Comentábamos en el último post que hablaríamos de Wikileaks cuando hubiera podido ampliar información, sobre todo alrededor de su cabeza visible, Julian Assange. Varias lecturas han ocurrido en estos dos días (NYT, The economist, The Wall Street Journal y muchas más derivadas del hashtag #wikileaks), sobre todo la de la entrevista a Assange que publicaba […]
Comentábamos en el último post que hablaríamos de Wikileaks cuando hubiera podido ampliar información, sobre todo alrededor de su cabeza visible, Julian Assange.
Varias lecturas han ocurrido en estos dos días (NYT, The economist, The Wall Street Journal y muchas más derivadas del hashtag #wikileaks), sobre todo la de la entrevista a Assange que publicaba Forbes recientemente, pero también diversas noticias y artículos de opinión, entre los que destacaría otra entrevista, esta vez a Stallman, con conclusiones tan definitivas como «WikiLeaks es un modo de resistencia contra estados que odian nuestras libertades».
De todo ello destacaría las diversas claves para ampliar y entender el fenómeno que os dejo a continuación:
1. El tema molesta, y mucho, a los estados (sobre todo a EEUU): Assange está en busca y captura, a pesar de que se avisa de que hay mucha más gente detrás del tema y de que «si algo le pasa, las partes más decisivas, de los despachos de la diplomacia estadunidense, serán publicadas automáticamente». Se producen desde las últimas filtraciones ataques de denegación de servicio contra el sitio de Wikileaks, a los que Amazon responde demostrando lo que ocurre cuando un site alojado en su nube tiene problemas y expulsa a Wikileaks de sus servidores. Suceden después problemas para alojar las DNS en alguno de los servidores de nombres de dominio en el mundo. Y pronto podríamos vivir, incluso, la declaración por parte del gobierno de US de Wikileaks como una organización terrorista. De hecho hemos tenido que leer ya, hasta alguna amenaza de muerte pronunciada por político y publicada en prensa (en Canadá).
(Actualización poco antes de cerrar el post) Nos queda mucho por leer acerca de Censura en Internet, buenas oportunidades de darnos cuenta de quien y quien no cree en la libertad de expresión: sospechas de que twitter reduce el impacto del término y no lo convierte en trending topic, Paypal que acaba de congelar la cuenta de donaciones contra usuarios que ponen a disposición sus recursos de alojamiento web para posibilitar que el entorno siga en pie: «mass-mirroring begins! Give server space to fight #censorship», nos dicen en twitter, instando a la viralización del mensaje y recordando el llamado «efecto Streisand» (#StreisandEffect), a la viralización del mensaje (similar al «please RT»)
2-WikiLeaks se diseña para lograr un capitalismo más libre y ético: Lo dice Julian en las entrevistas y coincide Stallman: «es una defensa contra las mentiras asesinas de los estados».
3-Tenemos la sensación del excesivo protagonismo de la prensa tradicional, de la televisión, de los mass media en general, en toda la historia, quizás para compensar la primera parte (wiki) de la palabra como símbolo de una información ciudadana que sin duda les roba terreno. Visto en positivo se demuestra que sigue su relevancia, que en este caso, a diferencia de lo que pudo pasar con otros, todos/as viajamos en el mismo barco por la libertad de expresión. Así, 4 años después de la mítica portada de Times que hablaba de «nosotros» como los protagonistas de la actualidad informativa, icono histórico ya de la web 2.0 o social, se solicita ahora que el personaje del año sea Assange.
Stallman nos deja una precaución, a la que me uno, al repecto: «Pienso que WikiLeaks tendría que mantenerse más cerca de los escándalos que constituyen delitos, de los cuales hay muchos. Pienso que publicar comunicaciones privadas entre diplomáticos, cuando no hay nada importante detrás ellas, implica un riesgo de obstaculizar toda comunicación. Y esto no es deseable.»
