El director de Parques Nacionales nombrado por Mauricio Macri a pocos días de asumir, Eugenio Bréard, es un ex directivo de Phillip Morris que se opuso sistemáticamente a las leyes anti tabaco y de reparación a enfermos de cáncer. Antes de asumir como funcionario público era representante por la Ciudad de Buenos Aires en la […]
El director de Parques Nacionales nombrado por Mauricio Macri a pocos días de asumir, Eugenio Bréard, es un ex directivo de Phillip Morris que se opuso sistemáticamente a las leyes anti tabaco y de reparación a enfermos de cáncer. Antes de asumir como funcionario público era representante por la Ciudad de Buenos Aires en la Corporación Puerto Madero. Es el funcionario que evitó una salida negociada con las comunidades mapuches y pidió el desalojo compulsivo en Mascardi, que culminó con la muerte de Rafita Nahuel. Ahora se niega a sentarse en la Mesa de Diálogo propiciada por el obispo de Bariloche y en la que están, incluso, otros organismos de gobierno. Otras tomas mapuches en el mismo predio culminaron de manera pacífica luego de una negociación de las autoridades de Parques.
Marí, marí. El saludo de Jessica Millalonco, de la comunidad mapuche de Bariloche resonó, en el aula magna del Centro Regional de la Universidad del Comahue: el espacio elegido por los representantes de la mesa de diálogo para emitir un comunicado ante la prensa. Apenas pasadas las 16 horas anunciaron que leerían el manifiesto pero no responderían preguntas.
Comunidades autoconvocadas del Pueblo Mapuche; APDH de Bariloche; organizaciones gremiales; el Instituto Nacional de Asuntos Indígenas (INAE), la defensora del Pueblo municipal, Beatriz Oñate y el obispo de San Carlos de Bariloche Juan José Chaparro -figura central para una salida pacífica a este conflicto- intervienen entre la comunidad Lafken Winkul Mapu y el gobierno nacional por la ocupación de tierras en Villa Mascardi. El gran ausente es Parques Nacionales que se niega al diálogo. Una vez más.
El territorio donde ocurrió el asesinato del joven Rafael Nahuel a manos de la Prefectura el pasado sábado es un lote fiscal del Parque Nacional Nahuel Huapi, frente al Lago Mascardi. La intervención de la fuerza fue, en última instancia, a raíz de una denuncia realizada por las autoridades Parques que, en todo momento, evitaron dar la cara y sumarse al diálogo para alcanzar la paz. Tal vez esto tenga que ver con el director de Parques Nacionales, nombrado en un decreto del 25 de enero de 2016 por el presidente Mauricio Macri. Se trata de Eugenio Indalecio Bréard, caracterizado por el Diario la Voz como «un hombre pro».
Breard, según el CV subido en la página oficial de Parques, «cumplió funciones en la empresa Philip Morris Internacional durante 25 años, en donde se desempeñó como Director de Marketing, Gerente General y Vicepresidente de la filial argentina. Desde 2008, «Chipi» -como lo llaman sus allegados- alternó entre la Presidencia y la Vicepresidencia de la Corporación Antiguo Puerto Madero, sociedad anónima de propiedad estatal». El diario La Nación agrega el dato de que allí reportaba a Mauricio Macri como representante por la Ciudad de Buenos Aires. De hecho sostiene una relación de amistad con la familia Macri y el presidente se aloja habitualmente en su complejo Country Club Cumelén, en Villa La Angostura para descansar, participar de eventos, celebrar cumpleaños o mantener reuniones con funcionarios. El ex presidente de Estados Unidos, Barack Obama, se hospedó en su residencia cuando estuvo de visita en Argentina el año pasado.
Luego de su larga carrera en la tabacalera, desde donde se opuso sistemáticamente a las leyes concientización, limitación de la publicidad y reparación de daños a enfermos de cáncer de pulmón y vías respiratorias, fue el representante del estado en la Corporación (de Negocios) Puerto Madero. El diario La Voz lo denomina un «hombre del PRO». La relación fue bien, y a los 69 años un ex lobbysta de las tabacaleras administra una importante porción del patrimonio ambiental argentino, sin tener la más mínima idoneidad para desempeñar el cargo que le fue asignado.
