Si la política en general pasa ordinariamente por una dimensión lingüística que en sí misma es un bodrio al estar sometida tanto a la paradoja permanente como a la dislocación, en materia internacional la política llega a alcanzar niveles de auténtica paranoia. (Expresión, por cierto ésta, hoy tan frecuente en la Red entendida como trastorno […]
Si la política en general pasa ordinariamente por una dimensión lingüística que en sí misma es un bodrio al estar sometida tanto a la paradoja permanente como a la dislocación, en materia internacional la política llega a alcanzar niveles de auténtica paranoia. (Expresión, por cierto ésta, hoy tan frecuente en la Red entendida como trastorno de la percepción aplicado fácilmente a cualquier tesis o hipótesis oficiosa)
Cualquier propósito de integrar, pues, un lenguaje coherente -coherente entre el significante y el significado moral eterno-, se hace añicos ante tanto despropósito; o más bien tanto propósito deliberado de lavar al mundo el cerebro imponiéndole la óptica del depredador.
Tan pronto se emplean calificativos propios de tiempos de paz aplicados a una guerra absolutamente sintómatica como la situación que se vive en Irak, como propios de guerra aplicados a la paz que disfrutamos los que no la padecemos directamente. Las palabras, los términos y los conceptos se interfieren unos a otros anulando a menudo el sentido más elemental de los mismos… Y lo peor es que son los periódicos, arrastrando al resto de los medios, los que contribuyen a acostumbrarnos a ese lenguaje despreciable e incluso lo fijan…
Tres botones de muestra:
1- «Grupos violentos, secuestran a tres occidentales exigiendo la liberación de mujeres presas en dos las cárceles de Abu Ghraib y Um Qasar».Cuando lo que quieren decir, pero no se atreven, es: «Combatientes iraquíes secuestran a tres enemigos, dos norteamericanos y un británico e imponen condiciones». No son tres occidentales cualesquiera. Son tres individuos que forman parte de la ocupación. No nos van a arrastrar a su huerto confundiéndoles con tres occidentales enemigos del islam…
¿Es preciso recordar al periódico un lenguaje preciso y más conforme a la moral, a la simetría y a la equidad que no hay nada más violento que una guerra unilateral; que una guerra llevada al escenario de las tierras luego permanentemente ocupadas; que bombardear ciudades, encarcelar, torturar y matar impunemente a diestro y siniestro para apropiarse de la riqueza del país invadido?
2 «Bush (ahora, con elecciones a la vista) tiende la mano a la ONU». Después de haber pisoteado a la ONU, de haberla sodomizado con sus compinches y haber atronado al mundo hace dos años diciendo que si la ONU no amparaba su ataque, de todos modos atacaría -y así lo hizo. La ONU, cuyo Secretario General acaba de declarar con valentía que esta guerra y la ocupación son ilegítimas…
3 «La ONU amenaza a Sudán (por si tuviera poco con su apocalipsis particular) con sanciones si no garantiza la seguridad» en la zona de Darfour, la petrolera. Es decir la ONU amenaza a Sudán si no se permite a los USA saquear con más tranquilidad el petróleo de ese país, como lo saquea en Irak desde Basora.
Esto lo entresaco de la prensa de hoy. Y así un día tras otro hasta que nuestro espíritu y nuestro seso terminen aceptando la infamia cometida por unos monstruos y consentida por la mayor parte del mundo, como una fuente de parabienes para todos.
¡Y todavía tantos insisten en predicarnos optimismo!