El mercado aéreo argentino mueve 20 millones de pasajeros al año. No es extraño, por eso, que las líneas aéreas se peleen las rutas disponibles, ni tampoco que Lan Argentina se encuentre ahora acusada judicialmente de haber inventado una complicada trama para acceder a ese mercado, reservado para empresas argentinas. En su informe anual ante […]
El mercado aéreo argentino mueve 20 millones de pasajeros al año. No es extraño, por eso, que las líneas aéreas se peleen las rutas disponibles, ni tampoco que Lan Argentina se encuentre ahora acusada judicialmente de haber inventado una complicada trama para acceder a ese mercado, reservado para empresas argentinas. En su informe anual ante la Comisión de Valores norteamericana, Lan Argentina dice que adquirió en el primer semestre de 2005 un 49% de las acciones de una «pequeña empresa» local, Aero 2000, «que opera bajo el nombre Lan Argentina», y comenzó a explotar dos destinaciones domésticas en junio. El 51% restante de Aero 2000 pertenece a los abogados Jorge Pérez Alati y Manuel Benítez. Ellos, coincidentemente, son los abogados de Lan en Argentina.
Simulación y fraude
La querella judicial en curso, presentada por el diputado socialista Ariel Basteiro, acusa a Lan de haber creado una empresa de pantalla para evadir la ley argentina y operar indebidamente en el mercado con aviones y tripulaciones chilenas, pues Aero 2000 no funcionaba y no tenía aviones, pero sí licencia para operar esas dos rutas. En el escrito, el diputado afirma que «la circunstancia de que los abogados, presuntamente propietarios de la mayoría del capital accionario, aportaran en cuestión una suma de dos millones de dólares reforzaba la opinión de que se trataba de una simulación en fraude a la ley, toda vez que constituiría una suma de dinero irrisoria para una compañía aérea de la envergadura anunciada» .
Efectivamente, el 19 de diciembre se inició en Argentina la licitación por 15 años de más de 100 rutas aéreas, de las cuales Lan Argentina pidió 27, incluidas algunas internacionales. Sólo Aerolíneas Argentinas solicitó más destinaciones que Lan. Con los dos millones de dólares de capital de los dos «controladores», difícilmente se constituiría una garantía respetable para la adquisición o arriendo de las aeronaves necesarias para cubrir esas rutas, pues de otro modo tendría que hacerse, como se hace ahora, con aviones chilenos.
Los costos de una línea aérea son considerables, sobre todo cuando quiere controlar todo el mercado regional. Desde 1998 hasta 2008, Lan ha asumido compromisos por dos mil millones de dólares para la adquisición de 34 aviones (20 Airbus y 14 Boeing). La flota de Lan en diciembre de 2004, según sus informes, era de 26 aviones propios y 10 arrendados.
Basteiro acusa directamente al subsecretario argentino de Transporte Aerocomercial, de haber llegado a un acuerdo secreto. ¿Con quién? Concretamente, con el ex candidato derechista a la Presidencia de Chile, Sebastián Piñera. El «precio» pagado por Piñera para acceder al mercado trasandino, según la prensa argentina, fue la absorción de 850 trabajadores de otra línea fantasma, la estatal Lafsa (Líneas Aéreas Federales), y de AeroVip, que quedaron sin empleo luego del cierre de otra empresa de oportunidad, Southern Wings, envuelta en un escándalo de narcotráfico.
Los sindicatos
Edgardo Llano es el secretario general de la Asociación del Personal Aeronáutico de Argentina (APA) , organización que reúne a los trabajadores de tierra. Llano contó que a fines de 2004 la situación laboral en la industria aeronáutica era crítica, debido a las repercusiones de la crisis financiera de 2002. Hasta entonces, todos los esfuerzos de Lan por entrar al mercado habían fracasado. «O era la organización sindical o alguna autoridad de Gobierno la que se oponía» , dice Llano. Sin embargo, con la crisis de vuelos y los trabajadores cesantes clamando por una solución, más la actitud favorable de Lan de contratarlos, se crearon las condiciones que la empresa chilena esperaba. Según Llano, el lobby que hicieron Piñera y Enrique Cueto (vicepresidente ejecutivo de Lan) fue intenso. «Ellos tuvieron un acercamiento muy fuerte con el Gobierno a través del secretario de Transportes de la nación, Ricardo Jaime. Y también del subsecretario de Transporte Aerocomercial, Ricardo Cirieli, quien luego fue uno de los sindicados como gestor de la entrada. Supe que Cirieli incluso viajó a Chile para reunirse con ellos y generar las alternativas de negocio» , señala.
