«Treinta años de lucha. Treinta años de vida venciendo a la muerte. Treinta años de parir otro país», cumplieron este lunes las Madres de Plaza de Mayo, en un día en el que se recordará aquel 30 de abril de 1977, cuando 14 mujeres se reunieron en la céntrica Plaza de Mayo de Buenos Aires […]
«Treinta años de lucha. Treinta años de vida venciendo a la muerte. Treinta años de parir otro país», cumplieron este lunes las Madres de Plaza de Mayo, en un día en el que se recordará aquel 30 de abril de 1977, cuando 14 mujeres se reunieron en la céntrica Plaza de Mayo de Buenos Aires para reclamar a sus hijos desaparecidos por la dictadura argentina (1976-83), sin sospechar que los desaparecidos de aquella represión llegarían a 30 mil.
Las Madres de Plaza de Mayo cumplen este lunes 30 años de una lucha que comenzó con el objetivo de encontrar a sus hijos desaparecidos en la feroz dictadura argentina (1976-83) y que aún en democracia continúan demandando justicia por el mundo.
Las actividades en ocasión del trigésimo aniversario de esta agrupación, que se iniciaron el pasado 20 de abril, continuaron este domingo con la realización de un gran mural frente a la sede principal de la Asociación Madres de Plaza de Mayo.
Los actos conmemorativos de aquel 30 de abril de 1977, cuando la Madres en un acto de coraje se concentraron en la Plaza de Mayo para reclamar a sus hijos desaparecidos por la dictadura, concluirán este lunes con un concierto de música latinoamericana, que contará con la participación de artistas de la talla de Juan Carlos Baglietto, Víctor Heredia y Javier Calamaro, además de la presentación especial de la Orquesta Nacional de Música «Juan de Dios Filiberto».
De acuerdo con el programa, la orquesta Juan de Dios Filiberto, dirigida por Atilio Stampone, interpretará la obra ganadora del concurso «30 años de vida venciendo a la muerte», organizado por la Asociación.
En la fiesta, se otorgará a nacionales y extranjeros solidarios con su lucha el premio «Asociación Madres de Plaza de Mayo: 30 años juntos», entre ellos Gregorio Hairabedian, Teresa Parodi, Inés Vázquez, Pedro Lanteri, Ana María Sabio, de Malmöe (Suecia), Javier Arjona de Asturias (España), Renato de Nicola de Pescara (Italia), Carlos Aznarez, Luis Borri, Antonio Rojas Salinas y el Ministro de Cultura de Cuba, Abel Prieto.
Y es que hace 30 años, cuando arreciaba el terrorismo de Estado en Argentina, 14 mujeres se reunieron en la Plaza de Mayo para reclamar por sus hijos desaparecidos, sin saber que aquel día sería tomado como el acto de coraje fundacional de la organización.
Desde aquel día, y sin sospechar que los desaparecidos de aquella dictadura llegarían a 30 mil, según los organismos humanitarios, la lucha de estas madres, con sus emblemáticos pañuelos blancos, ha recorrido el mundo entero.
La lucha fue llevada hasta Yugoslavia, cuando en plena guerra de los Balcanes, Hebe Bonafini, una de las fundadoras, actuó como escudo humano contra los bombardeos, lo que le valió una distinción «del Pueblo de Yugoslavia» en 1999.
Azucena Villafor de De Vicenti, fue la que tuvo la iniciativa de juntarse en la Plaza de Mayo para rechazar las injusticias de la dictadura de Jorge Videla (1976-83), y su grupo de represores, y por ello fue secuestrada el 10 de diciembre de 1978 y arrojada desde un avión militar al mar.
Su cuerpo fue devuelto por las aguas y apareció en las costas bonaerenses y enterrado sin identificar en un cementerio local, pero el relato de testigos permitió que sus restos fueran exhumados e identificados en 2005, para ser sepultados simbólicamente en la misma Plaza de Mayo.
De Vicenti y otras madres habían sido víctimas directas del ex capitán Alfredo Astiz, el «ángel rubio de la muerte», que las señaló tras infiltrarse en la organización como supuesto hermano de una desaparecida.
Con «treinta años de lucha», con sus «treinta veces doce meses seguidos, con sus mil 562 jueves correspondientes, de luchar con sus hijas e hijos» el compromiso de estas mujeres está más vivo que nunca.
El pasado jueves, unas 13 Madres que rozan los 80 años cumplieron su «ronda» número mil 562 en la Plaza, con un ayuno en respaldo de docentes en lucha.
«Aparición con vida (de los desaparecidos)», «Juicio y Castigo a todos los culpables», «Cárcel a los genocidas», «Ni olvido ni perdón», han sido algunas de las consignas de las Madres, quienes ahora gritan que «El hambre es un crimen» y reclaman «Distribución de la riqueza ya».
Innumerables han sido los reconocimientos que estas Madres han recibido en estas tres décadas de lucha, desde el Premio «A la lucha por la Vida», otorgado en 1980 por la Universidad de Essen, Alemania; el Premio UNESCO de Educación para la Paz, en París en 1999; el Premio Nonino al «Maestro de nuestro tiempo», en Italia (2006); hasta la Orden del Mérito en Ecuador; así como galardones en Asturias.
Hoy en día hay calles, plazas y monumentos con el nombre «Madres de Plaza de Mayo» en ciudades de Alemania, Holanda, España y Francia.