Recomiendo:
0

Las garras cada vez más insostenibles de la minería

Fuentes: Red Eco Alternativo

La minera Barrick Gold admitió que el derrame en Veladero fue de más de un millón de litros de solución cianurada. Mientras los vecinos aún no conocen ciertamente los alcances de esta contaminación en sus vidas, la justicia determinó que el emprendimiento vuelva a funcionar. La permanente lucha de las poblaciones afectadas por esta actividad. […]

La minera Barrick Gold admitió que el derrame en Veladero fue de más de un millón de litros de solución cianurada. Mientras los vecinos aún no conocen ciertamente los alcances de esta contaminación en sus vidas, la justicia determinó que el emprendimiento vuelva a funcionar. La permanente lucha de las poblaciones afectadas por esta actividad. Los casos de Jáchal y Capital en San Juan y Las Coloradas en Neuquén.

10 días después de conocerse la noticia del derrame en el emprendimiento minero Veladero en San Juan, la empresa Barrick Gold presentó un nuevo informe ante el juez Pablo Oritja de la localidad de Jáchal, quien había ordenado la suspensión de las actividades a partir de una medida cautelar efectuada por los vecinos, en el que reconoce que la cantidad de solución cianurada arrojada es de 1027 m3, esto equivale a más de un millón de litros, 4 veces más de lo que la firma había reportado al Gobierno de San Juan en el estudio preliminar. Sin embargo, este mismo jueves 24 de setiembre, el magistrado levantó esa suspensión al considerar que Veladero reforzó su seguridad.

Los vecinos y asambleístas de San Juan tenían previsto realizar una marcha este viernes 25 para exigir el cierre, remediación y prohibición de la minera. Esta decisión de la justicia no hace otra cosa que reforzar la convocatoria. A partir de las 18 llevarán adelante una caravana que partirá desde la rotonda de Albardón hasta la Plaza 25 de mayo de la capital provincial, donde a las 20 se hará el acto central.

Además de la Asamblea Jáchal No Se Toca también marchará la Asamblea Sanjuanina Contra la Contaminación y el Saqueo, desde donde emitieron un comunicado apenas se conoció el derrame. Allí señalan al gobernador José Luis Gioja como el responsable político de esta situación que lleva en realidad más de 10 años en la provincia. Los vecinos afirman que el mandatario es el principal socio comercial de la Barrick Gold y fue un impulsor dentro de la Cámara de Diputados durante la década del ’90 para la aprobación de las leyes de inversiones mineras. Señalan además que permitió el inicio de proyectos megamineros sin la licencia social necesaria.

«Denunciamos la censura mediática y el rol de complicidad de los medios hegemónicos de comunicación para ocultar sistemáticamente información sobre el impacto ambiental que genera la megaminería a gran escala a cielo abierto y con sustancias tóxicas. Como así también denunciamos el rol que durante estos años ha cumplido la Universidad Nacional de San Juan, siendo esta institución quien brinde el sustento ideológico y científico a la actividad realizada por las multinacionales. Denunciamos a las fuerzas de ‘seguridad’ de la provincia y a Barrick Gold por el constante seguimiento, intimidación y amenaza hacia por los luchadores sociales a lo largo de los años y que hoy en día está resurgiendo», agregan en el comunicado.

Finalmente, denuncian que la multinacional no solo ha contaminado el suelo sanjuanino con cianuro y mercurio, sino que también ha explotado la mano de obra local sin participación en las ganancias de la empresa y que sobre todo ha destruido gran parte de las fuentes de agua dulce como glaciares, napas, vegas, aguas subterráneas, ríos.

A diferencia de lo que ha ocurrido con otras denuncias de contaminación o conflictos con las empresas mineras, lo sucedido en Jáchal ha tenido algo de difusión en medios tradicionales. Sin embargo, este caso no es un hecho aislado. Permanentemente hay movilizaciones de vecinos de distintas localidades del país al grito de «No a la Mina, Sí a la Vida». Un ejemplo son los Vecinos Autoconvocados de Las Coloradas, de Neuquén, que se oponen a la megaminería hidrotóxica en la Sierra de Catán Líl, a solo 22 kilómetros del Parque Nacional Laguna Blanca. El río Catan Lil incluso abastece de agua a toda la zona. A pesar de que en julio de este año el Concejo Deliberante local aprobó una ordenanza que prohíbe la minería contaminante en su ejido, el proyecto que impulsa la minera Southern Copper sigue en pie.

«Anunciaron la explotación de cobre diseminado, y en el proyecto de exploración que presentó la empresa explican que van a hacer unas 10 perforaciones hasta unos 500 metros del subsuelo (…). En años anteriores otra empresa ha hecho perforaciones y ahora retoma este proyecto la empresa Southern Copper, perteneciente al Grupo México, que tiene un historial terrible y ha hecho desastres buscando sulfato de cobre en México, contaminando el río Sonora, y en Perú, en donde también fueron muy cuestionados por la contaminación en zonas como Arequipa», afirmaba hace pocos meses Martín Goettle, cura párroco de Las Coloradas, a medios locales.

Goettle pertenece a Vecinos Autoconvocados y hace unos días uniformados del Parque Nacional Laguna Blanca le hicieron un «acta de infracción» por haber colocado un cartel cerca de la ruta provincial 46 que decía «No Contaminación»- «El Río es nuestro alimento».

A través de un comunicado, los Vecinos de Las Coloradas explicaron: «en el lugar frente a la ‘Laguna Blanca’ vive una familia mapuche, donde está el rehue (lugar sagrado) de la comunidad, claro indicio de la posesión indígena reconocida en Constitución Nacional Art. 75 inc. 17 y en la Constitución Provincial Art. 53. Sabemos que para realizar una actividad en Parques Nacionales los Guardaparques siempre han indicado que se hable con la comunidad Mapuche del lugar y con sus autoridades. Siempre los habitantes de la zona lo hemos hecho así (…). Nunca se ha tenido problema con esto. Por ello, y al reconocer esto como territorio de la comunidad Zapata, los Vecinos Autoconvocados hemos pedido permiso a la familia del lugar para la colocación del cartel. Ellos nos indicaron que el lugar correcto sería al lado del camino de entrada para su vivienda. Así lo hicimos. Se ha actuado con expreso permiso de los aparentes dueños del lugar. Nos sorprende que esto no sea reconocido por los Guardaparques de Laguna Blanca».

Los vecinos recordaron además que en junio pasado habían pasado por el Observatorio del Parque Nacional Laguna Blanca e invitado al personal presente a acercarse a una de las reuniones de los Autoconvocados para compartir la preocupación por el impacto del proyecto minero, y para articular acciones y estrategias de resistencia, pero no hubo respuesta a la convocatoria.

«El cartel invita a no contaminar y a cuidar el medio ambiente, un mensaje supuestamente en sintonía con los objetivos de los Parques Nacionales (…). Deberían apoyar a nuestros reclamos y no perseguir a los mismos», reflexionaron los vecinos en el comunicado.

Sin duda, los intereses que generan los emprendimientos mineros son realmente abarcativos e inconmensurables, y no lo son solo para los empresarios y gobiernos que se encuentran detrás (o adelante) de los proyectos. De todos modos, la lucha de los vecinos de las distintas localidades afectadas permanece igual de firme como el primer día en que estos mega proyectos empezaron a acercarse a suelo argentino.

Fuente: http://www.redeco.com.ar/index.php?option=com_content&view=article&id=16915:las-garras-cada-vez-mas-insostenibles-de-la-mineria&catid=16:ambiente&Itemid=507