Un fantasma recorre el estado de Morelos a un siglo del asesinato del general Emiliano Zapata en Chinameca. Comunidades indígenas-campesinas morelenses, que siguen resistiendo por tierra, agua y vida, se sienten traicionadas por Andrés Manuel López Obrador (AMLO), al pretender imponer el gobierno de la Cuarta Transformación, como los gobiernos neoliberales anteriores, el llamado Proyecto […]
Un fantasma recorre el estado de Morelos a un siglo del asesinato del general Emiliano Zapata en Chinameca. Comunidades indígenas-campesinas morelenses, que siguen resistiendo por tierra, agua y vida, se sienten traicionadas por Andrés Manuel López Obrador (AMLO), al pretender imponer el gobierno de la Cuarta Transformación, como los gobiernos neoliberales anteriores, el llamado Proyecto Integral Morelos (PIM), y echar andar la termoeléctrica de Huexca.
De viva voz y por medio de La Voz de Huexca en Resistencia, un modesto periódico de quienes en este pueblo mantienen la lucha contra la termoeléctrica que se construyó en su territorio, sin consulta ni autorización de sus habitantes, expresan, con tristeza y enojo, las contradicciones programáticas entre el otrora candidato y el ahora Presidente, mostrando un video de 2014 en el que AMLO enunció: Yo aquí quiero expresarles que nosotros vamos a defender con todo lo que podamos a los pueblos, que no queremos esa termoeléctrica, y no queremos tampoco las minas que van a contaminar las aguas. Imagínense lo que significa el que en esta tierra donde nació Emiliano Zapata, el mejor dirigente que ha habido en la historia de México, aquí, en Anenecuilco, ahí quieren llevar a cabo una termoeléctrica.
Desde que se diera a conocer el PIM y se iniciaran sus trabajos, el movimiento opositor de los pueblos no ha cesado en los tres estados, al igual que la represión. La lucha se organiza fundamentalmente en el Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra y Agua, Morelos, Puebla y Tlaxcala y la Asamblea Permanente de los Pueblos de Morelos, que se activan en contra de los proyectos desarrollistas que para las comunidades significan muerte, despojo de tierras y devastación del medio ambiente. En Morelos, la lucha contra el PIM se inicia desde 2013. Huexca, Amilcingo, Jantetelco y Ayala son centros destacados de resistencia contra el proyecto.
Estas organizaciones demuestran que los habitantes de los tres estados, 24 municipios y cientos de comunidades se verán afectados de diversas maneras. El gasoducto de 30 pulgadas de diámetro recorrerá 170 kilómetros de largo, trasportando diariamente 320 millones de pies cúbicos de gas natural, con todo el peligro real que esto conlleva, y tomando muy en cuenta que la ruta es zona sísmica y considerada de riesgo medio y alto por la proximidad del Popocatépetl. Asimismo, por el acueducto, de 12 kilómetros de largo y casi un metro de diámetro, se saqueará el agua que nutre la vida agrícola de la región indígena-campesina de Morelos.
El 9 de febrero de este año, los integrantes del Campamento Zapatista en Defensa del Agua del Río Cuautla, localizado en San Pedro Apatlaco, municipio de Ayala, Morelos, hicieron pública una Carta abierta al Presidente Andrés Manuel López Obrador
, en la que se posicionan contra la controvertida consulta ciudadana de este fin de semana, informan sobre sus dos años y medio de plantón en resistencia para impedir el despojo del agua del río Cuautla para la termoeléctrica de Huexca, por parte de la Comisión Federal de Electricidad, y destacan los amparos ganados para la suspensión definitiva del proyecto.
El 19 de febrero se ratificó una queja ante la Comisión Nacional de los Derechos Humanos en la que se demanda al Estado mexicano la eliminación de la consulta ciudadana
, violatoria de los derechos humanos y los que corresponden a pueblos originarios, acorde a Protocolo del Convenio 169 de la OIT. Asimismo, se solicitó el otorgamiento de medidas cautelares, tanto federales, como estatales, que protejan los derechos de manifestación de las y los ciudadanos opuestos al PIM y, particularmente, a integrantes de los pueblos originarios organizados en oposición a dicho proyecto.
En la madrugada de ayer, un grupo armado asesinó a Samir Flores Soberanes, un connotado miembro del FPDTA-MPT, en su casa en Amilcingo. Esta organización externó que: «Desde el pasado 11 de febrero el FPDTA advirtió en una carta pública dirigida a López Obrador, que sus declaraciones de apoyo a la termoeléctrica y el discurso de descalificación y odio que realizó en Cuautla a los defensores de la tierra y el agua, al anunciar la consulta pública sobre el PIM, podría generar mayor violencia… Hoy están los resultados de los oídos sordos de Obrador… Este fue un crimen político por la defensa de los derechos humanos que Samir y el FPDTA lleva contra el Proyecto Integral Morelos y por la autonomía y autodeterminación de los pueblos»
Así, con consultas amañadas de un presidencialismo reconfigurado con 30 millones de votos, el PIM tratará de imponerse, mientras AMLO culpa al conservadurismo de la extrema izquierda
por las protestas en su contra en Cuautla, donde mantas destacaban: Señor presidente, usted tendrá su termoeléctrica, nosotros a cambio la muerte
, La vida no se negocia, la muerte no se consulta.
A Samir Flores Soberanes, luchador por la vida.
Fuente: http://www.jornada.com.mx/2019/02/21/opinion/016a1pol
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