Su primera tarea como director de Parques Nacionales fue la colocación de carteles desde los Siete Lagos a Villa La Angostura que es la zona donde está situado su complejo.
El manifiesto
En el documento todas las partes intervinientes bogan por «una salida pacífica del conflicto». En tanto que las comunidades mapuches autoconvocadas expresaron que «se encuentran en un proceso interno de consulta para traer a la mesa de diálogo una propuesta formal, en el marco de las leyes y reconocimientos constitucionales vigentes» (…) «tomando en cuenta nuestras formas culturales de toma de decisión».
Pero llama la atención que en el comunicado «se destaca la ausencia de Parques Nacionales» que sigue en la postura firme de «no sentarse a la mesa mientras continúe la ocupación» con una orden expresa desde la Administración de Parque Nacionales (APN) de no hacer declaraciones a la prensa.
Por su parte, los trabajadores del Parque Nacional Nahuel Huapi -afiliados y no afiliados a ATE- le solicitaron a las autoridades de la APN «la participación en la mesa de diálogo en pos de la resolución pacífica del conflicto y a fin de evitar más sucesos de violencia y muerte». Se trata de Eugenio Indalecio Bréard, quien viene nada menos que de ser el vicepresidente de una multinacional tabacalera.
Constituidos en asamble y a través de un comunicado los trabajadores rechazan «todos los actos de violencia que se sucedieron en las últimas semanas con motivo de la reivindicación territorial de la comunidad mapuche Lafken Wincul Mapu en Villa Mascardi» así como también repudian «las acciones de violencia institucional así como también las acciones de amenazas de muerte y agresiones por las personas involucradas en la ocupación a los trabajadores del Parque Nacional».
«La ocupación de tierras por comunidades indígenas dentro de los límites de parques nacionales es un asunto que sucede con frecuencia» cuenta a Nuestras Voces un guardaparque que prefiere el anonimato para no poner en riesgo su trabajo.
El guardaparque dice que «en los últimos años han sido ocupados territorios en reiteradas oportunidades pero las resolvíamos dialogando y de manera pacífica, nunca con violencia».
La APN está en la órbita del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sustentable, que tiene al frente a Sergio Bergman. Los trabajadores del Parque no guardan un gran recuerdo del rabino ya que vino para los incendios del verano 2016, luego pidió rezar para evitarlos y prometió instalar una escuela nacional de guardaparques en el viejo hotel de Villa Mascardi. Los fondos nunca llegaron.
Casualmente el viejo hotel -que se convertiría en escuela- se encuentra a escasos metros de las tierras ocupadas por la comunidad Lof Lafken Winkul Maipu.
Construir el enemigo
Con camisa negra y una cruz de plata a la altura del pecho, el obispo Juan José Chaparro miraba directo a la puerta buscando la salida más rápida. Sus declaraciones de las últimas horas han sido: «No conozco la existencia de la RAM. Me parece que se está armando un enemigo».
Consultado por Nuestras Voces el prelado reafirma sus dichos y asegura «no los conozco, jamás vi sus rostros. Por ahí se han suscitado hechos de violencia como cuando se quemó el refugio de montaña pero no creo que sea una organización como Sendero Luminoso».
Chaparro es uno de los mediadores más importantes y con mayor peso dentro de la mesa de diálogo y desde su punto de vista «la mayoría del pueblo mapuche está queriendo negociar en paz».
Dentro de la negociación, tal como se manifestó en el documento leído, «se propone armar una comitiva para que la Machi pueda entrar a tratar con los detenidos».
Por último la mesa resaltó «el carácter intercultural de este proceso de diálogo, por lo que respeta las pautas culturales del pueblo mapuche, sus tiempos de deliberación para construir consensos en el marco de la diversidad y el ejercicio de la identidad que, en definitiva, se encuentra amparado y reconocido en marco jurídico nacional».
En este contexto la causa que investiga el asesinato de Rafael Nahuel continúa su curso con escasa información, la ciudad de San Carlos de Bariloche está militarizada por la cumbre del G-20 que el domingo se realizará en el hotel Llao-Llao y la ciudad se divide entre los que celebran el accionar de las fuerzas represivas y los que piden justicia por el joven asesinado.