicho por la empresa, nadie dejó de acatarla. Pero, a su vez, lo importante es que se sumaron en esta oportunidad los sindicatos de Rosario, Tucumán, Chaco y Luján, estos sindicatos se habían desprendidos en los últimos días de la ultramenemista Foesitra (Federación de Obreros, Empleados y Especialistas en Servicios de la Industria de las Telecomunicaciones) y se sumaron para conformar la FATel, (Federación Argentina de las Telecomunicaciones) que estamos impulsando desde FOETRA Buenos Aires. En relación a los conflictos anteriores es un salto cualitativo y también los triunfos anteriores impulsaron a estos sindicatos a pegarlo».
Sobre lo frutos de la lucha, Marín resaltó: «Nosotros estábamos pidiendo un 40% de aumento y una rebaja horaria en la jornada laboral. Con la lucha logramos un 35% de aumento salarial y la reducción horaria: Pasamos de 8 horas y 15 minutos a 7 horas; y en lo sectores de tráficos, call center y centros de llamadas fue de 7 horas y 30 minutos a 6 horas y 30 minutos». Y añadió: «Son 12 mil trabajadores en distintos puntos del país, en los ámbitos de las empresas Telefónica y Telecom, los beneficiados».
En referencia a los pasos que queda para sellar el acuerdo, el secretario adjunto de FOETRA Buenos Aires informó que «ayer el plenario de Buenos Aires, con 300 delegados, suspendió la medida de asamblea permanente, porque para hoy teníamos previsto un paro de 48 horas y movilización a la Plaza de Mayo, donde, a su vez, íbamos a denunciar las actitudes que están teniendo las empresas hacia el propio Estado nacional. Por ejemplo, Telefónica pretende cobrar una deuda por la pesificación de 3.000 millones de dólares con un juicio en el CIADI. Entendemos que, a pesar de todas las ganancias que se llevaron, quieren que salgan de nuestros bolsillos una compensación por esto. Se pasan de la raya». «Esto -continuó- quedó suspendido por el plenario ayer y hoy todos los edificios están en asamblea discutiendo la propuesta y hoy a última hora de la tarde habrá un nuevo plenario que seguramente terminará de aprobar la escala salarial, más la reducción horaria. Y, finalmente, el día lunes haremos la Asamblea General, con la presencia de unos 3.500 afiliados en las instalaciones de Obras Sanitarias que emitirá un despacho y terminará de aprobar esta situación».
Sobre la manera en que se desarrolló el conflicto y acerca del rol de los trabajadores destacó la «decisión y participación» de la Asamblea General de Afiliados y el funcionamiento «transparente y democrático, donde se trabaja con un doble mecanismo de aprobación en plenario y un mecanismo de aprobación en asamblea». Dijo sobre este método el dirigente de la CTA: «Son para alquilar balcones, multitudinarias, de 3.000 personas. Y ahora se suma el hecho de que logramos aumento de salario y reducción del horario laboral sin hacer ningún tipo de concesión». Y ejemplificó la magnitud de lo obtenido: Un cuadro medio, con una antigüedad media, digamos el promedio, percibirá un salario en mano de 2.100 pesos, ya con los descuentos hechos; quebramos el piso de 1.800 pesos. Además estamos consolidando una Federación de orden nacional. Se trata de un triunfazo por la participación de la gente».
Agencia Walsh