Los mensajeros aseguraron: «Nos ‘plantamos’ ante la represión policial y una nueva negativa del gobierno». La marcha convocada por el Sindicato Independiente de Mensajeros y Cadetes terminó con la detención de tres trabajadores por policías de civil. Hoy a las 12:00 horas está prevista una conferencia de prensa. Además, a las 16:00 una comisión será […]
Los mensajeros aseguraron: «Nos ‘plantamos’ ante la represión policial y una nueva negativa del gobierno». La marcha convocada por el Sindicato Independiente de Mensajeros y Cadetes terminó con la detención de tres trabajadores por policías de civil. Hoy a las 12:00 horas está prevista una conferencia de prensa. Además, a las 16:00 una comisión será recibida por autoridades del Ministerio de Trabajo.
Los trabajadores nucleados en el Sindicato Independiente de Mensajeros y Cadetes movilizó desde el Obelisco al Ministerio de Trabajo para reclamar por el otorgamiento de la personería jurídica. Las autoridades oficiales rechazaron, ayer, este reclamo. En la desconcentración fueron reprimidos y detenidos tres trabajadores.
En el día de hoy está prevista una conferencia de prensa en el local de la calle Venezuela 1225, y a las 16 una nueva reunión en el Ministerio de Trabajo. Luego de esta instancia, los trabajadores diseñarán la continuidad del plan de lucha.
Durante la tarde del miércoles, los trabajadores gestionaron una audiencia con autoridades del Ministerio de Trabajo. Desde las 18 se concentraron en el Obelisco y comenzaron a marchar, una hora más tarde, alrededor de doscientos cincuenta motos y bicicletas. Tomaron Av. Corrientes hasta L.N. Alem frente al Ministerio de Trabajo.
La reunión con autoridades de segunda línea no tuvo resultado positivo. «Los papeles están en regla desde hace mucho tiempo, si no sale es por una cuestión política» aseguró Diego, uno de los trabajadores. «Al gobierno no le interesa que cerca de cuarenta mil trabajadores esté en la precariedad absoluta. Por eso consideramos que la negativa sistemática al otorgamiento de la personería jurídica es una cuestión política».
El reclamo contó con el apoyo de varias organizaciones gremiales que enviaron sus representantes.
Oscar Arturo, delegado de Metrovías (línea A) expresó: «Nosotros vinimos a apoyar la lucha de los compañeros de SIMECA. Desde hace tiempo trabajamos juntos con todas las organizaciones de trabajadores en lucha. Un gesto de mínima solidaridad es seguirlos en este justo reclamo. En definitiva, vemos el sindicato como herramienta de organización y lucha por las necesidades del sector».
Marcos Britos, trabajador del Recortorado de la UBA: «Acompañamos a los muchachos del sindicato, en el reclamo de legalizar esta organización gremial para que la actividad deje de ser un trabajo casi esclavo. Debe ser un trabajo verdaderamente asalariado, con jubilación, y todas los beneficios básicos de un trabajador. Casi una cuestión elemental. Todo este fenómeno hay que acompañarlo y sostenerlo porque si esta juventud logra organizarse es un mecanismo de transmisión para el movimiento obrero. Además que este sindicato tiene connotaciones ideológicas positivas, a mi entender, como el clasismo y los mecanismos de democracia directa. Aún cuando esto no fuera así es algo que se debe acompañar y apoyar».
Represión policial
Cerca de las 20 horas, al comenzar la desconcentración por Leandro N. Alem, la columna de mensajeros y cadetes entró por la calle Reconquista donde un cordón policial quiso impedir el ingreso a la Plaza de Mayo. La presión de los trabajadores lo hizo ceder y continuó el desplazamiento hacia Av. De Mayo. En la intersección con la peatonal Florida, un auto blanco con cuatro policias de civil se cruzó con el final de la movilización y detuvo a César Besone, Franco Armando y Carlos Maques. Este último trabajador fue golpeado con palos por el personal policial, permaneció con la cabeza ensangrentada en el asfalto hasta ser trasladado por una ambulancia del SAME.
En el operativo policial, a cargo del comisario Paladino, intervino la comisaría Nº2 de la Capital Federal. Los efectivos cortaron la circulación de la Av. De Mayo desde Florida hasta Chacabuco hasta las 21 horas, cuando la manifestación se trasladó a la puerta de la comisaría, donde se alojó a los detenidos.
María del Carmen Verdú, abogada de Correpi (Coordinadora contra la Represión Policial e Institucional) precisó: «Los cargos que les imputan a los trabajadores son resistencia a la autoridad y disturbios. El juez que interviene es el Dr. Ponce del Correccional Nº4»
Luciano, encargado de prensa de SIMECA ratificó: «Nos ‘plantamos’ ante la represión policial y una nueva negativa del gobierno.»