Turbulencias
El secretario ejecutivo de la Asociación Argentina de Aeronavegantes, Ricardo Frecia , que representa a los 2.500 trabajadores de cabina de las distintas aerolíneas que operan en Argentina, afirma que la operación fue turbia. «Llevo 30 años en este rubro y nunca nadie había escuchado de Aero 2000. Cuando la comenzamos a investigar nos dimos cuenta de que nunca había volado, que no tenía un avión, pero que extrañamente tenía rutas adjudicadas para volar. Lo que llamamos una empresa de papel» . Frecia cuenta que el sindicato solicitó formalmente a Ricardo Cirieli la información sobre Aero 2000, que nunca llegó. Sin embargo, los sindicalistas dicen haber podido comprobar muchos datos. Uno de ellos sería que los socios fundadores de Aero 2000 prestan servicios a Cencosud argentina, que controla los supermercados Jumbo. «La sospecha es que son testaferros de Lan, esencialmente porque no tienen ninguna injerencia en las decisiones de la empresa» , señala.
El titular de la Inspección General de Justicia, Ricardo Augusto Nissen , consideró que se encontraba sobradamente probado que «existió una flagrante violación a lo dispuesto por los artículos 99, 100 y 112 del Código Aeronáutico, en tanto que más allá del origen de la sociedad Aero 2000 S.A. y de la nacionalidad de la mayoría de sus directores y titulares de su paquete accionario, el verdadero y real dueño de la totalidad de sus acciones, o el controlador externo de aquella entidad, es el grupo Lan Chile o Lan Airlines, de probado origen chileno» .
El otro dato es aún más extraño. Un tercer socio de Aero 2000 es nada menos que Miguel Ziadi, gerente y director de la quebrada Aerolínea Dinar, que fue socia de Lafsa (cuyos empleados Lan heredó), para la formación de Southern Winds, que salió de Argentina después que le descubrieron cuatro valijas con 15 kilos de cocaína en el aeropuerto de Barajas, en Madrid.
Frecia agrega que el síndico de Aero 2000 era el doctor Pablo Maisonabe, «a quien fuimos a visitar con un escribano público (notario) para preguntarle qué era esta empresa. El síndico nos dijo, entre otras cosas, como consta en acta prodigada por el propio escribano, que Aero 2000 era una empresa de papel, que era un chinchorro, que se había hecho Ziadi para cuando quebrara Dinar» . Piñera, a través de Aero 2000, hoy es socio de Ziadi, uno de los personajes más oscuros del mercado de aerolíneas en Argentina .
Negocio barato
Llano comenta que a Piñera y Cueto la entrada a Argentina les costó barata. «500 mil dólares para entrar al país como empresa argentina» . Según él, hay coincidencias notables que se desprenden de este negocio, como que la fundación de Aero 2000 fue realizada por Ziadi hace cinco años, fecha en que Piñera y Cueto iniciaron la campaña para llegar a Argentina.
Pero no todo ha sido color de rosa. Hasta ahora, Lan Argentina no logra realizar vuelos internacionales. El 1 de diciembre de 2005 inició uno a Miami, pero, contrariamente a lo que la aerolínea había anunciado, debió hacer escala en Chile y desde ahí partir a Estados Unidos. Los sindicatos norteamericanos denunciaron que la empresa aún no cuenta con la patente nacional que exige la ley argentina para esta operación. Por más que la empresa solicitó una prórroga para conseguir la patente, le fue denegada. Luego de la chambonada, Lan debió bonificar con 100 dólares a los pasajeros de clase económica y 500 a los de ejecutiva.
Prácticas antisindicales
Ricardo Frecia señala a Lan como la empresa aeronáutica que más problemas sindicales crea en el país. Lo primero son los sueldos; asegura que son los más bajos del mercado: «160 dólares de base. Todo lo demás está atado a productividad, o sea si trabajás cobrás algún dinero más, pero cuando estás de vacaciones cobrás sólo este básico. Ni siquiera las peores empresas pagaban eso, pagaban 300 dólares» , dice. A eso se suma que Lan en Argentina funciona con dos empresas: Lan Airlines y Aero 2000. Para Frecia, esto no es más que un artilugio para no sentarse a negociar colectivamente, una técnica que han denunciado también los sindicatos chilenos de Lan. «Cuando hablamos con la gente de Lan Airlines para negociar un contrato colectivo, nos dicen que son dos empresas distintas en circunstancias que los aviones son los mismos» , dice Frecia. Hace tres años, relata, se logró sindicalizar a los trabajadores de Lan Airlines, pero la empresa comenzó a hostigar al delegado sindical recién nombrado. «No le ponían vuelos, y como está todo atado a productividad, con eso terminaron desafiliándose muchos de los tripulantes de cabina. La persona en cuestión se consideró despedida» .
En virtud del acuerdo para operar las rutas locales, Aero 2000 absorbió a los trabajadores de Lafsa y AeroVip, que tenían contratos anteriores, de manera que no pudo imponerles los bajos sueldos y viáticos de Lan. «Entonces los deja trabajando, pero no los hace volar al extranjero porque le sale más caro. Ese es un trato desigual y que perjudica el trabajo de la gente. Eso lo sabe todo el mundo y lo hace Lan» , dice Frecia «En cambio, a los nuevos, con un contrato menos beneficioso, les paga menos viáticos y le sale más barato. Es la única empresa que yo conozco en que a los empleados de vuelo los hacen compartir habitación» , agrega.