4-Surgen muchas preguntas, sospechas alrededor de la «bondad» o neutralidad ideológica de la iniciativa: ¿Porqué ahora que puede afectar al gobierno de Obama? ¿a qué intereses ideológicos obedece? Las creo precipitadas, a la luz de las informaciones que parecen anunciar futuros y diversos leaks: acerca de bancos, compañías petrolíferas (BP), la industria farmacéutica, espionaje industrial, etc… Se critica también, en este sentido, que solamente se ataque a unos y no a otros: ¿Porqué no se desvelan datos sobre los Talibanes, se pregunta a Assange?, a lo que él responde que estará encantado de publicar acerca de ello si el ciudadano, que es quien alimenta Wikileaks, hace llegar información al respecto.
5-La parte negativa está en la creación de un mundo más desconectado, más inseguro, más vulnerable a posibles ataques terroristas, después de las filtraciones en cuestión de relaciones internacionales, en Wikileaks.
6-Nuevos datos sobre la figura de Assange, su biografía, me lo hacen especialmente fiable: Se trata de un personaje «especial», criado en un ambiente familiar progresista. Como ejemplo, fue educado fuera de la escuela porque su madre no quería que le influenciara la autoridad. Se trata de un hacker vocacional que publica sus principios, su coraje, que se atreve a lanzar una iniciativa, por potente y explosiva que sea, para hacer realidad sus ideas. No creo (y esto es, obviamente, una opinión subjetiva) que busque protagonismo…
Forbes amplía datos sobre su ideología: ¿Qué significa Wikileaks en el ámbito de los negocios? Assange responde: WikiLeaks significa que es más fácil hacer negocios «éticos» y más difícil si no lo son. Empresas honestas, que tratan bien a sus empleados y producen productos de calidad serán más competitivas que las empresas deshonestas, que producen malos productos y tratan mal a sus empleados.
7- Culminación, en cierto modo, de la corriente ideológica y cultural de la web social, se trata de un fenómeno con múltiples extensiones:
Esto es solo el principio. La idea se expande y multiplica, desde la platafomra de Assange o las nuevas surgidas. Daniel Domscheit-Berg, por ejemplo, crea una organización paralela, en un ecosistema desafortunadamente necesitado de entornos para alojar las múltiples filtraciones que emergen a diario.
Se trata de un fenómeno, más que de una organización, demostración, en mi opinión, de lo que bien explica Robert Wright en «No suma cero» (No zero sum) y ha venido demostrándose en distintos experimentos en Psicología social (dilema del prisionero, entre otros), de cómo de importante es el sentido de la justicia para el ser humano. También, como reconoce el propio Assange, de lo contagioso de la valentía, del coraje: Si demuestras que se puede filtrar algo y seguir viviendo sin problemas, el comportamiento crece de forma exponencial.
Wikileaks hace, en definitiva, una sociedad mejor: Más que lamentarnos de la privacidad que dejamos atrás de camino a la sociedad de la transparencia, creo que debemos valorar el fenómeno Wikileaks y lo que puede significar de sociedad mejor.
Nos habla el gran Kevin Kelly en su último libro, What technology wants, acerca de la evolución, siempre positiva y gracias a la tecnología, de la humanidad. La noción de progreso, de que «cualquier tiempo futuro es mejor» es reciente y propia de nuestros tiempos. Y no significa que la tecnología comporte elementos negativos si es mal utilizada, pero una vez valorado lo positivo y lo negativo podemos concluir en que un 60, 70 o 80% de los cambios provocados por la misma cada año son a mejor. Hay más bien que mal en el mundo y aunque no sea por mucha diferencia, podemos afirmar que cada año vivimos en un lugar un 1% mejor.
Pase lo que pase, de lo mucho que vamos a hablar de ello, tomo su idea y la amplifico para Wikileaks. Como culminación de la libertad natural de los bits, de la web 2.0 y la autocomunicación de masas, del empoderamiento para el ciudadano que supone, el mundo es un 300% mejor desde que existe.
Terminar manifestando mi soporte a WikiLeaks, Julian Assange y lo que representan. Ya he añadido un twibbon a mi avatar en twitter en señal de ello. Podemos realizar donaciones, también, desde el enlace.