Llano, de los trabajadores de tierra, concuerda. Denuncia que la empresa forzó a los funcionarios de tierra a cumplir funciones de vuelo cuando fuera requerido. «Con esto, la empresa se surte de mano de obra de un lado cuando le falta del otro lado. Obviamente, es algo que no aceptamos» .
LAN, el asterisco
Frecia agrega otro dato que se asemeja a las denuncias que en noviembre de 2005 realizaron los trabajadores de Lan en Chile. Según el sindicalista, por norma de fatiga de vuelo, los trabajadores de Argentina tienen 30 días hábiles de vacaciones. «Pues bien, los trabajadores de la filial argentina de Lan Airlines tienen 15 días de vacaciones al año, con funcionarios trabajando hasta 10 días seguidos sin descanso, cuando en la Argentina la norma indica siete. Independientemente del país en que esté, Lan siempre es la misma» , denuncia Frecia. «Pretende llegar a Buenos Aires y de aquí volar como Lan Argentina, tal vez con los mismos tripulantes. O sea, lo único que cambia sería la razón social, pues serían los mismos tripulantes y el mismo avión. De acá sale a Miami inmediatamente y tal vez habría podido salir a Lima como Lan Perú cambiando solamente los tripulantes, pero con el mismo avión. Esto le da ventajas competitivas» .
En su informe a la Comisión de Valores, Lan Airlines (Chile) descubre cándidamente la seriedad con que enfrenta sus relaciones con los trabajadores. Dice el documento: «Al 31 de diciembre de 2004, la compañía se encontraba como acusada en cinco disputas laborales iniciadas por los sindicatos de pilotos y de empleados de cabina, que demandan el pago de bonos por los años terminados el 31 de diciembre de 1999, 2000, 2001 y 2002. La compañía no ha asignado fondos para esto porque la gerencia considera que los juicios resultarán favorables para la compañía, y cualquier pérdida en que se incurra no será material» . En efecto, la principal pérdida hasta ahora ha sido para el sindicato de pilotos, que antes tenía 400 miembros y ahora apenas 70, según consta en una acusación que realizaron ante la Organización Internacional del Trabajo (OIT). En ella, el Gobierno de Chile se refiere en duros términos a la compañía y califica la situación como una persecución sindical. La mayoría de los pilotos llegaron a acuerdos extrajudiciales con la empresa debido al cerco que se les formó alrededor. Otros, los más duros, no encontraron trabajo y debieron emigrar a otros países.
Repudio en la región
Gran parte de los puntos tratados anteriormente quedaron registrados en una carta del 5 de octubre de 2005 firmada en Río de Janeiro. Se titula «Repudio a las políticas antisindicales, de terciarización y de dumping social que utilizan las empresas del grupo Lan en la región» . Adhieren a ella los representantes de sindicatos aeronáuticos del Mercosur y representantes de Chile y Bolivia, participantes de la reunión de coordinación conjunta de la Federación Internacional de Trabajadores y de la Coordinadora de Centrales Sindicales del Cono Sur.
El tono de la carta es de repudio y preocupación, debido a la constatación internacional de prácticas comunes de Lan en los lugares donde se ha asentado. Señala, por ejemplo, que el crecimiento de Lan en la región ha sido «a expensas de la precarización sistemática de las condiciones laborales y de salario de sus trabajadores y trabajadoras» . Además, recalca lo que denominan «dumping social». Lan se ha instalado en países como Ecuador y Perú volando con matrícula chilena. A diferencia de la mayoría de las aerolíneas que aterrizan en esos países y que mantienen sus aviones en las pistas en espera de que llegue la noche para no pagar tasas extraportuarias, Lan, que genera distintas compañías con diferentes razones sociales, elude estas situaciones. «De hecho, muy pocas empresas gozan de estos privilegios. Las norteamericanas, de Bangladesh y Sri Lanka» , apunta Frecia.
Otro punto denunciado en la reunión del 5 de octubre fue la creación de sindicatos de conveniencia por parte de Lan. «A fin de dificultar la legítima organización de los trabajadores» , señala la carta. Agrega que la empresa se aprovecha «ingresando a los distintos países de la región (Ecuador, Perú, República Dominicana y Argentina) a través de acuerdos políticos en momentos de escalada de la conflictividad sociolaboral» . También resalta la coerción directa y maniobras de amedrentamiento en contra de sus trabajadores y la creación de velos societarios, «eludiendo las distintas legislaciones vigentes para dilatar y obstaculizar los procesos de negociación y diálogos formales» , señala.
Sin duda, es este punto el que más debe preocupar al ex presidenciable por los conflictos que enfrenta con Aero 2000. Como epílogo, la frase de Llano: «Todo fue hecho con Piñera y Cueto personalmente en conjunto con Cirieli, quien les facilitó todos los medios para que Lan pudiera entrar» .
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*Artículo publicado originalmente en LND (31.12.05), y que acá se reproduce con la autorización del autor, que además es columnista en Chile de porlalibre.org.